Hablamos con Fernando Trueba, triunfador en los Platino
- por © Daniela Creamer-NOTICINE.com
El español Fernando Trueba y su película, de producción colombiana, "El olvido que seremos", ya estrenada en diferentes mercados, resultaron este domingo los principales triunfadores de los Premios Platino del audiovisual iberoamericano. El emotivo relato real de la vida del médico y activista humanitario de Medellín suma así otro reconocimiento importante. NOTICINE.com habló con él sobre este film y sus proyectos inmediatos, entre ellos una serie "de aventuras" que dice "asusta".
- ¿Usted ha producido como productor en muchas cintas propias, no en esta, por qué es solo colombiana?
Sí. Es una producción 100% colombiana y la acepté porque me la ofrecieron. A mí me encantaba tanto el libro que al principio dije que no, porque decía "Dios mío no toquéis ese libro, dejadlo tal como está, no hagamos nada". Pero al final me alegro de haber cambiado de opinión, les ofrecimos coproducirla, aunque fuera en una pequeña parte. Pero creo que si se hubiese tratado de otra historia, ellos hubiesen estado encantados de que la coprodujéramos, aunque tenían cierto orgullo por hacer que esta historia fuera cien por cien colombiana, y eso lo entiendo.
- De hecho, leí el libro, y cala profundamente en el corazón. Creo que la película recoge muy bien ese espíritu maravilloso que está impregnado en la novela de Héctor Abad Faciolince, como gran homenaje y legado de amor a su padre, el doctor Héctor Abad. ¿Cómo pudo hacer David Trueba este trabajo tan bello de adaptación de un libro a un guion cinematográfico? ¿Y cómo fue la inmersión de Javier Cámara en esta aventura, logrando adquirir hasta el acento colombiano, paisa?
Ha sido un trabajo muy bonito desde el principio. David ha hecho un guion fantástico, él ya había hecho uno, que para mí es un modelo de adaptación literaria que es "El soldado de Salamina". El trabajo de adaptación de esa película, me parece que se debería estudiar en las escuelas de guion: como se debe adaptar un libro. Y aquí le pedí yo mismo, que se encargara del guion, hablamos mucho de por donde debía enfocarse, la decisión clave era antes de comenzar a escribir, concentrar la idea clave en dos momentos básicos, de lo contrario podías contarlo en 25 años, que ya han pasado entre un hecho y otro. Para Javier (Cámara) también fue un desafío muy grande, de hacer suyo este personaje, creo que el acento es más una cosa de interpretación. Lo importante es el alma del personaje, la habilidad del actor en saber hacer las cosas, pero lo bonito de Javier es que no se queda ahí, es que realmente entra en la esencia de cómo era aquel hombre.
- Su película está en la recta final quizá de su andadura, ya estrenada en España, en Colombia, en otros países y ahora en Netflix. ¿Los Platino han sido la guinda?
No tenía ni idea de que nos iban a premiar, nunca pienso en estas cosas, ¿sabes? Ni lo pienso ni cuando me nominan a un premio o cosas así. Prefiero no pensar ni siquiera cuando estoy sentado allí. La vida te da premios y patadas, te da de todo y para eso mismo hay que prepararse, para todo, no pasa nada, pero me hace feliz el reconocimiento.
- Dicen que Colombia es una de las mecas del rodaje internacional en América Latina. ¿Cree que existe un buen nivel profesional en ese país?
Te diría que es tan fantástico ese equipo técnico colombiano, que mañana mismo volvería a filmar con ellos otra película, eso no se puede decir siempre.
- Algunas crónicas dicen que "El olvido que seremos" funcionó en Colombia menos bien de lo esperado. ¿Cree usted que eso se deba quizás a que duele ver reflejada en una pantalla la cara más cruel o injusta de su país?
Bueno, yo creo que ha funcionado muy bien, ahora está número uno en Netflix, pero estábamos en pleno pico de COVID y encima con la revuelta en la calle, imagínate cómo hubiera sido si no hubieran estado esas dos cosas, habría sido apoteósico. Pero bueno, esto nos ha limitado, yo creo que tenemos que estar contentos, así como hemos tenido suerte de que pudimos acabar la película antes de la pandemia, imagínate que nos hubiera llegado la pandemia cuando nos estábamos preparando, no se hubiera hecho o cuando estábamos a medias, a lo mejor se hubiera suspendido. Yo todavía considero que hemos tenido mucha suerte.
- Es cierto que este largo confinamiento no fue el mejor aliado para las producciones audiovisuales en general...
Es que la reacción de la gente en Colombia es muy buena. Cada día estamos con artículos, recibimos llamadas, mails de mucha gente, múltiples reacciones, y demás. Esto es cada día, la reacción es brutal, aparte de los colombianos y fuera de España, en países como Francia, Italia, también ha sido la hostia. Yo me siento muy arropado y querido por los colombianos.
- Con esta avalancha de series televisivas a través de las plataformas a nivel mundial, ¿Cómo ve usted el futuro del cine como arte en sí mismo, en la pantalla grande?
Quiero pensar que el cine va a estar siempre existiendo y si deja de existir por lo menos que yo ya no esté aquí para verlo. Soy hijo del cine, he nacido existiendo el cine, he ido de pequeño, era un niño y era lo que más me gustaba. Cuando algo me daba miedo, o que me pillaran porque no había ido al colegio y me escapaba, cuando me escondía, lo hacía en el cine. Una vez que no fui, mi padre se cruzó conmigo en la calle y por fortuna no me vio, y ahí decidí que nunca más en la calle, siempre en el cine había que esconderse, en la oscuridad. Quiero vivir en un mundo donde exista el cine, y los cines de verdad. No concibo el mundo sin él, no me interesa el mundo sin el cine, prefiero no vivir. Por ejemplo, la película "Roma", de Alfonso Cuarón, es un pecado verla en una pantalla de TV, eso merece la luminosidad de una gran pantalla en una sala real. Cuando veo mis series, no las miro directamente de las plataformas, las grabo y las veo con mi proyector, que me brinda el efecto mágico del cine.
- ¿Se ve haciendo una serie de TV para una plataforma?
Sí, si se da el caso, me interesa la serie y la puedo hacer como yo quiera, sí
- ¿Ya tiene algún proyecto en mente?
Sí. De hecho, he presentado un proyecto mío en un par de sitios y les ha asustado, creo que sería una serie buenísima, pero se asustan, no quieren problemitas.
- ¿Nos puede dar un adelanto de lo que va?
No te lo voy a contar, porque como todavía no lo he hecho y no quiero que de repente salga por ahí, prefiero guardarlo un poco en secreto. Sería una serie política, pero en realidad de aventuras, o sea es una película de aventura, pero tiene una parte histórica y de un personaje maravilloso y real que existió a finales de los 50 y 60, un tipo muy joven aventurero y soñador.
- ¿Un personaje bondadoso como el doctor Héctor Abad? ¿Se trata de alguna historia española?
No, bondadoso no. Es sobre un tipo aventurero al que le gustaba correr riesgos, viajar, un americano, de la América profunda y aburrida que de repente salió a buscar aventuras, las encontró y pago con su vida y ya está.
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- ¿Usted ha producido como productor en muchas cintas propias, no en esta, por qué es solo colombiana?
Sí. Es una producción 100% colombiana y la acepté porque me la ofrecieron. A mí me encantaba tanto el libro que al principio dije que no, porque decía "Dios mío no toquéis ese libro, dejadlo tal como está, no hagamos nada". Pero al final me alegro de haber cambiado de opinión, les ofrecimos coproducirla, aunque fuera en una pequeña parte. Pero creo que si se hubiese tratado de otra historia, ellos hubiesen estado encantados de que la coprodujéramos, aunque tenían cierto orgullo por hacer que esta historia fuera cien por cien colombiana, y eso lo entiendo.
- De hecho, leí el libro, y cala profundamente en el corazón. Creo que la película recoge muy bien ese espíritu maravilloso que está impregnado en la novela de Héctor Abad Faciolince, como gran homenaje y legado de amor a su padre, el doctor Héctor Abad. ¿Cómo pudo hacer David Trueba este trabajo tan bello de adaptación de un libro a un guion cinematográfico? ¿Y cómo fue la inmersión de Javier Cámara en esta aventura, logrando adquirir hasta el acento colombiano, paisa?
Ha sido un trabajo muy bonito desde el principio. David ha hecho un guion fantástico, él ya había hecho uno, que para mí es un modelo de adaptación literaria que es "El soldado de Salamina". El trabajo de adaptación de esa película, me parece que se debería estudiar en las escuelas de guion: como se debe adaptar un libro. Y aquí le pedí yo mismo, que se encargara del guion, hablamos mucho de por donde debía enfocarse, la decisión clave era antes de comenzar a escribir, concentrar la idea clave en dos momentos básicos, de lo contrario podías contarlo en 25 años, que ya han pasado entre un hecho y otro. Para Javier (Cámara) también fue un desafío muy grande, de hacer suyo este personaje, creo que el acento es más una cosa de interpretación. Lo importante es el alma del personaje, la habilidad del actor en saber hacer las cosas, pero lo bonito de Javier es que no se queda ahí, es que realmente entra en la esencia de cómo era aquel hombre.
- Su película está en la recta final quizá de su andadura, ya estrenada en España, en Colombia, en otros países y ahora en Netflix. ¿Los Platino han sido la guinda?
No tenía ni idea de que nos iban a premiar, nunca pienso en estas cosas, ¿sabes? Ni lo pienso ni cuando me nominan a un premio o cosas así. Prefiero no pensar ni siquiera cuando estoy sentado allí. La vida te da premios y patadas, te da de todo y para eso mismo hay que prepararse, para todo, no pasa nada, pero me hace feliz el reconocimiento.
- Dicen que Colombia es una de las mecas del rodaje internacional en América Latina. ¿Cree que existe un buen nivel profesional en ese país?
Te diría que es tan fantástico ese equipo técnico colombiano, que mañana mismo volvería a filmar con ellos otra película, eso no se puede decir siempre.
- Algunas crónicas dicen que "El olvido que seremos" funcionó en Colombia menos bien de lo esperado. ¿Cree usted que eso se deba quizás a que duele ver reflejada en una pantalla la cara más cruel o injusta de su país?
Bueno, yo creo que ha funcionado muy bien, ahora está número uno en Netflix, pero estábamos en pleno pico de COVID y encima con la revuelta en la calle, imagínate cómo hubiera sido si no hubieran estado esas dos cosas, habría sido apoteósico. Pero bueno, esto nos ha limitado, yo creo que tenemos que estar contentos, así como hemos tenido suerte de que pudimos acabar la película antes de la pandemia, imagínate que nos hubiera llegado la pandemia cuando nos estábamos preparando, no se hubiera hecho o cuando estábamos a medias, a lo mejor se hubiera suspendido. Yo todavía considero que hemos tenido mucha suerte.
- Es cierto que este largo confinamiento no fue el mejor aliado para las producciones audiovisuales en general...
Es que la reacción de la gente en Colombia es muy buena. Cada día estamos con artículos, recibimos llamadas, mails de mucha gente, múltiples reacciones, y demás. Esto es cada día, la reacción es brutal, aparte de los colombianos y fuera de España, en países como Francia, Italia, también ha sido la hostia. Yo me siento muy arropado y querido por los colombianos.
- Con esta avalancha de series televisivas a través de las plataformas a nivel mundial, ¿Cómo ve usted el futuro del cine como arte en sí mismo, en la pantalla grande?
Quiero pensar que el cine va a estar siempre existiendo y si deja de existir por lo menos que yo ya no esté aquí para verlo. Soy hijo del cine, he nacido existiendo el cine, he ido de pequeño, era un niño y era lo que más me gustaba. Cuando algo me daba miedo, o que me pillaran porque no había ido al colegio y me escapaba, cuando me escondía, lo hacía en el cine. Una vez que no fui, mi padre se cruzó conmigo en la calle y por fortuna no me vio, y ahí decidí que nunca más en la calle, siempre en el cine había que esconderse, en la oscuridad. Quiero vivir en un mundo donde exista el cine, y los cines de verdad. No concibo el mundo sin él, no me interesa el mundo sin el cine, prefiero no vivir. Por ejemplo, la película "Roma", de Alfonso Cuarón, es un pecado verla en una pantalla de TV, eso merece la luminosidad de una gran pantalla en una sala real. Cuando veo mis series, no las miro directamente de las plataformas, las grabo y las veo con mi proyector, que me brinda el efecto mágico del cine.
- ¿Se ve haciendo una serie de TV para una plataforma?
Sí, si se da el caso, me interesa la serie y la puedo hacer como yo quiera, sí
- ¿Ya tiene algún proyecto en mente?
Sí. De hecho, he presentado un proyecto mío en un par de sitios y les ha asustado, creo que sería una serie buenísima, pero se asustan, no quieren problemitas.
- ¿Nos puede dar un adelanto de lo que va?
No te lo voy a contar, porque como todavía no lo he hecho y no quiero que de repente salga por ahí, prefiero guardarlo un poco en secreto. Sería una serie política, pero en realidad de aventuras, o sea es una película de aventura, pero tiene una parte histórica y de un personaje maravilloso y real que existió a finales de los 50 y 60, un tipo muy joven aventurero y soñador.
- ¿Un personaje bondadoso como el doctor Héctor Abad? ¿Se trata de alguna historia española?
No, bondadoso no. Es sobre un tipo aventurero al que le gustaba correr riesgos, viajar, un americano, de la América profunda y aburrida que de repente salió a buscar aventuras, las encontró y pago con su vida y ya está.
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