Crónicas

Nahuel Pérez Biscayart, la revelación del cine argentino
14-XI-05
“Nadie me reconoce por la calle”, afirma con convicción Nahuel Pérez Biscayart, joven actor de escasos 19 años que se ha convertido en la revelación del cine argentino -muy a su pesar-, gracias a su protagónico en la premiada “Tatuado”, drama sobre un chico en busca de su identidad, y su participación en “El aura”, thriller de Fabián Bielinsky que es uno de los éxitos de taquilla de este 2005 en la Argentina.
Fue el taller de teatro escolar lo que despertó el interés de Pérez Biscayart por la actuación y muy pronto ya se vio trabajando profesionalmente. En el 2003 debutó en televisión con “Disputas”, una serie televisiva dirigida por Adrián Caetano (“Un oso rojo”) sobre un grupo de mujeres que practicaban el oficio más antiguo del mundo, dando vida a un oscuro adolescente. Rápidamente se le abrieron las puertas de la industria por su talento y esos rasgos particulares que le otorgan una presencia inquietante. En cine dio su primer paso en 2004 con “Próxima salida”, de Nicolás Tuozzo, una cinta de la que no guarda un buen recuerdo y define como “mediocre, sensiblera y hecha para viajar a festivales”, dando muestra de una franqueza poco frecuente en el mundo del espectáculo.
- Por tu protagónico en “Tatuado” y tu destacado secundario en “El aura” has sido catalogado como la revelación del año en cine ¿Cómo reaccionas a este concepto?
- No me hago cargo. Es algo que está por fuera de mí. No me quiero detener en eso porque no están buenos los rótulos. Particularmente a mí no me enciende, no me potencia, sino que me estanca, me condiciona.
- ¿Cómo viviste los momentos previos y posteriores al estreno de “Tatuado”, que representa tu primer protagónico?
- La semana previa a estrenar estaba re-bien y el fin de semana anterior me angustió por lo que venía, por ese inminente estreno...tanta mirada puesta encima. La mirada es juiciosa, entonces no te hace estar relajado. Ahora que pasó, estoy feliz. El estreno fue rarísimo, saludé a quinientas personas en diez minutos...una locura. No es disfrutable. El disfrute pasa por el rodaje, en el momento de trabajar y generar. Después lo otro todavía no lo entiendo, es raro. Uno tiene que poner su cara para promocionar una película que no te pertenece en su totalidad. Me inquieta, me angustia y me parece incierto. Me desacomoda, no puedo accionar con un entendimiento claro del asunto. Cuando me doy cuenta que algo está pésimo y salió una nota horrible, me enojo, y aprendo, y entiendo por donde va. Pero tampoco me gusta dedicarle tiempo a eso. No está bueno, si yo quiero actuar nada más. Es como una carga más, además de actuar tengo que aprender a convivir con lo que viene cuando es el estreno. Es complicado y a la vez no lo puedo evitar.
- En el exterior “Tatuado” está teniendo una buena repercusión en festivales de cine y pareciera que tuvo una mejor respuesta fuera del país que acá ¿Por qué te parece que es así?
- Para mí cuando ves una película extranjera ya tiene algo de exótico y atractivo, ya tenés a favor que no hablás el mismo idioma, un escenario diferente y el otro está más receptivo. En un punto creo que gusta porque no tiene ningún latinoamericanismo pedorro pasaportil para viajar a festivales, no tiene concesiones...tiene una música rara de Melero a principio y fin, está hablada en “argentino”, con actores desconocidos, y en el campo, que no hay muchas películas que sean en el campo sin el gaucho y lo campestre. Pero, bueno, después les gusta una película venezolana de mierda que habla de la chica de la calle, con la pobreza estetizada, todo banalizado y esas cosas.
- Este año estrenaste dos películas tan distintas como “Tatuado” y “El aura” ¿Cuáles fueron las diferencias básicas para vos como actor?
- “Tatuado” fue la primera, todo era aprendizaje puro, todo era novedad. Además me gusta aprender y ver lo que pasa en el rodaje. Se desarrolló de una manera mucho más pequeña, era un grupo de trabajo de sesenta personas y “El aura” era un hecatombe de trescientas personas en una pirámide jerárquica de mandato a mandatario, y eso en un punto te aleja del proceso creativo íntimo. El director tiene que estar muy presente, con la idea muy clara de lo que quiere contar...y vos tenés que confiar en el director , como siempre.
- Por lo que comentas pareciera que con las películas más pequeñas te sientes más cómodo...
- A mí me gusta lo pequeño, lo genuino, cuando ves una película y ves un director, una sensibilidad , una mirada...Mientras haya personalidad, está buenísimo. Una superproducción condiciona mucho, el fin no es abrirle la puerta a un director para que pueda fluir como él quiere, porque hay condicionamientos comerciales que por ahí lo alejan de esa visera creativa más pura.
- ¿Cuál es saldo de haber trabajado en una superproducción como “El aura”?
- Te da llegada. No te hace ni mejor ni peor actor para vos, pero para la gente por ahí sí. Hay un punto en que uno no trabaja solamente porque es buen actor, o sea, vos podés ser buen actor pero si acabás de trabajar en “El aura” y en un programa de televisión buscan a un pibe de mi edad, seguro dicen: `Llamalo al pibe de “El aura”´. Esto no es porque sea mejor sino porque estoy en “El aura”. Te da esa masividad, te asocian más, sos más vendible. Igual mi vida sigue igual, nadie me reconoce por la calle. Y eso es buenísimo.
- Para el año próximo tienes cuatro cintas para estrenar, cuéntame un poco sobre ellas.
- “Glue” es una película que filmamos en Zapala, Neuquén, en un pueblo, a base de improvisaciones. Teníamos un guión de diecisiete hojas que las escenas no estaban desarrolladas en cuanto a diálogos, sino que estaban planteadas a nivel acción y cómo debía transcurrir la historia. Son chicos adolescente en el medio de la nada, creciendo, descubriendo el sexo, y están los amigos, el rock...es muy tierna y en un ambiente extraño. “La hermana menor” es sobre cuatro hermanos que perdieron a sus padres: yo pegué un brote sicótico y me internaron en una granja de rehabilitación, la hermana mayor desapareció y manda postales todas iguales, la del medio tiene hijas y la menor se prostituye para pagar los estudios y busca a la hermana mayor. Parece un dramón pero es como una comedia, un híbrido rarísimo y trabaja María Alché (“La niña santa”). “La vuelta de Peter”, de Néstor Montalbano, es sobre un cantante tropical que ha triunfado y vuelve a su pueblo veinte años después, y se entera que su ex mujer sale con su hermano y que tiene un hijo de diecinueve años que es transexual, que soy yo. Y en “Fumar es un vicio como cualquier otro” hago una participación muy pequeña como un chico punk, que vive en una casa millonario con un padre que odia.
- Antes comentabas que te interesa todo lo que sucede en un rodaje, ¿Te gustaría dedicarte a la dirección, por ejemplo?
- Sí, me dan ganas de dirigir, se me ocurren ideas y trato de escribirlas, pero siento que todavía me faltan algunos años más para machacarme con la vida y poder canalizar y desarrollar un guión.
“Nadie me reconoce por la calle”, afirma con convicción Nahuel Pérez Biscayart, joven actor de escasos 19 años que se ha convertido en la revelación del cine argentino -muy a su pesar-, gracias a su protagónico en la premiada “Tatuado”, drama sobre un chico en busca de su identidad, y su participación en “El aura”, thriller de Fabián Bielinsky que es uno de los éxitos de taquilla de este 2005 en la Argentina.
Fue el taller de teatro escolar lo que despertó el interés de Pérez Biscayart por la actuación y muy pronto ya se vio trabajando profesionalmente. En el 2003 debutó en televisión con “Disputas”, una serie televisiva dirigida por Adrián Caetano (“Un oso rojo”) sobre un grupo de mujeres que practicaban el oficio más antiguo del mundo, dando vida a un oscuro adolescente. Rápidamente se le abrieron las puertas de la industria por su talento y esos rasgos particulares que le otorgan una presencia inquietante. En cine dio su primer paso en 2004 con “Próxima salida”, de Nicolás Tuozzo, una cinta de la que no guarda un buen recuerdo y define como “mediocre, sensiblera y hecha para viajar a festivales”, dando muestra de una franqueza poco frecuente en el mundo del espectáculo.
- Por tu protagónico en “Tatuado” y tu destacado secundario en “El aura” has sido catalogado como la revelación del año en cine ¿Cómo reaccionas a este concepto?
- No me hago cargo. Es algo que está por fuera de mí. No me quiero detener en eso porque no están buenos los rótulos. Particularmente a mí no me enciende, no me potencia, sino que me estanca, me condiciona.
- ¿Cómo viviste los momentos previos y posteriores al estreno de “Tatuado”, que representa tu primer protagónico?
- La semana previa a estrenar estaba re-bien y el fin de semana anterior me angustió por lo que venía, por ese inminente estreno...tanta mirada puesta encima. La mirada es juiciosa, entonces no te hace estar relajado. Ahora que pasó, estoy feliz. El estreno fue rarísimo, saludé a quinientas personas en diez minutos...una locura. No es disfrutable. El disfrute pasa por el rodaje, en el momento de trabajar y generar. Después lo otro todavía no lo entiendo, es raro. Uno tiene que poner su cara para promocionar una película que no te pertenece en su totalidad. Me inquieta, me angustia y me parece incierto. Me desacomoda, no puedo accionar con un entendimiento claro del asunto. Cuando me doy cuenta que algo está pésimo y salió una nota horrible, me enojo, y aprendo, y entiendo por donde va. Pero tampoco me gusta dedicarle tiempo a eso. No está bueno, si yo quiero actuar nada más. Es como una carga más, además de actuar tengo que aprender a convivir con lo que viene cuando es el estreno. Es complicado y a la vez no lo puedo evitar.
- En el exterior “Tatuado” está teniendo una buena repercusión en festivales de cine y pareciera que tuvo una mejor respuesta fuera del país que acá ¿Por qué te parece que es así?
- Para mí cuando ves una película extranjera ya tiene algo de exótico y atractivo, ya tenés a favor que no hablás el mismo idioma, un escenario diferente y el otro está más receptivo. En un punto creo que gusta porque no tiene ningún latinoamericanismo pedorro pasaportil para viajar a festivales, no tiene concesiones...tiene una música rara de Melero a principio y fin, está hablada en “argentino”, con actores desconocidos, y en el campo, que no hay muchas películas que sean en el campo sin el gaucho y lo campestre. Pero, bueno, después les gusta una película venezolana de mierda que habla de la chica de la calle, con la pobreza estetizada, todo banalizado y esas cosas.
- Este año estrenaste dos películas tan distintas como “Tatuado” y “El aura” ¿Cuáles fueron las diferencias básicas para vos como actor?
- “Tatuado” fue la primera, todo era aprendizaje puro, todo era novedad. Además me gusta aprender y ver lo que pasa en el rodaje. Se desarrolló de una manera mucho más pequeña, era un grupo de trabajo de sesenta personas y “El aura” era un hecatombe de trescientas personas en una pirámide jerárquica de mandato a mandatario, y eso en un punto te aleja del proceso creativo íntimo. El director tiene que estar muy presente, con la idea muy clara de lo que quiere contar...y vos tenés que confiar en el director , como siempre.
- Por lo que comentas pareciera que con las películas más pequeñas te sientes más cómodo...
- A mí me gusta lo pequeño, lo genuino, cuando ves una película y ves un director, una sensibilidad , una mirada...Mientras haya personalidad, está buenísimo. Una superproducción condiciona mucho, el fin no es abrirle la puerta a un director para que pueda fluir como él quiere, porque hay condicionamientos comerciales que por ahí lo alejan de esa visera creativa más pura.
- ¿Cuál es saldo de haber trabajado en una superproducción como “El aura”?
- Te da llegada. No te hace ni mejor ni peor actor para vos, pero para la gente por ahí sí. Hay un punto en que uno no trabaja solamente porque es buen actor, o sea, vos podés ser buen actor pero si acabás de trabajar en “El aura” y en un programa de televisión buscan a un pibe de mi edad, seguro dicen: `Llamalo al pibe de “El aura”´. Esto no es porque sea mejor sino porque estoy en “El aura”. Te da esa masividad, te asocian más, sos más vendible. Igual mi vida sigue igual, nadie me reconoce por la calle. Y eso es buenísimo.
- Para el año próximo tienes cuatro cintas para estrenar, cuéntame un poco sobre ellas.
- “Glue” es una película que filmamos en Zapala, Neuquén, en un pueblo, a base de improvisaciones. Teníamos un guión de diecisiete hojas que las escenas no estaban desarrolladas en cuanto a diálogos, sino que estaban planteadas a nivel acción y cómo debía transcurrir la historia. Son chicos adolescente en el medio de la nada, creciendo, descubriendo el sexo, y están los amigos, el rock...es muy tierna y en un ambiente extraño. “La hermana menor” es sobre cuatro hermanos que perdieron a sus padres: yo pegué un brote sicótico y me internaron en una granja de rehabilitación, la hermana mayor desapareció y manda postales todas iguales, la del medio tiene hijas y la menor se prostituye para pagar los estudios y busca a la hermana mayor. Parece un dramón pero es como una comedia, un híbrido rarísimo y trabaja María Alché (“La niña santa”). “La vuelta de Peter”, de Néstor Montalbano, es sobre un cantante tropical que ha triunfado y vuelve a su pueblo veinte años después, y se entera que su ex mujer sale con su hermano y que tiene un hijo de diecinueve años que es transexual, que soy yo. Y en “Fumar es un vicio como cualquier otro” hago una participación muy pequeña como un chico punk, que vive en una casa millonario con un padre que odia.
- Antes comentabas que te interesa todo lo que sucede en un rodaje, ¿Te gustaría dedicarte a la dirección, por ejemplo?
- Sí, me dan ganas de dirigir, se me ocurren ideas y trato de escribirlas, pero siento que todavía me faltan algunos años más para machacarme con la vida y poder canalizar y desarrollar un guión.
- © Cynthia M. García (Argentina)-NOTICINE.com

"En la cama" y "El baño" coinciden en su estreno chileno
14-XI-05
Se veía venir. Un segundo semestre cargado de estrenos ha provocado algo poco habitual en un país donde no existe una producción tan abundante. Aún así, tras el estreno este jueves de la película “El Huésped”, ahora se espera para el próximo jueves 17 nada menos que el estreno de dos películas chilenas.
Una de ellas será la esperada cinta “En la cama”, de Matías Bize (“Sábado”), reciente ganadora como Mejor Película de la 50 Semana Internacional de Cine de Valladolid. La película, también ganadora del Festival de Cine de Viña del Mar, es una coproducción chileno-alemana y está protagonizada por Blanca Lewin y Gonzalo Valenzuela.
La cinta cuenta la historia de una pareja de jóvenes (Bruno y Daniela) durante las cuatro horas que comparten en un pieza de motel para parejas. Prácticamente no se conocen, y luego de toparse en una fiesta deciden irse juntos sólo para tener sexo casual. Durante la jornada, van apareciendo los conflictos, y el deseo se entremezcla con la intimidad y las emociones, surgiendo un tipo distinto de relación que cambiará sus vidas.
Estrenada en el Festival de Locarno, la cinta ha recibido destacadas críticas internacionales y la revista “Cahiers du Cinema” destacó a Matías Bize, de 26 años, como el cineasta de mayor proyección en Chile.
Además, en la misma fecha será el estreno de “El baño”, la ópera prima del dramaturgo, actor, escritor y guionista Gregory Cohen, quien después de varios años, logró estrenar finalmente esta cinta de corte experimental, que narra los sucesos más importantes de 20 años de la historia de Chile a través de lo que ocurre dentro de un baño.
Protagonizado por Pablo Macaya, Faryde Kaid, Alex Zisis, Aline Kuppenheim, Ramón Llao y Jaime McManus, el film tiene una sola locación (el baño de una casa) y desde un mismo punto de vista de la cámara, va mostrando el desfile de una serie de personajes que la habitan entre los años 1968 y 1988.
Con una postura comprometida y abordando los sucesos políticos recientes de la historia chilena, el largometraje muestra a una pareja de hippies en crisis, personas de derecha vinculadas a atentados, jóvenes que se preparan a protestar y hasta un torturador y sus víctimas, en una película de un singular humor negro, con momentos de mucho dramatismo y otros muy divertidos.
Se veía venir. Un segundo semestre cargado de estrenos ha provocado algo poco habitual en un país donde no existe una producción tan abundante. Aún así, tras el estreno este jueves de la película “El Huésped”, ahora se espera para el próximo jueves 17 nada menos que el estreno de dos películas chilenas.
Una de ellas será la esperada cinta “En la cama”, de Matías Bize (“Sábado”), reciente ganadora como Mejor Película de la 50 Semana Internacional de Cine de Valladolid. La película, también ganadora del Festival de Cine de Viña del Mar, es una coproducción chileno-alemana y está protagonizada por Blanca Lewin y Gonzalo Valenzuela.
La cinta cuenta la historia de una pareja de jóvenes (Bruno y Daniela) durante las cuatro horas que comparten en un pieza de motel para parejas. Prácticamente no se conocen, y luego de toparse en una fiesta deciden irse juntos sólo para tener sexo casual. Durante la jornada, van apareciendo los conflictos, y el deseo se entremezcla con la intimidad y las emociones, surgiendo un tipo distinto de relación que cambiará sus vidas.
Estrenada en el Festival de Locarno, la cinta ha recibido destacadas críticas internacionales y la revista “Cahiers du Cinema” destacó a Matías Bize, de 26 años, como el cineasta de mayor proyección en Chile.
Además, en la misma fecha será el estreno de “El baño”, la ópera prima del dramaturgo, actor, escritor y guionista Gregory Cohen, quien después de varios años, logró estrenar finalmente esta cinta de corte experimental, que narra los sucesos más importantes de 20 años de la historia de Chile a través de lo que ocurre dentro de un baño.
Protagonizado por Pablo Macaya, Faryde Kaid, Alex Zisis, Aline Kuppenheim, Ramón Llao y Jaime McManus, el film tiene una sola locación (el baño de una casa) y desde un mismo punto de vista de la cámara, va mostrando el desfile de una serie de personajes que la habitan entre los años 1968 y 1988.
Con una postura comprometida y abordando los sucesos políticos recientes de la historia chilena, el largometraje muestra a una pareja de hippies en crisis, personas de derecha vinculadas a atentados, jóvenes que se preparan a protestar y hasta un torturador y sus víctimas, en una película de un singular humor negro, con momentos de mucho dramatismo y otros muy divertidos.
- © Tatiana Gajardo (Chile)-NOTICINE.com

Pedro Masó recibirá Goya de Honor
11-XI-05
Pedro Masó ha sido reconocido por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España con el Goya de Honor 2005 por toda su carrera. Este galardón se le entregará como es tradición durante la próxima Gala de los Premios Anuales de la Academia que tendrá lugar el 29 de enero de 2006.
La carrera cinematográfica de Pedro Masó acaba de cumplir 60 años, en el transcurso de los cuales ha seguido la evolución social, moral y política de la sociedad española, por lo que su amplia obra constituye un importante testimonio sociológico sobre el último medio siglo de la historia de nuestro país. Recorre el escalafón cinematográfico entre producción y dirección y debuta como guionista en 1953 con la película “Como la tierra”. Entre sus éxitos más destacados como guionista están “Las Chicas de la Cruz Roja”, “El día de los enamorados”, “Los ángeles del volante”, “Atraco a las tres” “Siempre es domingo” y “091 Policía al habla” con los que fue creando temas y personajes de raigambre popular.
En 1961 realiza “Tres de la Cruz Roja” y “Usted puede ser un asesino”. Un año más tarde crea su propia compañía Pedro Masó Producciones Cinematográficas, con la que consigue algunos de los mayores éxitos comerciales del cine español como “Atraco a las tres”, “Vacaciones para Ivette”, “La Ciudad no es para mí”, “Nuevo en esta plaza”, “Un millón a la basura” y “La Gran Familia”, que constituye un rotundo éxito, por lo que posteriormente rueda “La Familia y uno más” y “La Familia, bien gracias”. Estas películas reflejan ya la profunda transformación de la vida española en estos años de desarrollo económico.
Para 1971 decide asumir la realización de los largometrajes “El Astronauta”, “Crimen Imperfecto” o “Historias de la Televisión”. El clima de la década de los setenta y la apertura de la censura propició una reorientación de su carrera hacia temas escabrosos tratados en clave moralizante, que se reflejan en las películas “Experiencia prematrimonial” (1972) y “Una chica y un señor” (1973), con la que lanzó a Ornella Muti.
En 1975/78 descubre jóvenes actrices en películas como “Las adolescentes”, “La Menor” , “La Coquito” , “La Miel” y rueda “La Familia, bien gracias” que cierra la trilogía de aquella gran familia. En 1979, inicia su colaboración con el guionista Rafael Azcona y aborda los temas más polémicos que se plantean al principio de la democracia en películas como “El divorcio que viene” (1980) o “Puente aéreo” (1981), que trata sobre la protitución de lujo.
Hasta 1982 ha escrito, producido y dirigido alrededor de 70 títulos. Durante los años 80 y 90 se dedica a las series televisivas, que muestran la misma sintonía con los gustos mayoritarios del público y completan su testimonio sobre la evolución de la sociedad española. En 1983 dirige y produce su primer trabajo para Televisión Española con la serie “Anillos de Oro” y dos años más tarde se hace cargo de la serie “Segunda Enseñanza”.
En 1986 funda la sociedad Escorpio Films, S.A. como filial de Pedro Masó Producciones Cinematográficas y produce su primer largometraje basado en una novela de Miguel Delibes, que dirige Antonio Mercero, titulada “El Tesoro”. Un año después produce la película “La Rusa” basada en la novela de Juan Luis Cebrián y dirigida por Mario Camus. También produce y dirige para Televisión Española la serie “Brigada Central” sobre guión del propio Masó, de Simón Michael, Jacques Labib y Juan Madrid.
A partir de 1993 dirige y produce para Antena 3 Televisión la serie “Compuesta y Sin Novio”, protagonizada por Lina Morgan y José Coronado. En 1994 produce el largometraje “El Seductor”, sobre guión de Rafael Azcona, interpretada por María Barranco y dirigida por José Luis García Sánchez, y dirige “Hermana, ¿Pero qué has hecho?”, que supone el regreso Lina Morgan a la pantalla grande tras veinte años de ausencia.
En 1995 produce “Gran Slalom”, sobre guión de Rafael Azcona, interpretada por Juanjo Puigcorbé y dirigida por Jaime Chavarri. Estos tres proyectos son coproducidos con Aurum Producciones, S.A. En 1999 escribe y dirige “La familia… 30 años después”, largometraje que se estrena en ANTENA 3 TELEVISION, cadena que también emite “Un chupete para ella”, una serie escrita y producida por Masó, que se convierte en uno de los mayores éxitos de la temporada en televisión. A partir de ahí comienzan a prepararse nuevos proyectos para la gran pantalla, el primero de ellos es “Atraco a las 3... y media”.
Pedro Masó ha sido reconocido por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España con el Goya de Honor 2005 por toda su carrera. Este galardón se le entregará como es tradición durante la próxima Gala de los Premios Anuales de la Academia que tendrá lugar el 29 de enero de 2006.
La carrera cinematográfica de Pedro Masó acaba de cumplir 60 años, en el transcurso de los cuales ha seguido la evolución social, moral y política de la sociedad española, por lo que su amplia obra constituye un importante testimonio sociológico sobre el último medio siglo de la historia de nuestro país. Recorre el escalafón cinematográfico entre producción y dirección y debuta como guionista en 1953 con la película “Como la tierra”. Entre sus éxitos más destacados como guionista están “Las Chicas de la Cruz Roja”, “El día de los enamorados”, “Los ángeles del volante”, “Atraco a las tres” “Siempre es domingo” y “091 Policía al habla” con los que fue creando temas y personajes de raigambre popular.
En 1961 realiza “Tres de la Cruz Roja” y “Usted puede ser un asesino”. Un año más tarde crea su propia compañía Pedro Masó Producciones Cinematográficas, con la que consigue algunos de los mayores éxitos comerciales del cine español como “Atraco a las tres”, “Vacaciones para Ivette”, “La Ciudad no es para mí”, “Nuevo en esta plaza”, “Un millón a la basura” y “La Gran Familia”, que constituye un rotundo éxito, por lo que posteriormente rueda “La Familia y uno más” y “La Familia, bien gracias”. Estas películas reflejan ya la profunda transformación de la vida española en estos años de desarrollo económico.
Para 1971 decide asumir la realización de los largometrajes “El Astronauta”, “Crimen Imperfecto” o “Historias de la Televisión”. El clima de la década de los setenta y la apertura de la censura propició una reorientación de su carrera hacia temas escabrosos tratados en clave moralizante, que se reflejan en las películas “Experiencia prematrimonial” (1972) y “Una chica y un señor” (1973), con la que lanzó a Ornella Muti.
En 1975/78 descubre jóvenes actrices en películas como “Las adolescentes”, “La Menor” , “La Coquito” , “La Miel” y rueda “La Familia, bien gracias” que cierra la trilogía de aquella gran familia. En 1979, inicia su colaboración con el guionista Rafael Azcona y aborda los temas más polémicos que se plantean al principio de la democracia en películas como “El divorcio que viene” (1980) o “Puente aéreo” (1981), que trata sobre la protitución de lujo.
Hasta 1982 ha escrito, producido y dirigido alrededor de 70 títulos. Durante los años 80 y 90 se dedica a las series televisivas, que muestran la misma sintonía con los gustos mayoritarios del público y completan su testimonio sobre la evolución de la sociedad española. En 1983 dirige y produce su primer trabajo para Televisión Española con la serie “Anillos de Oro” y dos años más tarde se hace cargo de la serie “Segunda Enseñanza”.
En 1986 funda la sociedad Escorpio Films, S.A. como filial de Pedro Masó Producciones Cinematográficas y produce su primer largometraje basado en una novela de Miguel Delibes, que dirige Antonio Mercero, titulada “El Tesoro”. Un año después produce la película “La Rusa” basada en la novela de Juan Luis Cebrián y dirigida por Mario Camus. También produce y dirige para Televisión Española la serie “Brigada Central” sobre guión del propio Masó, de Simón Michael, Jacques Labib y Juan Madrid.
A partir de 1993 dirige y produce para Antena 3 Televisión la serie “Compuesta y Sin Novio”, protagonizada por Lina Morgan y José Coronado. En 1994 produce el largometraje “El Seductor”, sobre guión de Rafael Azcona, interpretada por María Barranco y dirigida por José Luis García Sánchez, y dirige “Hermana, ¿Pero qué has hecho?”, que supone el regreso Lina Morgan a la pantalla grande tras veinte años de ausencia.
En 1995 produce “Gran Slalom”, sobre guión de Rafael Azcona, interpretada por Juanjo Puigcorbé y dirigida por Jaime Chavarri. Estos tres proyectos son coproducidos con Aurum Producciones, S.A. En 1999 escribe y dirige “La familia… 30 años después”, largometraje que se estrena en ANTENA 3 TELEVISION, cadena que también emite “Un chupete para ella”, una serie escrita y producida por Masó, que se convierte en uno de los mayores éxitos de la temporada en televisión. A partir de ahí comienzan a prepararse nuevos proyectos para la gran pantalla, el primero de ellos es “Atraco a las 3... y media”.
- © Redacción-NOTICINE.com

Leonardo Sbaraglia en comedia ácida sobre la sociedad actual
11-XI-05
Comenzó a rodarse en localizaciones de Madrid la película "Concursante", ópera prima de Rodrigo Cortés, que protagoniza el argentino afincado en España, Leonardo Sbaraglia, y se adelanta como una comedia ácida sobre la sociedad, a través de algo tan actual como los concursos de televisión.
Sbaraglia da vida a Martín Circo, un hombre corriente que inesperadamente se convierte en el afortunado ganador del mayor concurso de la historia de la televisión, “El gran catalogo”, valorado en 500 millones de las antiguas pesetas. Este golpe de suerte da un vuelco a su vida, convirtiendo su existencia en una autentica pesadilla al darse cuenta de que los premios que ha ganado generan muchos gastos: un hangar para la avioneta, tres plazas de parking para los coches, un atraque para el barco, etc… Además tiene que pagar a hacienda más de la mitad de lo que ha ganado.
En su búsqueda para encontrar una solución al problema de haber incrementado repentinamente su patrimonio, se encuentra con una serie de personajes estrafalarios como Pizarro, su enloquecido asesor; Edmundo, un excéntrico catedrático de economía; y SANTILLANA, la amargada directora de la facultad de economía donde trabaja Martín como profesor de historia de la economía. Además, sus discusiones con su novia Laura se hacen insoportables. Lo que Martín necesita en este momento es apoyo incondicional, y Laura se empeña en gastar al mismo ritmo frenético al que él intenta vender los premios. Martín hará todo lo posible para liberarse de la trampa que está a punto de dejarle sin nada; sin casa, sin trabajo, sin novia, pero está decidido a llevar la lucha hasta el final……al fin y al cabo, el verdadero concurso acaba de empezar.
Esta comedia ácida representa todo un cambio de registro para Sbaraglia, quien generalmente se ha movido en el terreno de los dramas o los thrillers. Junto al argentino aparecerán Myriam Gallego, Chete Lera, Luis Zahera, Myriam de Maeztu y Fernando Cayo, dando vida a los personajes estrafalarios con los que Martín se encuentra en su desesperada búsqueda de una solución a su inesperado golpe de suerte.
La cinta, que también se rodará en parte en Galicia, cuenta con un presupuesto de 2,4 millones de euros y presentará un ritmo trepidante con 160 secuencias en una hora y media, que se apoyan en una estructura argumental distinta a lo habitual, y sobretodo, una estética innovadora, que ya utilizaba su director su premiado cortometraje "15 Días".
Comenzó a rodarse en localizaciones de Madrid la película "Concursante", ópera prima de Rodrigo Cortés, que protagoniza el argentino afincado en España, Leonardo Sbaraglia, y se adelanta como una comedia ácida sobre la sociedad, a través de algo tan actual como los concursos de televisión.
Sbaraglia da vida a Martín Circo, un hombre corriente que inesperadamente se convierte en el afortunado ganador del mayor concurso de la historia de la televisión, “El gran catalogo”, valorado en 500 millones de las antiguas pesetas. Este golpe de suerte da un vuelco a su vida, convirtiendo su existencia en una autentica pesadilla al darse cuenta de que los premios que ha ganado generan muchos gastos: un hangar para la avioneta, tres plazas de parking para los coches, un atraque para el barco, etc… Además tiene que pagar a hacienda más de la mitad de lo que ha ganado.
En su búsqueda para encontrar una solución al problema de haber incrementado repentinamente su patrimonio, se encuentra con una serie de personajes estrafalarios como Pizarro, su enloquecido asesor; Edmundo, un excéntrico catedrático de economía; y SANTILLANA, la amargada directora de la facultad de economía donde trabaja Martín como profesor de historia de la economía. Además, sus discusiones con su novia Laura se hacen insoportables. Lo que Martín necesita en este momento es apoyo incondicional, y Laura se empeña en gastar al mismo ritmo frenético al que él intenta vender los premios. Martín hará todo lo posible para liberarse de la trampa que está a punto de dejarle sin nada; sin casa, sin trabajo, sin novia, pero está decidido a llevar la lucha hasta el final……al fin y al cabo, el verdadero concurso acaba de empezar.
Esta comedia ácida representa todo un cambio de registro para Sbaraglia, quien generalmente se ha movido en el terreno de los dramas o los thrillers. Junto al argentino aparecerán Myriam Gallego, Chete Lera, Luis Zahera, Myriam de Maeztu y Fernando Cayo, dando vida a los personajes estrafalarios con los que Martín se encuentra en su desesperada búsqueda de una solución a su inesperado golpe de suerte.
La cinta, que también se rodará en parte en Galicia, cuenta con un presupuesto de 2,4 millones de euros y presentará un ritmo trepidante con 160 secuencias en una hora y media, que se apoyan en una estructura argumental distinta a lo habitual, y sobretodo, una estética innovadora, que ya utilizaba su director su premiado cortometraje "15 Días".
- © Redacción-NOTICINE.com

Terror argentino de exportación busca su estreno nacional
11-XI-05
Muchas veces en la Argentina algo debe ser alabado en el exterior para que comience a ser reconocido a nivel local. Ese es el proceso por el cual está atravesando por estos días "Habitaciones para turistas", una clásica cinta de terror acerca de un grupo de chicas de la ciudad, que deben pasar la noche en un pueblo, donde sucederán trágicos acontecimientos. Esta es la opera prima del joven realizador platense Adrián García Bogliano -de 25 años-, que acaba de estrenarse comercialmente en Estados Unidos, donde recibió elogiosos comentarios de medios tan relevantes como el New York Times y el New York Post, logrando además un importante contrato de distribución que le asegura un lanzamiento mundial en video. Mientras en el exterior causa sensación, en su país García Bogliano y el productor Hernán Moyano deben seguir luchando por ver su cinta en las pantallas nacionales, pero lejos de desanimarse ante tal situación, continúan generando proyectos por medio de la autogestión.
- ¿Cómo desarrollaron "Habitaciones para turistas"?
García Bogliano: "Habitaciones..." la hicimos un grupo de cinco chicos de La Plata, que somos Mondo Trasho, que fue el núcleo principal y después Hernán y yo con otro grupo hicimos una productora que es más como una cooperativa, Paura Flics, con la que hicimos nuestra segunda película que es "Grité una noche". En ambos casos fueron películas que financiamos con dinero propio, para "Habitaciones..." recaudamos dinero organizando fiestas, Sony nos prestó la cámara, tuvimos el apoyo de la Municipalidad de Carlos Casares, que fue donde filmamos buena parte de la película. Todo hecho a pulmón, aportes muy chiquitos que fuimos juntando para hacer la película, que nos terminó costando 10 mil pesos (3.000 dólares).
- ¿Por qué no pidieron un subsidio al Instituto Nacional de Cinematografía y Artes Audiovisuales (INCAA)?
García Bogliano: Era un poco complicado en un principio, por el hecho de que ninguno de nosotros tenía un curriculum para ir a pedir un crédito. La verdad es que los caminos incluso se han ido cerrando con el paso del tiempo en el Instituto, en cuanto a las vías para ingresar un proyecto, el tema de la precalificación, toda una serie de impedimentos que han ido apareciendo con el correr de los años, que la verdad que le fueron bastante en contra al cine independiente y nosotros no somos la excepción.
- ¿Cuáles son ahora los pasos a seguir para estrenarla en la Argentina?
Moyano: Estamos viendo como hacer. Hay formas de ingeniárselas para estrenar sin haber pasado por el INCAA, sobre todo por la cantidad de gente que está haciendo películas independientes. El año pasado, por ejemplo, había hasta cierto punto del año 46 películas estrenadas por el Instituto y por afuera, así como la nuestra, había más del doble en video. Nuestra idea es ver si se puede romper ese molde, marcar un antecedente y a partir de eso se pueda abrir algún tipo de concurso o alguna veta que otorgue para que estas películas lleguen a un estreno más masivo. La verdad nos da un poco de lástima que quizá tenga que pasar esto para que se estrene acá: que una productora de afuera la compre y la estrene, y los sindicatos y el Instituto no tengan derechos sobre la película, y nosotros estaríamos posibilitados de que se estrene e inclusive hasta ganar un peso después de tanto trabajo. Pero es casi como que dejara de ser argentina.
- La película tuvo su estreno comercial en Nueva York, ¿Es factible que se vea en otras ciudades o países?
Moyano: Ahora está participando del AFI (American Film Market), donde la están representado, por un lado, Condor Media por lo que es Norteamérica y, por otro lado, la empresa europea Oso, que es la que vendió a todo el mundo "House of the Dead". Tenemos que esperar confirmación de la cadena de cines Landmark, que es la misma que estrenó "The Blair Witch Project" en Norteamérica. Es una cadena que tiene como 150 cines en todo Estados Unidos, que le podría dar un estreno comercial en otros lugares además de Nueva York.
- ¿Por qué creen que acá en la Argentina los exhibidores o distribuidores no parecen interesarse por cintas de este estilo, cuando su película el año pasado ganó el premio del público en Buenos Aires Rojo Sangre y en la última edición lo volvió a hacer otra película nacional, lo cual demuestra que a la gente le atraen este tipo de propuestas?
Moyano: Sí, me parece una falta de visión comercial. Acá en Argentina "Habitaciones..." tuvo una sola proyección en ese Buenos Aires Rojo Sangre, que se llenó. Hay un público ávido de ver este tipo de cine. Creemos que puede pasar algo como lo que pasó en España, que a partir de "Acción mutante" o "El día de la bestia" empezaron a producirse películas de género. Es muy raro lo de los exhibidores y distribuidores de acá porque fijate que en Estados Unidos pasó todo lo contrario, la vieron, las empresas se interesaron y la progrmaron, incluso hay una productora, Kruger Films -que es la de "La llave maestra"-, que tiene una oferta para que vayamos a dirigir una película. Y acá no se consideró. Ahora podemos acceder a que la vean los distribuidores o los dueños de las salas de cine, pero hasta ese momento que allá se habló bien, no se podía dar.
- Mientras su primera película busca su estreno, ya han presentado una segunda película, "Grité una noche", ¿Qué diferencias básicas hay entre estos dos films?
García Bogliano: "Habitaciones..." fue un proyecto más ambicioso, nos costó cuatro años hacerlo, muchísimos recursos que tuvimos que poner en juego, muchísimas complicaciones que tuvimos, tenía muchas locaciones, escenarios diferentes en los que transcurría y un despliegue muy grande, y mucha inexperiencia que teníamos nosotros. Ahí fue que de alguna manera, como una especie de exorcismo, decidimos hacer una segunda película que fuera mucho más liberada de ciertas estructuras, por eso hicimos "Grité una noche", que es una película hecha en base a improvisaciones con una idea argumental sobre la cual articulamos un montón de improvisaciones con un reparto muy gran y también ambiciosa en un montón de sentidos, pero mucho más libre en la forma de hacerla. Se relaciona con el cine independiente de Harmony Korine y Larry Clark, que intentamos combinarlo con el cine de terror, italiano particularmente, que es el que nos interesa.
- Tengo entendido que "Grité una noche" tiene una segunda parte...
García Bogliano: Sí, ya la filmamos. Es una cosa bastante peculiar porque es una especie de secuela, sigue la historia de tres personajes de "Grité una noche", se llama "Caja de acertijos", está planteada directamente para DVD y es una película interactiva, que es algo que no tenemos referencia de que se haya hecho en el género de terror. Esto quiere decir que uno tiene la oportunidad desde un primer momento de elegir con cual de estas historias arranca y se va desarrollando de acuerdo a como uno vaya eligiendo las alternativas.
- Al estilo de "Elige tu propia aventura"...
García Bogliano: Sí, es "Elige tu propia aventura" pero en película, tal cual. Esa es la idea...y jugar con las cosas clásicas del cine de terror, el que siempre el público cree saber mejor lo que tiene que hacer el personaje que el propio personaje. Entonces va a tener la oportunidad de elegir una puerta u otra, un arma u otra...ese tipo de cosas.
Muchas veces en la Argentina algo debe ser alabado en el exterior para que comience a ser reconocido a nivel local. Ese es el proceso por el cual está atravesando por estos días "Habitaciones para turistas", una clásica cinta de terror acerca de un grupo de chicas de la ciudad, que deben pasar la noche en un pueblo, donde sucederán trágicos acontecimientos. Esta es la opera prima del joven realizador platense Adrián García Bogliano -de 25 años-, que acaba de estrenarse comercialmente en Estados Unidos, donde recibió elogiosos comentarios de medios tan relevantes como el New York Times y el New York Post, logrando además un importante contrato de distribución que le asegura un lanzamiento mundial en video. Mientras en el exterior causa sensación, en su país García Bogliano y el productor Hernán Moyano deben seguir luchando por ver su cinta en las pantallas nacionales, pero lejos de desanimarse ante tal situación, continúan generando proyectos por medio de la autogestión.
- ¿Cómo desarrollaron "Habitaciones para turistas"?
García Bogliano: "Habitaciones..." la hicimos un grupo de cinco chicos de La Plata, que somos Mondo Trasho, que fue el núcleo principal y después Hernán y yo con otro grupo hicimos una productora que es más como una cooperativa, Paura Flics, con la que hicimos nuestra segunda película que es "Grité una noche". En ambos casos fueron películas que financiamos con dinero propio, para "Habitaciones..." recaudamos dinero organizando fiestas, Sony nos prestó la cámara, tuvimos el apoyo de la Municipalidad de Carlos Casares, que fue donde filmamos buena parte de la película. Todo hecho a pulmón, aportes muy chiquitos que fuimos juntando para hacer la película, que nos terminó costando 10 mil pesos (3.000 dólares).
- ¿Por qué no pidieron un subsidio al Instituto Nacional de Cinematografía y Artes Audiovisuales (INCAA)?
García Bogliano: Era un poco complicado en un principio, por el hecho de que ninguno de nosotros tenía un curriculum para ir a pedir un crédito. La verdad es que los caminos incluso se han ido cerrando con el paso del tiempo en el Instituto, en cuanto a las vías para ingresar un proyecto, el tema de la precalificación, toda una serie de impedimentos que han ido apareciendo con el correr de los años, que la verdad que le fueron bastante en contra al cine independiente y nosotros no somos la excepción.
- ¿Cuáles son ahora los pasos a seguir para estrenarla en la Argentina?
Moyano: Estamos viendo como hacer. Hay formas de ingeniárselas para estrenar sin haber pasado por el INCAA, sobre todo por la cantidad de gente que está haciendo películas independientes. El año pasado, por ejemplo, había hasta cierto punto del año 46 películas estrenadas por el Instituto y por afuera, así como la nuestra, había más del doble en video. Nuestra idea es ver si se puede romper ese molde, marcar un antecedente y a partir de eso se pueda abrir algún tipo de concurso o alguna veta que otorgue para que estas películas lleguen a un estreno más masivo. La verdad nos da un poco de lástima que quizá tenga que pasar esto para que se estrene acá: que una productora de afuera la compre y la estrene, y los sindicatos y el Instituto no tengan derechos sobre la película, y nosotros estaríamos posibilitados de que se estrene e inclusive hasta ganar un peso después de tanto trabajo. Pero es casi como que dejara de ser argentina.
- La película tuvo su estreno comercial en Nueva York, ¿Es factible que se vea en otras ciudades o países?
Moyano: Ahora está participando del AFI (American Film Market), donde la están representado, por un lado, Condor Media por lo que es Norteamérica y, por otro lado, la empresa europea Oso, que es la que vendió a todo el mundo "House of the Dead". Tenemos que esperar confirmación de la cadena de cines Landmark, que es la misma que estrenó "The Blair Witch Project" en Norteamérica. Es una cadena que tiene como 150 cines en todo Estados Unidos, que le podría dar un estreno comercial en otros lugares además de Nueva York.
- ¿Por qué creen que acá en la Argentina los exhibidores o distribuidores no parecen interesarse por cintas de este estilo, cuando su película el año pasado ganó el premio del público en Buenos Aires Rojo Sangre y en la última edición lo volvió a hacer otra película nacional, lo cual demuestra que a la gente le atraen este tipo de propuestas?
Moyano: Sí, me parece una falta de visión comercial. Acá en Argentina "Habitaciones..." tuvo una sola proyección en ese Buenos Aires Rojo Sangre, que se llenó. Hay un público ávido de ver este tipo de cine. Creemos que puede pasar algo como lo que pasó en España, que a partir de "Acción mutante" o "El día de la bestia" empezaron a producirse películas de género. Es muy raro lo de los exhibidores y distribuidores de acá porque fijate que en Estados Unidos pasó todo lo contrario, la vieron, las empresas se interesaron y la progrmaron, incluso hay una productora, Kruger Films -que es la de "La llave maestra"-, que tiene una oferta para que vayamos a dirigir una película. Y acá no se consideró. Ahora podemos acceder a que la vean los distribuidores o los dueños de las salas de cine, pero hasta ese momento que allá se habló bien, no se podía dar.
- Mientras su primera película busca su estreno, ya han presentado una segunda película, "Grité una noche", ¿Qué diferencias básicas hay entre estos dos films?
García Bogliano: "Habitaciones..." fue un proyecto más ambicioso, nos costó cuatro años hacerlo, muchísimos recursos que tuvimos que poner en juego, muchísimas complicaciones que tuvimos, tenía muchas locaciones, escenarios diferentes en los que transcurría y un despliegue muy grande, y mucha inexperiencia que teníamos nosotros. Ahí fue que de alguna manera, como una especie de exorcismo, decidimos hacer una segunda película que fuera mucho más liberada de ciertas estructuras, por eso hicimos "Grité una noche", que es una película hecha en base a improvisaciones con una idea argumental sobre la cual articulamos un montón de improvisaciones con un reparto muy gran y también ambiciosa en un montón de sentidos, pero mucho más libre en la forma de hacerla. Se relaciona con el cine independiente de Harmony Korine y Larry Clark, que intentamos combinarlo con el cine de terror, italiano particularmente, que es el que nos interesa.
- Tengo entendido que "Grité una noche" tiene una segunda parte...
García Bogliano: Sí, ya la filmamos. Es una cosa bastante peculiar porque es una especie de secuela, sigue la historia de tres personajes de "Grité una noche", se llama "Caja de acertijos", está planteada directamente para DVD y es una película interactiva, que es algo que no tenemos referencia de que se haya hecho en el género de terror. Esto quiere decir que uno tiene la oportunidad desde un primer momento de elegir con cual de estas historias arranca y se va desarrollando de acuerdo a como uno vaya eligiendo las alternativas.
- Al estilo de "Elige tu propia aventura"...
García Bogliano: Sí, es "Elige tu propia aventura" pero en película, tal cual. Esa es la idea...y jugar con las cosas clásicas del cine de terror, el que siempre el público cree saber mejor lo que tiene que hacer el personaje que el propio personaje. Entonces va a tener la oportunidad de elegir una puerta u otra, un arma u otra...ese tipo de cosas.
- © Cynthia M. García (Argentina)-NOTICINE.com