Crónicas

"El Benny", la humana desmesura o el prólogo de un próximo comentario
24-VII-06
El pasado sábado 22 de julio fue estrenado con aro, balde, paleta, bombo y platillo el esperado film cubano "El Benny", la más reciente producción cubana en los cines Chaplin y 23 y 12, con un despliegue publicitario que no recuerdo en mis largos años de cinéfilo, al punto de que los alrededores de la primera sala, como se sabe sede de tales premiéres, se transformaron en una suerte de Habana años 50, con grandes vallas que remedaban restaurantes y centros nocturnos de la época asociados con la figura emblemática. No quisiera que en la revelación de este detalle se descubriera un ápice de crítica: todo lo contrario; no hay dudas de que el llamado "Bárbaro del Ritmo" y el cine cubano tantas veces reclamado por no ocuparse suficientemente de nuestros íconos culturales, merecen eso legítimamente, y quiero desearle desde ahora a la cinta y a su realizador Jorge Luis Sánchez, al actor protagónico Renny Arozarena, a mi inolvidable amigo Abraham Rodríguez ("Andoba"), coautor del guión, y a todo el laborioso equipo del largometraje, los mayores y más sólidos éxitos.
Por lo único que estoy escribiendo esta suerte de preámbulo a mi próximo comentario sobre el film es exclusivamente (lo juro) para que los muchos lectores de este concurrido sitio en España, Cuba y el mundo, sepan el por qué del pequeño retraso que sufrirá aquel. Con su olfato de excelente editor, el amigo Jon Apaolaza siempre se apura en pedirme cuánto antes la crítica de las nuevas películas cubanas, en mi condición de corresponsal de mi país en esta web, algo que generalmente hago con puntualidad pero esta vez no será posible hasta que el próximo 27 se estrene comercialmente "El Benny".
¿Qué ocurrió? Les cuento: en Cuba, las actividades, incluyendo conferencias de prensa vinculadas a algún tipo de ejercicio de la mandíbula (léase degustar un mojito criollo, unas croquetillas y una lasca de jamón) implican un misterio y una restricción cada vez más inconcebibles, y éste fue el caso de "El Benny" que al efectuarse en el hermoso Habana Café del Hotel Meliá Cohiba (ideal, reconozcámoslo, por su caracterización de la capital en la época del film) imponía la exigua cifra de 50 periodistas, de los cuales fui tácita y absolutamente excluido. Aun cuando, como todo el mundo sabe, llevo treinta años ejerciendo la crítica de artes, especialmente la de cine, soy un promotor sistemático de nuestro cine en varios medios, y en el caso concreto, fui uno de los primeros en divulgar con un amplio reportaje en mi programa de TV "De nuestra América" el proyecto de este film cuando estaba en sus inicios, no figuré entre los agraciados para degustar el mojito, las croquetas y la lasquita de jamón y, por tanto, tener acceso a las declaraciones del realizador y el equipo de la película.
Es cierto que se me pasó una citación vía mail al pase de prensa, pero como me fue imposible ir, mandé a buscar mi invitación para la noche de premiére, y se le informó a mi asistente que la misma se entregaba en la conferencia; ergo, al no ser invitado a ésta no tenía donde recogerla (en el supuesto caso de que se me hubiera invitado a dicha premiére) y por tanto, tampoco podía asistir a ella, como ocurrió. Pero como reza el dicho cubano, "de mejores lugares me han echado". Sólo que, como aclaré al principio, los lectores de NOTICINE.com deberán esperar unos cuantos días para conocer, como es habitual, mis criterios sobre este nuevo film que, a propósito, alguna vez se pensó en titular "Divina desmesura", y sobre el cual en algún momento declaró su realizador Sánchez: "Esta película es la propia desmesura, como diría Julio García Espinosa. Pienso que el cine cubano necesita desmesura". Y ya lo creo: al menos en sus prolegómanos, puede comprobarse cuánto de esa característica la ha rodeado.
Sinceramente, tengo fe en "El Benny", en su director, un notable documentalista (responsable, entre otros, de "Atrapando espacios", "Y me gasto la vida") del cual, a propósito, he pasado algunos en mi programa, por lo cual, también quiero creer que está ajeno a todo este brollo, y del que, para variar, me gustaría acusar a la burocracia y por supuesto, al subdesarrollo y al bloqueo, al menos en el último caso, al interno omnipresente en casi todo gesto cultural. De verdad que me gustaría mucho, y por varias razones, para seguir con las válidas redundancias, que me gustara "El Benny", entre otras para que no se viera cualquier reserva como una mínima vendetta por este agravio, y aunque confío en que de todos es conocida mi honestidad y mi compromiso tan sólo con mis propias ideas, siempre estará el que diga, con esa proverbial y simpática malicia de nuestros coterráneos: "Claro: eso fue porque lo privaron del mojito, las croqueticas y el jamón en el Habana Café, porque tampoco lo invitaron a la premiére, mucho menos a la recepción y vaya, que lo tiraron a un lugar como El Fanguito o algo por el estilo".
De cualquier manera, estimado Jon, asiduos lectores de NOTICINE.com (en especial los seguidores del cine cubano), paciencia que todo llega, pronto desde estas páginas tendrán mis modestas consideraciones sobre "El Benny", el más reciente estreno cubano, al cual reitero, de corazón, deseo literalmente, todo el éxito del mundo.
El pasado sábado 22 de julio fue estrenado con aro, balde, paleta, bombo y platillo el esperado film cubano "El Benny", la más reciente producción cubana en los cines Chaplin y 23 y 12, con un despliegue publicitario que no recuerdo en mis largos años de cinéfilo, al punto de que los alrededores de la primera sala, como se sabe sede de tales premiéres, se transformaron en una suerte de Habana años 50, con grandes vallas que remedaban restaurantes y centros nocturnos de la época asociados con la figura emblemática. No quisiera que en la revelación de este detalle se descubriera un ápice de crítica: todo lo contrario; no hay dudas de que el llamado "Bárbaro del Ritmo" y el cine cubano tantas veces reclamado por no ocuparse suficientemente de nuestros íconos culturales, merecen eso legítimamente, y quiero desearle desde ahora a la cinta y a su realizador Jorge Luis Sánchez, al actor protagónico Renny Arozarena, a mi inolvidable amigo Abraham Rodríguez ("Andoba"), coautor del guión, y a todo el laborioso equipo del largometraje, los mayores y más sólidos éxitos.
Por lo único que estoy escribiendo esta suerte de preámbulo a mi próximo comentario sobre el film es exclusivamente (lo juro) para que los muchos lectores de este concurrido sitio en España, Cuba y el mundo, sepan el por qué del pequeño retraso que sufrirá aquel. Con su olfato de excelente editor, el amigo Jon Apaolaza siempre se apura en pedirme cuánto antes la crítica de las nuevas películas cubanas, en mi condición de corresponsal de mi país en esta web, algo que generalmente hago con puntualidad pero esta vez no será posible hasta que el próximo 27 se estrene comercialmente "El Benny".
¿Qué ocurrió? Les cuento: en Cuba, las actividades, incluyendo conferencias de prensa vinculadas a algún tipo de ejercicio de la mandíbula (léase degustar un mojito criollo, unas croquetillas y una lasca de jamón) implican un misterio y una restricción cada vez más inconcebibles, y éste fue el caso de "El Benny" que al efectuarse en el hermoso Habana Café del Hotel Meliá Cohiba (ideal, reconozcámoslo, por su caracterización de la capital en la época del film) imponía la exigua cifra de 50 periodistas, de los cuales fui tácita y absolutamente excluido. Aun cuando, como todo el mundo sabe, llevo treinta años ejerciendo la crítica de artes, especialmente la de cine, soy un promotor sistemático de nuestro cine en varios medios, y en el caso concreto, fui uno de los primeros en divulgar con un amplio reportaje en mi programa de TV "De nuestra América" el proyecto de este film cuando estaba en sus inicios, no figuré entre los agraciados para degustar el mojito, las croquetas y la lasquita de jamón y, por tanto, tener acceso a las declaraciones del realizador y el equipo de la película.
Es cierto que se me pasó una citación vía mail al pase de prensa, pero como me fue imposible ir, mandé a buscar mi invitación para la noche de premiére, y se le informó a mi asistente que la misma se entregaba en la conferencia; ergo, al no ser invitado a ésta no tenía donde recogerla (en el supuesto caso de que se me hubiera invitado a dicha premiére) y por tanto, tampoco podía asistir a ella, como ocurrió. Pero como reza el dicho cubano, "de mejores lugares me han echado". Sólo que, como aclaré al principio, los lectores de NOTICINE.com deberán esperar unos cuantos días para conocer, como es habitual, mis criterios sobre este nuevo film que, a propósito, alguna vez se pensó en titular "Divina desmesura", y sobre el cual en algún momento declaró su realizador Sánchez: "Esta película es la propia desmesura, como diría Julio García Espinosa. Pienso que el cine cubano necesita desmesura". Y ya lo creo: al menos en sus prolegómanos, puede comprobarse cuánto de esa característica la ha rodeado.
Sinceramente, tengo fe en "El Benny", en su director, un notable documentalista (responsable, entre otros, de "Atrapando espacios", "Y me gasto la vida") del cual, a propósito, he pasado algunos en mi programa, por lo cual, también quiero creer que está ajeno a todo este brollo, y del que, para variar, me gustaría acusar a la burocracia y por supuesto, al subdesarrollo y al bloqueo, al menos en el último caso, al interno omnipresente en casi todo gesto cultural. De verdad que me gustaría mucho, y por varias razones, para seguir con las válidas redundancias, que me gustara "El Benny", entre otras para que no se viera cualquier reserva como una mínima vendetta por este agravio, y aunque confío en que de todos es conocida mi honestidad y mi compromiso tan sólo con mis propias ideas, siempre estará el que diga, con esa proverbial y simpática malicia de nuestros coterráneos: "Claro: eso fue porque lo privaron del mojito, las croqueticas y el jamón en el Habana Café, porque tampoco lo invitaron a la premiére, mucho menos a la recepción y vaya, que lo tiraron a un lugar como El Fanguito o algo por el estilo".
De cualquier manera, estimado Jon, asiduos lectores de NOTICINE.com (en especial los seguidores del cine cubano), paciencia que todo llega, pronto desde estas páginas tendrán mis modestas consideraciones sobre "El Benny", el más reciente estreno cubano, al cual reitero, de corazón, deseo literalmente, todo el éxito del mundo.
- © Frank Padrón (Cuba)-NOTICINE.com

Breves iberoamericanas: Salma niega tener una fortuna de 100 millones de dólares, actores de "Habana, Havana" dialogarán con público venezolano, se estrena documental sobre el nazismo en la Argentina
24-VII-06
- Salma Hayek aseguró no poseer una fortuna que asciende a los 100 millones de dólares, tal como aseguró la revista Fortune en un reciente artículo, donde ubica a la estrella en la segunda posición de las latinas más ricas de Hollywood luego de la actriz, cantante y productora Jennifer Lopez con 225 millones. "Es una mentira grandísima. Está muy, muy lejos de la realidad. Yo no tengo esa cantidad de dinero", declaró Hayek a Reuters, añadiendo que "por como están las cosas ahora en México, sí me molesta que me pongan en un grupo de millonarios de 100 millones, al que no pertenezco, cuando hay tanta gente que esta muriendo de hambre". La mexicana de 39 años, nominada al Oscar como mejor actriz por "Frida" y próxima a lanzar en la televisión estadounidense un remake de la telenovela "Betty, la fea" que la tiene como productora, afirmó que de poseer tal cantidad de dinero ya se habría retirado y estaría dedicándose a cuestiones más altruistas como abrir "centros en México en contra de la violencia a la mujer".
- A propósito del estreno de la película "Habana, Havana", de Alberto Arvelo el próximo 28 de julio, los actores cubanos, emblemas de la cinematografía latinoamericana, Eslinda Núñez y Manuel Porto, visitarán Venezuela, ocasión que aprovecharán para intercambiar vivencias y anécdotas con el público venezolano en el Centro de Arte La Estancia el próximo martes 25 de julio a las 3:30 de la tarde. "Habana Havana" es para Arvelo una obra que sigue la línea del movimiento llamado Cine Átomo, que es la posibilidad de que cualquier persona o estudiante, que sueñe con hacer una película y tenga un bello guión, salga y la haga sin esperar. Esta cinta, realizada en La Habana, fue rodada por un equipo técnico compuesto por tres personas. En el primer festival que estuvo, que fue el de Valladolid, fue galardonada con el Premio de la Juventud a la Mejor Película. Recientemente, "Habana, Havana" recibió el premio como Mejor Largometraje otorgado por la Asociación de Autores Cinematográficos (ANAC).
- El 5 de agosto a las 18:30 horas se estrena en el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba), "Pacto de silencio", un largometraje documental dirigido por Carlos Echeverría y producido por Maitén Cine con el apoyo del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales, que toca el tema del nazismo en la Argentina. Este film revela por qué ciertos sectores de la sociedad de Bariloche -ciudad en el sur de la Argentina que se convirtió en el hogar de muchos nazis tras el final de la Segunda Guerra Mundial- les brindaron amparo a criminales nazis como Erich Priebke, uno de los mayores responsables de la masacre de las Fosas Ardeatinas en Roma, otorgándoles además un lugar de preponderancia y poder. Echeverría creció en el seno de la comunidad alemana de Bariloche, lo que le permitió conocer de cerca su ideología y el proyecto político-cultural de los inmigrantes de esa nacionalidad. El mismo incluyó una escuela de la que el propio Priebke fue director -hasta su detención- que prohibía a sus alumnos ver "La lista de Schindler". Filmado en Alemania, Italia, Chile y Argentina, la cinta cuenta con testimonios y material jamás divulgados acerca de los nazis que se escondieron en Sudamérica, que incluye films privados de Priebke.
- Salma Hayek aseguró no poseer una fortuna que asciende a los 100 millones de dólares, tal como aseguró la revista Fortune en un reciente artículo, donde ubica a la estrella en la segunda posición de las latinas más ricas de Hollywood luego de la actriz, cantante y productora Jennifer Lopez con 225 millones. "Es una mentira grandísima. Está muy, muy lejos de la realidad. Yo no tengo esa cantidad de dinero", declaró Hayek a Reuters, añadiendo que "por como están las cosas ahora en México, sí me molesta que me pongan en un grupo de millonarios de 100 millones, al que no pertenezco, cuando hay tanta gente que esta muriendo de hambre". La mexicana de 39 años, nominada al Oscar como mejor actriz por "Frida" y próxima a lanzar en la televisión estadounidense un remake de la telenovela "Betty, la fea" que la tiene como productora, afirmó que de poseer tal cantidad de dinero ya se habría retirado y estaría dedicándose a cuestiones más altruistas como abrir "centros en México en contra de la violencia a la mujer".
- A propósito del estreno de la película "Habana, Havana", de Alberto Arvelo el próximo 28 de julio, los actores cubanos, emblemas de la cinematografía latinoamericana, Eslinda Núñez y Manuel Porto, visitarán Venezuela, ocasión que aprovecharán para intercambiar vivencias y anécdotas con el público venezolano en el Centro de Arte La Estancia el próximo martes 25 de julio a las 3:30 de la tarde. "Habana Havana" es para Arvelo una obra que sigue la línea del movimiento llamado Cine Átomo, que es la posibilidad de que cualquier persona o estudiante, que sueñe con hacer una película y tenga un bello guión, salga y la haga sin esperar. Esta cinta, realizada en La Habana, fue rodada por un equipo técnico compuesto por tres personas. En el primer festival que estuvo, que fue el de Valladolid, fue galardonada con el Premio de la Juventud a la Mejor Película. Recientemente, "Habana, Havana" recibió el premio como Mejor Largometraje otorgado por la Asociación de Autores Cinematográficos (ANAC).
- El 5 de agosto a las 18:30 horas se estrena en el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba), "Pacto de silencio", un largometraje documental dirigido por Carlos Echeverría y producido por Maitén Cine con el apoyo del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales, que toca el tema del nazismo en la Argentina. Este film revela por qué ciertos sectores de la sociedad de Bariloche -ciudad en el sur de la Argentina que se convirtió en el hogar de muchos nazis tras el final de la Segunda Guerra Mundial- les brindaron amparo a criminales nazis como Erich Priebke, uno de los mayores responsables de la masacre de las Fosas Ardeatinas en Roma, otorgándoles además un lugar de preponderancia y poder. Echeverría creció en el seno de la comunidad alemana de Bariloche, lo que le permitió conocer de cerca su ideología y el proyecto político-cultural de los inmigrantes de esa nacionalidad. El mismo incluyó una escuela de la que el propio Priebke fue director -hasta su detención- que prohibía a sus alumnos ver "La lista de Schindler". Filmado en Alemania, Italia, Chile y Argentina, la cinta cuenta con testimonios y material jamás divulgados acerca de los nazis que se escondieron en Sudamérica, que incluye films privados de Priebke.
- © Corresponsales-NOTICINE.com

"La ciudad perdida" se pondrá en marcha en enero en la Riviera Maya
21-VII-06
Luego de verse postergada por intensas lluvias y la complicada agenda de algunos de sus intérpretes, "La ciudad perdida" comenzará a rodarse en el mes de enero en localizaciones naturales de la Riviera Maya, según adelantó uno de los actores involucrados con esta coproducción mexicano-estadounidense, Manuel Ojeda.
"Es fantástico aparecer de pronto como un misionero en la selva que conoce todos los secretos. Me pareció un reto muy atractivo ya que a mi me gusta mucho interpretar personajes que lleven una caracterización especial", adelantó Ojeda sobre esa suerte de chamán que interpretará en "La ciudad perdida", para el cual tendrá que aprender el dialecto maya.
Esta cinta de aventuras girará en torno a unas joyas arqueológicas sobre las que cae una maldición, a la cual se enfrentarán los héroes de la historia. Además de Ojeda -que ya tiene experiencia en este género por haber intervenido en "Tras el corazón verde"-, el restante nombre confirmado del reparto es Itatí Cantoral, estrella de las telenovelas que últimamente se deja ver con mayor asiduidad en cine, teniendo pendiente de estreno la internacional "One Long Night" y "Cansada de besar sapos" y próxima a lanzar en este mes "Los pajarracos". A ellos se les podrían unir Fernando Luján, Angélica Aragón y Silvia Navarro. El rodaje, planeado inicialmente para el mes de julio, se iniciará en enero del próximo año en la Riviera Maya.
Luego de verse postergada por intensas lluvias y la complicada agenda de algunos de sus intérpretes, "La ciudad perdida" comenzará a rodarse en el mes de enero en localizaciones naturales de la Riviera Maya, según adelantó uno de los actores involucrados con esta coproducción mexicano-estadounidense, Manuel Ojeda.
"Es fantástico aparecer de pronto como un misionero en la selva que conoce todos los secretos. Me pareció un reto muy atractivo ya que a mi me gusta mucho interpretar personajes que lleven una caracterización especial", adelantó Ojeda sobre esa suerte de chamán que interpretará en "La ciudad perdida", para el cual tendrá que aprender el dialecto maya.
Esta cinta de aventuras girará en torno a unas joyas arqueológicas sobre las que cae una maldición, a la cual se enfrentarán los héroes de la historia. Además de Ojeda -que ya tiene experiencia en este género por haber intervenido en "Tras el corazón verde"-, el restante nombre confirmado del reparto es Itatí Cantoral, estrella de las telenovelas que últimamente se deja ver con mayor asiduidad en cine, teniendo pendiente de estreno la internacional "One Long Night" y "Cansada de besar sapos" y próxima a lanzar en este mes "Los pajarracos". A ellos se les podrían unir Fernando Luján, Angélica Aragón y Silvia Navarro. El rodaje, planeado inicialmente para el mes de julio, se iniciará en enero del próximo año en la Riviera Maya.
- © Redacción-NOTICINE.com

Entrevista a Juan Alberto Grisolía, director de animación de "Patoruzito 2"
21-VII-06
La historia de la animación en la Argentina se puede reducir a la mención de un solo nombre: Manuel García Ferré. El creador de Anteojito, Hijitus y tantos personajes que forman parte de la cultura popular, realizador de las cintas más reconocidas del género como "Mil intentos y un invento", "Ico, el caballito valiente" o "Manuelita", es el pionero, maestro y -hasta hace apenas unos pocos años- el único exponente del género en la Argentina. Fue precisamente el suceso de "Manuelita" que permitió demostrar que apostar por la animación en la Argentina no era saltar al vacío, sino que podía ser un negocio lucrativo. Así lo supo ver el productor Jorge "Corcho" Rodríguez, que decidió introducirse en este terreno siguiendo la fórmula de "Manuelita", es decir, apelando a un personaje afincado en la memoria de la gente, que pueda atraer a nuevas generaciones. El elegido fue Patoruzito, el pequeño cacique tehuelche creado por Dante Quinterno para la versión infantil pero no menos valiente de su original Patoruzú.
Llevar a este personaje de las historietas blanco y negro a la pantalla grande, requería de un experimentado animador que pudiera asumir tal compromiso. Un currículum que acreditaba varios de los títulos más famosas de García Ferré y una experiencia que abarca más de cuatro décadas, convirtieron a Juan Alberto Grisolía, de 56 años, en el director de animación de "Patoruzito" y también de su secuela "Patoruzito 2", que acaba de estrenarse en la Argentina. Él es también hoy en día la cabeza de Indiecito, el estudio dedicado exclusivamente a este género que creó Rodríguez como una extensión de su productora Red Lojo, que por estos días apura los trazos para dar forma al próximo y más ambicioso producto de la compañía: "Isidoro", film basado en ese personaje de Quinterno representativo del arquetipo del porteño locuaz, desvergonzado y ocioso, que apunta a un público más adulto que el de sus dos primeros largometrajes.
- ¿Cómo se produce su inserción en el campo de los dibujos animados y de qué manera evoluciona?
- Se produce a los 17 años. Yo había estudiado Bellas Artes y tenía que trabajar. Entré a García Ferré y empecé a pintar los dibujos de Hijitus. Me fui adaptando y tuve que cambiar muchísimo el enfoque visual porque hay que dibujar en otra proporción. Más adelante, cuando llegó "Mil intentos y un invento", el primer largometraje de García Ferré, fui asistente y luego comencé a animar un poquito...vino "Trapito"..."Ico". Eran trabajos muy interrumpidos. Los largometrajes se hacían durante dos años y después no se trabaja por tres años. En el medio hacíamos algunos comercialitos para agencias, pero desde entonces siempre me dediqué al dibujo animado. Un poco de gráfica, cuando no había nada, pero de "Ico" para acá no hice más gráfica. Y ahora estoy aquí en Indiecito.
- Durante décadas García Ferré fue el único referente de animación en el cine argentino, ¿Por qué cree que el género no explotó en la Argentina y es recién en estos últimos años en que se empieza a apostar por este estilo?
- Hacer animación es un riesgo, quizá la película que apunta a ser espectacular, no lo es, a pesar de las inversiones. Por más que tenga mucho dinero puesto, a veces no resulta. Es mucho sacrificio acá en Argentina producir un largometraje. En este caso, de "Patoruzito 2", son 2 millones de dólares. Además va dirigido al mercado de acá, es difícil trascender y no se puede tener una muy buena calidad de película porque se tiene que hacer en poco tiempo, con no tanta gente y con no tanta tecnología, porque sabemos que las películas que van a todo el mundo tienen un presupuesto de 40 millones de dólares para arriba, con mucha gente y mucha tecnología. Nosotros hacemos lo mejor posible con lo poco que tenemos porque las inversiones de aquí no dan para hacer una película por más de un año, lo ideal serían dos o tres con más gente. Entonces no es fácil invertir en un producto que va a ir para un público chico, en principio. Sería bueno que al menos una vez se invierta un poco más de dinero y se haga una mejor película para ver si se puede trascender.
- ¿A qué cosas debe estar especialmente atento un director de animación?
- A la actuación y a cuidar las partes más importantes con los animadores más importantes. Cada secuencia tiene una parte importante y hay que cuidar eso. Por ejemplo, en "El rey león" hay una animación central espectacular y alrededor no esta tan bien o no tan cuidado. Ese es el desafío y mantener la personalidad a los personajes, que cada uno responda al guión y a lo que está pasando.
- ¿Cómo fue el equipo de "Patoruzito 2" y cuánto tiempo duró la realización?
- Fueron 9 animadores de Indiecito, algunos muy experimentados, de los antiguos de García Ferré, y algunos chicos nuevos, muy talentosos que se vienen formando. Además hubo tres de otro estudio que nos ayudaron en una parte, porque para llegar a tiempo necesitábamos 12 animadores con sus respectivos asistentes, intercaladores y encargados de calco, así que serían 12 por 4. La preproducción duró cuatro, cinco meses en lo que fue guión, storyboards, animatics y lay-out, y después un año de animación.
- En esta segunda película de "Patoruzito" se nota una gran mejora en la calidad de animación ¿Cuáles fueron las innovaciones con respecto a la primera?
- Fue una mezcla técnica que creo que en algunas partes nos quedó muy bien y en otras nos faltó un poquito más de estudio, de tiempo. Las innovacioes técnicas pasaron por integrar el 3D con el 2D. En la primera había algunos elementos en 3D y el final, en cambio en esta se integró el 3D en toda la película y los nuevos programas ayudaron. Hay también fondos en 3D. Eso es lo que lo hace interesante y más difícil también porque la mezcla hace que los procesos vayan y vuelvan. Por ejemplo en una toma hay un fondo 2D, con una lancha en 3D, Patoruzito en 2D y el agua en 2D, con un fondo 3D. Eso hace que uno vaya y vuelva con la misma toma muchas veces.
- ¿Por cuál de los dos estilos se inclina más su gusto por la animación: el 2D o el 3D?
- A mí me gusta más el 2D. El 2D bien hecho tiene una sensibilidad única, el otro es muy mecánico aunque queda muy lindo y se acerca mucho al realismo. Pero yo me sigo quedando con el 2D.
- Hay una crítica habitual que reciben las cintas de animación argentinas y es que los fondos no tienen vida, ¿Eso es por cuestión de costos?
- Es dinero, creo. A veces puede ser un criterio, una estética que se hace pensando en el dinero porque si la estética es muy complicada no se termina, no se llega a tiempo. Entonces hay que hacer fondos menos trabajados para llegar a tiempo. Y a lo mejor a nosotros también nos falta un poquito, aunque hay artistas muy buenos.
- ¿Considera que el cine de animación argentino tiene un estilo, una personalidad definida?
- Yo creo que tiene una personalidad, en un cierto nivel, que no es por supuesto el mismo que en Estados Unidos. Creo que en Argentina hay una característica, que no sé como explicarlo pero está a la vista. Uno percibe que es argentino. No sé si es bueno o malo, pero es característica al fin. Lo que si sé es que tenemos que mejorar mucho y que ojalá tuvieramos más tiempo para lograr cosas mejores. Lo bueno es que ahora se hacen películas con más asiduidad y entonces nos estamos aceitando, con mi equipo terminamos una película y ya estamos haciendo otra. Eso es algo que nunca pasó porque con García Ferré se hacía una película cada tres años y para entonces la gente ya estaba en otras cosas. Ni como escuela, ni como cuestión laboral era muy significativo. Por eso a lo mejor el dibujo animado argentino quedó en esta situación, porque no hay continuismo. Recién cuando vino un animador argentino, que vivió veinte años en Estados Unidos, llamado Jaime Díaz, que armó un estudio de animación como para trabajar en el mundo hubo cierto continuismo y esa fue la mejor escuela que tuvimos. Hicimos trabajos para Hanna-Barbera y Disney como "Los pitufos" o "La pantera rosa", que se mandaban a China para que ellos filmen lo que nosotros animábamos. Esa fue la mejor escuela que tuvimos. Estuvo unos trece, catorce años hasta que por un problema económico -el valor del dólar ya no hacía conveniente hacerlo acá- prefirieron mandarlo a China, Taiwán o India. Era de series pero se prepararon algunos avances para películas de Estados Unidos.
- Cuénteme un poco de su nuevo proyecto, "Isidoro", basado en otro personaje de Quinterno...
- Sí, es un desafío. Es animación más realista, es un personaje que es pura personalidad. Creo que es un personaje que va para un público de adolescente para arriba. Isidoro no es un tipo ejemplar, es malcriado, tiene todos los vicios y todo lo que no hay que hacer. Es muy divertido. Los argumentistas y José Luis están buscando abarcar el target general, pero yo creo que hay una parte de la infancia que no se interesará. Creo que va para una edad de 12 o 14 en adelante.
- También imagino que será un trabajo extra ciertos detalles como por ejemplo la vestimenta de "Isidoro", que siempre aparece distinto a diferencia de "Patoruzito" que tiene un solo traje...
- Sí, vimos que teníamos que tener a alguien que se encargue específicamente de eso porque en cada secuencia se cambia de ropa. Lo mismo que Cachorra, una de las chicas que lo acompaña, que tiene una variedad de vestimenta de acuerdo al lugar donde estén o donde van. Sí, es un trabajo extra y nos vamos a tener que cuidar mucho.
- ¿Cuándo llegará a las salas?
- La tenemos que tener lista para las vacaciones de invierno del próximo año. Tenemos solo 8 meses, que es muy poco, si bien hasta ahora parece menos complicada, a pesar de que Isidoro va a estar en lugares populares como el hipódromo o el casino, creo que no va a llegar a la complejidad de "Patoruzito 2" que es toda en Buenos Aires y había que recrear todo eso. Lo que sí es más complicado es la animación de los personajes porque tenemos que aprender a animar personajes en otra proporción y con mucha personalidad. El desafío principal es Isidoro, que sea simpático, que se parezca al personaje que vimos en la historieta "Locuras de Isidoro" y que diga las cosas como sólo él puede decirlas. La actuación será lo más importante.
La historia de la animación en la Argentina se puede reducir a la mención de un solo nombre: Manuel García Ferré. El creador de Anteojito, Hijitus y tantos personajes que forman parte de la cultura popular, realizador de las cintas más reconocidas del género como "Mil intentos y un invento", "Ico, el caballito valiente" o "Manuelita", es el pionero, maestro y -hasta hace apenas unos pocos años- el único exponente del género en la Argentina. Fue precisamente el suceso de "Manuelita" que permitió demostrar que apostar por la animación en la Argentina no era saltar al vacío, sino que podía ser un negocio lucrativo. Así lo supo ver el productor Jorge "Corcho" Rodríguez, que decidió introducirse en este terreno siguiendo la fórmula de "Manuelita", es decir, apelando a un personaje afincado en la memoria de la gente, que pueda atraer a nuevas generaciones. El elegido fue Patoruzito, el pequeño cacique tehuelche creado por Dante Quinterno para la versión infantil pero no menos valiente de su original Patoruzú.
Llevar a este personaje de las historietas blanco y negro a la pantalla grande, requería de un experimentado animador que pudiera asumir tal compromiso. Un currículum que acreditaba varios de los títulos más famosas de García Ferré y una experiencia que abarca más de cuatro décadas, convirtieron a Juan Alberto Grisolía, de 56 años, en el director de animación de "Patoruzito" y también de su secuela "Patoruzito 2", que acaba de estrenarse en la Argentina. Él es también hoy en día la cabeza de Indiecito, el estudio dedicado exclusivamente a este género que creó Rodríguez como una extensión de su productora Red Lojo, que por estos días apura los trazos para dar forma al próximo y más ambicioso producto de la compañía: "Isidoro", film basado en ese personaje de Quinterno representativo del arquetipo del porteño locuaz, desvergonzado y ocioso, que apunta a un público más adulto que el de sus dos primeros largometrajes.
- ¿Cómo se produce su inserción en el campo de los dibujos animados y de qué manera evoluciona?
- Se produce a los 17 años. Yo había estudiado Bellas Artes y tenía que trabajar. Entré a García Ferré y empecé a pintar los dibujos de Hijitus. Me fui adaptando y tuve que cambiar muchísimo el enfoque visual porque hay que dibujar en otra proporción. Más adelante, cuando llegó "Mil intentos y un invento", el primer largometraje de García Ferré, fui asistente y luego comencé a animar un poquito...vino "Trapito"..."Ico". Eran trabajos muy interrumpidos. Los largometrajes se hacían durante dos años y después no se trabaja por tres años. En el medio hacíamos algunos comercialitos para agencias, pero desde entonces siempre me dediqué al dibujo animado. Un poco de gráfica, cuando no había nada, pero de "Ico" para acá no hice más gráfica. Y ahora estoy aquí en Indiecito.
- Durante décadas García Ferré fue el único referente de animación en el cine argentino, ¿Por qué cree que el género no explotó en la Argentina y es recién en estos últimos años en que se empieza a apostar por este estilo?
- Hacer animación es un riesgo, quizá la película que apunta a ser espectacular, no lo es, a pesar de las inversiones. Por más que tenga mucho dinero puesto, a veces no resulta. Es mucho sacrificio acá en Argentina producir un largometraje. En este caso, de "Patoruzito 2", son 2 millones de dólares. Además va dirigido al mercado de acá, es difícil trascender y no se puede tener una muy buena calidad de película porque se tiene que hacer en poco tiempo, con no tanta gente y con no tanta tecnología, porque sabemos que las películas que van a todo el mundo tienen un presupuesto de 40 millones de dólares para arriba, con mucha gente y mucha tecnología. Nosotros hacemos lo mejor posible con lo poco que tenemos porque las inversiones de aquí no dan para hacer una película por más de un año, lo ideal serían dos o tres con más gente. Entonces no es fácil invertir en un producto que va a ir para un público chico, en principio. Sería bueno que al menos una vez se invierta un poco más de dinero y se haga una mejor película para ver si se puede trascender.
- ¿A qué cosas debe estar especialmente atento un director de animación?
- A la actuación y a cuidar las partes más importantes con los animadores más importantes. Cada secuencia tiene una parte importante y hay que cuidar eso. Por ejemplo, en "El rey león" hay una animación central espectacular y alrededor no esta tan bien o no tan cuidado. Ese es el desafío y mantener la personalidad a los personajes, que cada uno responda al guión y a lo que está pasando.
- ¿Cómo fue el equipo de "Patoruzito 2" y cuánto tiempo duró la realización?
- Fueron 9 animadores de Indiecito, algunos muy experimentados, de los antiguos de García Ferré, y algunos chicos nuevos, muy talentosos que se vienen formando. Además hubo tres de otro estudio que nos ayudaron en una parte, porque para llegar a tiempo necesitábamos 12 animadores con sus respectivos asistentes, intercaladores y encargados de calco, así que serían 12 por 4. La preproducción duró cuatro, cinco meses en lo que fue guión, storyboards, animatics y lay-out, y después un año de animación.
- En esta segunda película de "Patoruzito" se nota una gran mejora en la calidad de animación ¿Cuáles fueron las innovaciones con respecto a la primera?
- Fue una mezcla técnica que creo que en algunas partes nos quedó muy bien y en otras nos faltó un poquito más de estudio, de tiempo. Las innovacioes técnicas pasaron por integrar el 3D con el 2D. En la primera había algunos elementos en 3D y el final, en cambio en esta se integró el 3D en toda la película y los nuevos programas ayudaron. Hay también fondos en 3D. Eso es lo que lo hace interesante y más difícil también porque la mezcla hace que los procesos vayan y vuelvan. Por ejemplo en una toma hay un fondo 2D, con una lancha en 3D, Patoruzito en 2D y el agua en 2D, con un fondo 3D. Eso hace que uno vaya y vuelva con la misma toma muchas veces.
- ¿Por cuál de los dos estilos se inclina más su gusto por la animación: el 2D o el 3D?
- A mí me gusta más el 2D. El 2D bien hecho tiene una sensibilidad única, el otro es muy mecánico aunque queda muy lindo y se acerca mucho al realismo. Pero yo me sigo quedando con el 2D.
- Hay una crítica habitual que reciben las cintas de animación argentinas y es que los fondos no tienen vida, ¿Eso es por cuestión de costos?
- Es dinero, creo. A veces puede ser un criterio, una estética que se hace pensando en el dinero porque si la estética es muy complicada no se termina, no se llega a tiempo. Entonces hay que hacer fondos menos trabajados para llegar a tiempo. Y a lo mejor a nosotros también nos falta un poquito, aunque hay artistas muy buenos.
- ¿Considera que el cine de animación argentino tiene un estilo, una personalidad definida?
- Yo creo que tiene una personalidad, en un cierto nivel, que no es por supuesto el mismo que en Estados Unidos. Creo que en Argentina hay una característica, que no sé como explicarlo pero está a la vista. Uno percibe que es argentino. No sé si es bueno o malo, pero es característica al fin. Lo que si sé es que tenemos que mejorar mucho y que ojalá tuvieramos más tiempo para lograr cosas mejores. Lo bueno es que ahora se hacen películas con más asiduidad y entonces nos estamos aceitando, con mi equipo terminamos una película y ya estamos haciendo otra. Eso es algo que nunca pasó porque con García Ferré se hacía una película cada tres años y para entonces la gente ya estaba en otras cosas. Ni como escuela, ni como cuestión laboral era muy significativo. Por eso a lo mejor el dibujo animado argentino quedó en esta situación, porque no hay continuismo. Recién cuando vino un animador argentino, que vivió veinte años en Estados Unidos, llamado Jaime Díaz, que armó un estudio de animación como para trabajar en el mundo hubo cierto continuismo y esa fue la mejor escuela que tuvimos. Hicimos trabajos para Hanna-Barbera y Disney como "Los pitufos" o "La pantera rosa", que se mandaban a China para que ellos filmen lo que nosotros animábamos. Esa fue la mejor escuela que tuvimos. Estuvo unos trece, catorce años hasta que por un problema económico -el valor del dólar ya no hacía conveniente hacerlo acá- prefirieron mandarlo a China, Taiwán o India. Era de series pero se prepararon algunos avances para películas de Estados Unidos.
- Cuénteme un poco de su nuevo proyecto, "Isidoro", basado en otro personaje de Quinterno...
- Sí, es un desafío. Es animación más realista, es un personaje que es pura personalidad. Creo que es un personaje que va para un público de adolescente para arriba. Isidoro no es un tipo ejemplar, es malcriado, tiene todos los vicios y todo lo que no hay que hacer. Es muy divertido. Los argumentistas y José Luis están buscando abarcar el target general, pero yo creo que hay una parte de la infancia que no se interesará. Creo que va para una edad de 12 o 14 en adelante.
- También imagino que será un trabajo extra ciertos detalles como por ejemplo la vestimenta de "Isidoro", que siempre aparece distinto a diferencia de "Patoruzito" que tiene un solo traje...
- Sí, vimos que teníamos que tener a alguien que se encargue específicamente de eso porque en cada secuencia se cambia de ropa. Lo mismo que Cachorra, una de las chicas que lo acompaña, que tiene una variedad de vestimenta de acuerdo al lugar donde estén o donde van. Sí, es un trabajo extra y nos vamos a tener que cuidar mucho.
- ¿Cuándo llegará a las salas?
- La tenemos que tener lista para las vacaciones de invierno del próximo año. Tenemos solo 8 meses, que es muy poco, si bien hasta ahora parece menos complicada, a pesar de que Isidoro va a estar en lugares populares como el hipódromo o el casino, creo que no va a llegar a la complejidad de "Patoruzito 2" que es toda en Buenos Aires y había que recrear todo eso. Lo que sí es más complicado es la animación de los personajes porque tenemos que aprender a animar personajes en otra proporción y con mucha personalidad. El desafío principal es Isidoro, que sea simpático, que se parezca al personaje que vimos en la historieta "Locuras de Isidoro" y que diga las cosas como sólo él puede decirlas. La actuación será lo más importante.
- © Cynthia M. García (Argentina)-NOTICINE.com

Maribel Verdú vuelve a rodar en México
20-VII-06
El pasado 17 de julio se inició en México D.F. el rodaje de la película "La Zona", un thriller situado en el interior de una zona residencial de lujo de la capital mexicana, rodeada de un inmenso barrio de chabolas, que cuenta con un importante elenco encabezado por Maribel Verdú, quien en estas tierras ha rodado uno de sus trabajos más celebrados, "Y tu mamá también".
La acción de "La zona" comienza cuando tres adolescentes consiguen inconscientemente "colarse" en La Zona. Dos son abatidos y uno de ellos logra escapar. Los residentes deciden entonces cazar al ladrón sin dar aviso a la policía. Desde el exterior, un agente lucha desesperadamente contra el tiempo y un sistema corrupto para salvarles.
Rodrigo Plá, ganador de un Oscar Estudiantil al Mejor Cortometraje Extranjero del 2001 por "El ojo en la nuca", entre otros muchos premios, se estrena con este film en la dirección de largometrajes. En el plano artístico, destaca un elenco de actores de primera fila como Verdú, Daniel Giménez Cacho, Carlos Bardem y el mexicano Javier Zaragoza ("Un mundo maravilloso").
En la parte técnica, la película cuenta también con importante representación española como Laura Santullo, guionista de la obra; Nacho Ruiz Capillas y Mercedes Alted, que se encargarán del montaje; Antonio Muñohierro, responsable de arte o Licio Marcos de Oliveira, encargado del sonido directo.
La cinta se rodará en México D.F. durante siete semanas y media. "La Zona" es una coproducción de las productoras españolas Morena Films y Estrategia, y de la mexicana Buenaventura Producciones.
Verdú, que acaba de finalizar la filmación en la Argentina de "El niño de barro", thriller psicológico sobre un asesino en serie, será vista en las pantallas próximamente en "El laberinto del fauno", de Guillermo del Toro.
El pasado 17 de julio se inició en México D.F. el rodaje de la película "La Zona", un thriller situado en el interior de una zona residencial de lujo de la capital mexicana, rodeada de un inmenso barrio de chabolas, que cuenta con un importante elenco encabezado por Maribel Verdú, quien en estas tierras ha rodado uno de sus trabajos más celebrados, "Y tu mamá también".
La acción de "La zona" comienza cuando tres adolescentes consiguen inconscientemente "colarse" en La Zona. Dos son abatidos y uno de ellos logra escapar. Los residentes deciden entonces cazar al ladrón sin dar aviso a la policía. Desde el exterior, un agente lucha desesperadamente contra el tiempo y un sistema corrupto para salvarles.
Rodrigo Plá, ganador de un Oscar Estudiantil al Mejor Cortometraje Extranjero del 2001 por "El ojo en la nuca", entre otros muchos premios, se estrena con este film en la dirección de largometrajes. En el plano artístico, destaca un elenco de actores de primera fila como Verdú, Daniel Giménez Cacho, Carlos Bardem y el mexicano Javier Zaragoza ("Un mundo maravilloso").
En la parte técnica, la película cuenta también con importante representación española como Laura Santullo, guionista de la obra; Nacho Ruiz Capillas y Mercedes Alted, que se encargarán del montaje; Antonio Muñohierro, responsable de arte o Licio Marcos de Oliveira, encargado del sonido directo.
La cinta se rodará en México D.F. durante siete semanas y media. "La Zona" es una coproducción de las productoras españolas Morena Films y Estrategia, y de la mexicana Buenaventura Producciones.
Verdú, que acaba de finalizar la filmación en la Argentina de "El niño de barro", thriller psicológico sobre un asesino en serie, será vista en las pantallas próximamente en "El laberinto del fauno", de Guillermo del Toro.
- © Redacción (México)-NOTICINE.com