El festival de Guadalajara “sacude” a la ciudad en su primer fin de semana

por © J.A. (Guadalajara)-NOTICINE.com
Entrevistan a Diego Luna
Entrevistan a Diego Luna
Fernando TruebaEntrevistan a Diego Luna13-III-05

Con una película condenada por los medios de prensa católica, como es “A dirty shame”, de Jon Waters, y la presencia de Carlinhos Brown y sus ritmos brasileiros, el Festival Internacional de Cine en Guadalajara sacudió este fin de semana a la conservadora ciudad mexicana, que celebra con esta muestra de tolerancia el XX aniversario de su certamen.

La brillante apertura unió el viernes noche en el mismo escenario del espectacular teatro Diana (más de 2.000 localidades) a Carlinhos Brown, quien actuó hasta levantar de sus butacas a los trajeados tapatíos y foráneos, y a Waters, al que se dispensó un homenaje.
“A dirty shame” (rebautizada para México como “Adicta al sexo”) fue jaleada desde los palcos de los estudiantes, mientras algunas damas de la alta sociedad tapatía torcían el gesto ante las alusiones sexuales y escatológicas de la cinta, que tampoco evita ciertas alusiones que la prensa católica norteamericana consideró “sacrílegas”.

En cualquier caso, Waters se ganó de calle a los medios locales e internacionales. En un tono relajado y con gran sentido del humor, el autor de cintas como “Pink flamingos”, “Hairspray”, “Cry baby” o “Los asesinatos de mamá” contó a los periodistas algunas de sus técnicas de trabajo a la hora de elaborar los guiones de sus películas: “Soy como un suizo encerrado en el cuerpo de un norteamericano cuando preparo un proyecto. Me levanto a diario a las 6.30 de la mañana, me leo 7 diarios y empiezo a trabajar a las 8 en punto, y no paro hasta el mediodía”.

Explicó Waters que el motor de sus guiones son los personajes: “Primero los creo y los defino con gran detalle. Incluso pienso en sus padres y abuelos, aunque esos datos luego no vayan a salir en la película. A partir de ahí los ubico en determinados escenarios y va surgiendo la trama”.

Añadía que esos personajes todos tienen indefectiblemente algo de su propia personalidad: “Si, todos son un poco yo. En el caso de la última, “A dirty shame”, soy un poco obseso sexual…”.

Waters sitúa su cinta en Baltimore, donde nació en 1946, y se muestra orgulloso de ser el “enfant terrible” del lugar. “En mis primeras películas la policía nos perseguía por rodarlas en la calle, ahora nos protegen. No es que hayamos cambiado nosotros, sino la sociedad. Lo que antes se veía provocativo y pecaminoso ha dejado de serlo”.

Respecto de sus influencias y cineastas favoritos, John Waters no duda en situar primero a Pedro Almodóvar: “Es el único que plantea el sexo como algo gratificante y divertido en la pantalla. Es el mejor…”.
Este sábado, compartieron estrellato Fernando Trueba y Carlinhos Brown. Ambos presentaron su documental “El milagro de Candeal” al aire libre ante una audiencia entusiasta de cerca de 1.000 personas. Más tarde, el cantante bahiano ofreció un concierto en el que volvieron a sonar sus temas más populares.
Mientras, la presencia de figuras del cine iberoamericano se hace notar en el certamen tapatío. Ya están aquí Fernando Solanas, Silvio Caiozzi, Miguel Littin, Arturo Ripstein, Diego Luna, Boris Quercia, el citado Trueba, Maribel Verdú, Cecilia Suárez, Tiaré Scanda, Damián Alcázar, Graciela Borges y un largo etcétera, en el que dominan figuras mexicanas.
La impresión general es que el festival mexicano ha alcanzado su mayoría de edad y muestra más brillantez y mejor organización que en el pasado.