González Iñárritu en Venecia: "México para mí es un estado de ánimo, no solo un país"
- por © Mónica Uriel (Venecia)-NOTICINE.com
El mexicano Alejandro González Iñárritu estrenó este jueves en la Mostra de Venecia su nuevo trabajo, "Bardo, falsa crónica de unas cuantas verdades", la película protagonizada por Daniel Giménez Cacho con la que regresa -en su idioma materno- a su país, tras años trabajando para Hollywood. En el que dijo era el día del aniversario de su partida con la familia a EEUU, el chilango quiso presentarse ante la prensa internacional hablando en español.
"Cuando uno regresa a su país es como encontrar a un nuevo amigo y esta película es una representación emocional de una memoria", aseguró "El Negro". "La hice de una manera valiente y lo más difícil fue compartir esos recuerdos. Cuando haces eso compartes tu corazón, que es una área muy delicada", agregó. "Decía Buñuel que el cine es un sueño dirigido, y esta película para mi fue eso. El cine y los sueños no tienen tiempo", comentó en la rueda de prensa, donde fue acogido con un largo aplauso.
"Bardo" también cuenta el regreso de un periodista y director de documentales a su país, México. A través de su crisis existencial lidia con su identidad, las relaciones familiares, la locura de sus recuerdos y el pasado de su país. Busca respuestas en ese pasado para reconciliarse con quién es en el presente.
"México -afirmó- para mí es un estado de ánimo, no solo un país. Cada país al final es un estado de ánimo. Las historias sobre nosotros mismos que nos han contado. Pero cuando te alejas de ese lugar y cuando el tiempo pasa, este estado mental se disuelve y cambia. Y esto fue parte de la investigación que asume esta película, la interpretación de este anhelo".
Iñárritu habló por supuesto de lo que ha significado trabajar con Netflix, una plataforma con la que se siente agradecido, tanto por la libertad que le dio al realizar su película como por tener la posibilidad de mostrarla en salas de cine antes de que se vea en streaming. "Esto es algo que realmente aprecio. No solo porque me apoyaron y me dejaron totalmente libre, sino que han sido extremadamente generosos al permitir que las personas experimenten esta película en las salas de cine. Eso era algo especialmente importante para mí y es un gesto excepcional de Netflix hacia mí, porque creo que esta es una película que pertenece a este tipo de experiencia", aseguró.
No obstante, el cineasta mexicano subrayó que el cine hoy está ante cambios muy profundos, que no benefician precisamente al tradicional visionado en una sala con una gran pantalla. "No se puede ir contra la corriente predominante", sentenció, refiriéndose a las plataformas.
Agregó que tampoco estamos ante un fenómeno completamente novedoso: "Mi generación ha visto películas de grandes autores y cuando estudiaba cine, además de exposiciones y festivales, veía todas las películas de Bergman, Buñuel o Fellini, en una tele con cintas VHS de calidad pésima. Si tenía que ir al baño, paraba la película. Así que todos nos vemos obligados a detener los visionados. Pero lo que queda son nuestras ideas. Una película es una película. Es solo un medio".
Respecto del futuro de su carrera, dijo sentirse cada vez más lejano del cine realista: "No sé qué voy a hacer ahora. Llevaba siete años sin hacer una película, solo hice una instalación virtual y desde entonces no había tocado una cámara. No sé cuándo lo volveré a hacer. Cada vez me interesa menos la realidad en el cine, porque los sueños son más interesantes, sería muy difícil para mí hacer una película con actos y esas construcciones mentales me interesan muy poco".
"Bardo" se estrenará en cines mexicanos el 27 de octubre, luego podrá verse por tiempo limitado en salas de Estados Unidos, España y Argentina, y posiblemente en otros países a partir del 18 de noviembre. Finalmente estará disponible en Netflix desde el 16 de diciembre.
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"Cuando uno regresa a su país es como encontrar a un nuevo amigo y esta película es una representación emocional de una memoria", aseguró "El Negro". "La hice de una manera valiente y lo más difícil fue compartir esos recuerdos. Cuando haces eso compartes tu corazón, que es una área muy delicada", agregó. "Decía Buñuel que el cine es un sueño dirigido, y esta película para mi fue eso. El cine y los sueños no tienen tiempo", comentó en la rueda de prensa, donde fue acogido con un largo aplauso.
"Bardo" también cuenta el regreso de un periodista y director de documentales a su país, México. A través de su crisis existencial lidia con su identidad, las relaciones familiares, la locura de sus recuerdos y el pasado de su país. Busca respuestas en ese pasado para reconciliarse con quién es en el presente.
"México -afirmó- para mí es un estado de ánimo, no solo un país. Cada país al final es un estado de ánimo. Las historias sobre nosotros mismos que nos han contado. Pero cuando te alejas de ese lugar y cuando el tiempo pasa, este estado mental se disuelve y cambia. Y esto fue parte de la investigación que asume esta película, la interpretación de este anhelo".
Iñárritu habló por supuesto de lo que ha significado trabajar con Netflix, una plataforma con la que se siente agradecido, tanto por la libertad que le dio al realizar su película como por tener la posibilidad de mostrarla en salas de cine antes de que se vea en streaming. "Esto es algo que realmente aprecio. No solo porque me apoyaron y me dejaron totalmente libre, sino que han sido extremadamente generosos al permitir que las personas experimenten esta película en las salas de cine. Eso era algo especialmente importante para mí y es un gesto excepcional de Netflix hacia mí, porque creo que esta es una película que pertenece a este tipo de experiencia", aseguró.
No obstante, el cineasta mexicano subrayó que el cine hoy está ante cambios muy profundos, que no benefician precisamente al tradicional visionado en una sala con una gran pantalla. "No se puede ir contra la corriente predominante", sentenció, refiriéndose a las plataformas.
Agregó que tampoco estamos ante un fenómeno completamente novedoso: "Mi generación ha visto películas de grandes autores y cuando estudiaba cine, además de exposiciones y festivales, veía todas las películas de Bergman, Buñuel o Fellini, en una tele con cintas VHS de calidad pésima. Si tenía que ir al baño, paraba la película. Así que todos nos vemos obligados a detener los visionados. Pero lo que queda son nuestras ideas. Una película es una película. Es solo un medio".
Respecto del futuro de su carrera, dijo sentirse cada vez más lejano del cine realista: "No sé qué voy a hacer ahora. Llevaba siete años sin hacer una película, solo hice una instalación virtual y desde entonces no había tocado una cámara. No sé cuándo lo volveré a hacer. Cada vez me interesa menos la realidad en el cine, porque los sueños son más interesantes, sería muy difícil para mí hacer una película con actos y esas construcciones mentales me interesan muy poco".
"Bardo" se estrenará en cines mexicanos el 27 de octubre, luego podrá verse por tiempo limitado en salas de Estados Unidos, España y Argentina, y posiblemente en otros países a partir del 18 de noviembre. Finalmente estará disponible en Netflix desde el 16 de diciembre.
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