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- Este miércoles, Alex de la Iglesia ha dado el claquetazo final a "Balada triste de trompeta", tras nueve semanas de rodaje en Madrid, Alicante y los Estudios Ciudad de La Luz, en esta misma provincia. Carlos Areces, Antonio de la Torre y Carolina Bang, conforman el mortal triángulo protagonista, dos payasos y una bailarina. A su lado, algunos lujosos actores de reparto: Santiago Segura, Sancho Gracia, Manuel Tallafé, Fernando Guillén Cuervo, Luis Varela, Terele Pávez, Fran Perea, Raul Arévalo, Fofito...

No todas son mentes cerradas y con prejuicios en Hollywood. En tiempos en los que los dibujos animados tienen rasgos físicos inequívocos de los actores que les prestan su voz, en Dreamworks se atrevieron a dar a una actriz latina, bajita, de pelo oscuro, el papel sonoro de una nórdica rubia vikinga. Pocas semanas después de verla -de cuerpo presente- en la no muy exitosa comedia interracial "Our family wedding", América Ferrera, próxima a despedirse de su emblemático personaje de "Ugly Betty", regresa a los cines norteamericanos como Astrid, la heroína de "Cómo entrenar a tu dragón".

El guionista y realizador Mateo Gil ya se encuentra en Bolivia para iniciar el mes próximo el rodaje de "Blackthorn", cinta que devolverá al cine la figura del mítico pistolero Butch Cassidy, al que diera vida Paul Newman décadas atrás. La última en unirse al elenco internacional del film, coproducido por España, Bolivia y Taiwan, es la peruana Magaly Solier, protagonista de la candidata al Oscar "La teta asustada", en su tercer papel consecutivo para una producción española.

Aunque pasara muchos años por tierras españolas, Federico Luppi nunca ha dejado de volver a su Argentina natal. Ahora hasta tres nuevos trabajos le devuelven a la actualidad en su país. El próximo 24 de marzo estrena obra de teatro en el Multiteatro de Corrientes, "Por tu parte", en la que comparte escenario con Adrián Navarro, el día 5 arranca al lado de Leo Sbaraglia el rodaje de "Criminal", de Miguel Cohan, y tiene pendiente de estreno "Verano amargo", de Juan Carlos Desanzo, que coprotagonizó junto a Esther Goris.

Por Juan Pablo Russo

El cine argentino muy pocas veces se metió con el tema de las drogas a fondo y sin tapujos. "Heroína" (1972), de Raúl de la Torre, con Graciela Borges o el policial "Maldita cocaína" (Pablo Rodríguez, 2000), con Osvaldo Laport, son sólo casos aislados y bastantes fallidos de cómo algunos autores se atrevieron con una mirada distante y bastante externa. Tuvieron que pasar varios años para que Diego Rafecas (Rodney, 2008) volviera sobre el tema con un tratamiento espinoso e introspectivo que no cae en el lugar común de la moralina acusatoria.