Gira de estrenos para Viggo Mortensen en Latinoamérica
- por © Redacción (Argentina)-NOTICINE.com
Mientras en Argentina se lanza este fin de semana su western "Entre la vida y la muerte" (Appaloosa), que está teniendo una buena acogida en las salas norteamericanas, el polifacético y multicultural actor Viggo Mortensen acaba de presentar en el marco del Festival de Río otra de sus más recientes interpretaciones, "Good", un drama ético situado en la Alemania del Nacional Socialismo que ha dirigido el brasileiro Vicente Amorim.
Con un estelar reparto que incluye a Ed Harris (que además la dirige), Renée Zellweger y Jeremy Irons, "Entre la vida y la muerte" es una prueba que el buen cine del Oeste siempre gusta, aunque no esté tan de moda como hace medio siglo. La trama es bastante convencional: dos hombres duros (Harris y Mortensen) que son contratados para poner freno a los abusivos desmanes de un poderoso ganadero (Irons) sobre el pueblo minero de Appaloosa, y en su camino se cruza una viuda (Zellweger), muy adelantada para su época.
"Está tan bien escrito... y eso que es un western. La mayoría de los western no lo están, son terribles", ha dicho el protagonista de "El señor de los anillos", que acudía a promocionar en Buenos Aires la cinta después de presentar "Good" en el certamen carioca.
Mortensen oyó hablar del proyecto de primera mano, cuando rodaba con Harris "Una historia de violencia". Le pasó su compañero de reparto el libro original, escrito por de Robert B. Parker, y le dijo que quería llevarlo al cine y contaba con él como intérprete. Los personajes que ambos incorporan, Cole (Harris) y Hitch (Mortensen) son un modelo de compenetración y fidelidad: "Esta es mi propia definición de lo que es un amigo: alguien lo bastante honesto para decirte la verdad, incluso cuando no es lo que quieres oír", ha dicho el popular Aragorn de la saga anular.
En Río, Viggo -que se crió en Argentina y Venezuela y domina perfectamente el español- mostró "Good", un film británico-germano en el que da vida a un personaje bien diferente al de un pistolero: el profesor Halder, un "buen hombre" que se ve arrastrado y seducido por el emergente nazismo en Alemania, hasta el punto que convertirse en uniformado de las ideas de Hitler.
"Halder es un hombre regular, un hombre bueno, que al final por todas las elecciones que hace se convierte en un nazi, con uniforme y todo, explicó sobre el personaje que se aleja de los suyos para sucumbir a los lujos y la ostentación que los nazis le ofrecían", ha dicho Mortensen, para quien en su personaje hay cierta inocencia al principio, "pero llega un punto en el que él puede decir que esto no está bien y no lo hace así, a lo mejor por orgullo o por ego, como hacemos a veces".
El descendiente de daneses, que cree que los dilemas morales planteados en la película no son propios de esa época sino universales en el tiempo y el espacio, conoció al realizador Vicente Amorim ("El camino de las nubes") hace tres años en un bar brasileiro de Los Angeles, y de una larga charla surgió primero una amistad y ahora esta colaboración cinematográfica.
Viggo Mortensen, incansable desde que se consagró primero con "El señor de los anillos" y luego con las más contemporáneas "Una historia de violencia" y "Promesas del Este", acaba de finalizar la post-apocalíptica "The Road", junto a Charlize Theron y Robert Duvall.
Con un estelar reparto que incluye a Ed Harris (que además la dirige), Renée Zellweger y Jeremy Irons, "Entre la vida y la muerte" es una prueba que el buen cine del Oeste siempre gusta, aunque no esté tan de moda como hace medio siglo. La trama es bastante convencional: dos hombres duros (Harris y Mortensen) que son contratados para poner freno a los abusivos desmanes de un poderoso ganadero (Irons) sobre el pueblo minero de Appaloosa, y en su camino se cruza una viuda (Zellweger), muy adelantada para su época.
"Está tan bien escrito... y eso que es un western. La mayoría de los western no lo están, son terribles", ha dicho el protagonista de "El señor de los anillos", que acudía a promocionar en Buenos Aires la cinta después de presentar "Good" en el certamen carioca.
Mortensen oyó hablar del proyecto de primera mano, cuando rodaba con Harris "Una historia de violencia". Le pasó su compañero de reparto el libro original, escrito por de Robert B. Parker, y le dijo que quería llevarlo al cine y contaba con él como intérprete. Los personajes que ambos incorporan, Cole (Harris) y Hitch (Mortensen) son un modelo de compenetración y fidelidad: "Esta es mi propia definición de lo que es un amigo: alguien lo bastante honesto para decirte la verdad, incluso cuando no es lo que quieres oír", ha dicho el popular Aragorn de la saga anular.
En Río, Viggo -que se crió en Argentina y Venezuela y domina perfectamente el español- mostró "Good", un film británico-germano en el que da vida a un personaje bien diferente al de un pistolero: el profesor Halder, un "buen hombre" que se ve arrastrado y seducido por el emergente nazismo en Alemania, hasta el punto que convertirse en uniformado de las ideas de Hitler.
"Halder es un hombre regular, un hombre bueno, que al final por todas las elecciones que hace se convierte en un nazi, con uniforme y todo, explicó sobre el personaje que se aleja de los suyos para sucumbir a los lujos y la ostentación que los nazis le ofrecían", ha dicho Mortensen, para quien en su personaje hay cierta inocencia al principio, "pero llega un punto en el que él puede decir que esto no está bien y no lo hace así, a lo mejor por orgullo o por ego, como hacemos a veces".
El descendiente de daneses, que cree que los dilemas morales planteados en la película no son propios de esa época sino universales en el tiempo y el espacio, conoció al realizador Vicente Amorim ("El camino de las nubes") hace tres años en un bar brasileiro de Los Angeles, y de una larga charla surgió primero una amistad y ahora esta colaboración cinematográfica.
Viggo Mortensen, incansable desde que se consagró primero con "El señor de los anillos" y luego con las más contemporáneas "Una historia de violencia" y "Promesas del Este", acaba de finalizar la post-apocalíptica "The Road", junto a Charlize Theron y Robert Duvall.