Crítica Netflix: "Matrimillas", la especulación del amor con Luisana Lopilato y Juan Minujín
- por © EscribiendoCine-NOTICINE.com
Por Emiliano Basile
La comedia romántica "Matrimillas" (2022), dirigida por Sebastian De Caro ("Claudia", "20 000 besos") retrata a una pareja en crisis que utiliza un sistema de suma de millas para reconquistarse.
Ellos son Belén (Luisana Lopilato) y Fede (Juan Minujin), una pareja dispareja que se conoce después de un accidente vial. Ese "accidente" los lleva a estar juntos y tener 2 hijos preadolescentes. Él es odontólogo por tradición familiar aunque ama cocinar, ella tiene un emprendimiento de juguetes didácticos. Pero, cómo en toda pareja, la rutina diaria acentúa las diferencias y promueve crisis que parecen terminales. Y que él tenga planeado irse con sus amigos a Cancún no ayuda en nada.
Sin embargo, un día cenan con la hermana y el cuñado de ella que están en la plenitud de su pareja, y les recomiendan un método no convencional que ofrece la empresa "Equilibrium": sumar millas cada vez que uno tiene una actitud amorosa con el otro. La especulación del lúdico método promueve, por meritocracia, el amor.
Claro que está fórmula tiene sus grietas que la trama se encargará de mostrar con divertidos momentos de comedia y gran fluidez narrativa. Sobre todo cuando él se entera que el viaje a Cancún le resta 1000 millas difíciles de compensar.
Sebastián De Caro presenta una nueva comedia romántica, esta vez con mayor dimensión de producción y apegada a una estructura convencional, y con un guión sólido de Gabriel Korenfeld y Rocío Blanco que funciona muy bien. Sus referencias cinéfilas parecen medidas en función de los requerimientos de la trama.
Por supuesto esta comedia se alinea con otras comedias de clase "for export". Los espacios (casa, parque, fiesta, etc.) podrían suceder en cualquier lugar del mundo y la historia podría sucederle a cualquier pareja de clase media acomodada también. Son profesionales, cuentapropistas y, sobre todo, especuladores natos. La mirada de sus hijos será crucial para desactivar el conflicto.
"Matrimillas" funciona y es efectiva como producto, tiene ritmo y demuestra eficacia en su peculiar relato de crisis matrimonial. Una película amena que, sin brillar, brinda un momento agradable y entretenido.
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La comedia romántica "Matrimillas" (2022), dirigida por Sebastian De Caro ("Claudia", "20 000 besos") retrata a una pareja en crisis que utiliza un sistema de suma de millas para reconquistarse.
Ellos son Belén (Luisana Lopilato) y Fede (Juan Minujin), una pareja dispareja que se conoce después de un accidente vial. Ese "accidente" los lleva a estar juntos y tener 2 hijos preadolescentes. Él es odontólogo por tradición familiar aunque ama cocinar, ella tiene un emprendimiento de juguetes didácticos. Pero, cómo en toda pareja, la rutina diaria acentúa las diferencias y promueve crisis que parecen terminales. Y que él tenga planeado irse con sus amigos a Cancún no ayuda en nada.
Sin embargo, un día cenan con la hermana y el cuñado de ella que están en la plenitud de su pareja, y les recomiendan un método no convencional que ofrece la empresa "Equilibrium": sumar millas cada vez que uno tiene una actitud amorosa con el otro. La especulación del lúdico método promueve, por meritocracia, el amor.
Claro que está fórmula tiene sus grietas que la trama se encargará de mostrar con divertidos momentos de comedia y gran fluidez narrativa. Sobre todo cuando él se entera que el viaje a Cancún le resta 1000 millas difíciles de compensar.
Sebastián De Caro presenta una nueva comedia romántica, esta vez con mayor dimensión de producción y apegada a una estructura convencional, y con un guión sólido de Gabriel Korenfeld y Rocío Blanco que funciona muy bien. Sus referencias cinéfilas parecen medidas en función de los requerimientos de la trama.
Por supuesto esta comedia se alinea con otras comedias de clase "for export". Los espacios (casa, parque, fiesta, etc.) podrían suceder en cualquier lugar del mundo y la historia podría sucederle a cualquier pareja de clase media acomodada también. Son profesionales, cuentapropistas y, sobre todo, especuladores natos. La mirada de sus hijos será crucial para desactivar el conflicto.
"Matrimillas" funciona y es efectiva como producto, tiene ritmo y demuestra eficacia en su peculiar relato de crisis matrimonial. Una película amena que, sin brillar, brinda un momento agradable y entretenido.
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