Dos (de) mujeres, dos decepciones en la recta final de México en Cuba
- por © Frank Padrón (Cuba)-NOTICINE.com
La recta final de la Muestra de cine mexicano contemporáneo en la Habana no fue para batir muchas palmas. Por ejemplo, se esperaba pero no entusiasmó "El brassier de Emma", de Marisa Sistach (tan bien recordada aquí por su ópera prima "Perfume de violetas") la cual no repitió el impacto de aquella credencial. La realizadora, de nuevo apoyada en el guión por su marido José Buil, insiste en el complejo universo de la adolescente; esta vez, desde su título (brassier es ajustador/sujetador) anuncia que el interés de la trama se centra en el crecimiento de los pechos femeninos, indicador de cambios que despiden la niñez para dar entrada el universo adulto.
Ello tiene coincidencias en ese propio entorno de la protagonista, como quiera que el padre, entre sus artefactos inútiles, fabrica… pomadas para el endurecimiento de los senos, y la madre se ve amenazada por un quiste en uno de ellos.
Pero la cinta, con momentos conseguidos y sobre todo, notabilísimas actuaciones (entre ellas Arcelia Ramírez, quien repite con la directora) resulta, en el orden de las ideas, mucho más complaciente y menos inquietante que la anterior, sobre todo porque carece de su fuerza narrativa y enganche dramático.
Más ambiciosa y quizá por ello, menos conseguida, resultó la cinta con la cual cerró la Muestra: "Cosas insignificantes", de otra dama (Andrea Martínez Crowter),debutante y discípula no muy aventajada, al menos en esta experiencia, de su coterráneo Fernando Sariñana ("Todo el poder", "Ciudades oscuras"…); como él, gusta de un sujeto coral y de ofrecer anticipaciones temporales en la fase anunciativa, que en una posterior (expositiva) repite ahora ofreciendo las causas de tales efectos; sólo que a la cineasta le falta el amarre y la precisión narrativa de su colega: en su film tales engarces y enlaces se sienten un tanto forzados y hasta gratuitos, a pesar de lo cual un grupo de sensibles desempeños (el español Carmelo Gómez, Fernando Luján ,Bárbara Mori, Lucía Jiménez…) una efectiva banda sonora y varios personajes sólidamente construidos hacen tolerable el trayecto y nos permiten imaginar que para las próximas, a la bisoña cineasta le irá mejor.
Antes vimos el corto "Lección relámpago", de Alejandro Lubezki, que en solo 9 minutos discursa con ironía y lucidez acerca de lo snob y epatante en el arte pictórico contemporáneo, y ofrece otro magisterio: el de Jiménez Cacho, de nuevo demostrando cuán grande actor es.
Por lo que se aprecia, la muestra no fue del todo homogénea en cuanto a calidad, mas siempre valen estos acercamientos, que nos permiten tomarle el pulso a una cinematografía que, pese a todos los devaneos de las crisis y otros males, siempre se las arregla para reinventarse.
Ello tiene coincidencias en ese propio entorno de la protagonista, como quiera que el padre, entre sus artefactos inútiles, fabrica… pomadas para el endurecimiento de los senos, y la madre se ve amenazada por un quiste en uno de ellos.
Pero la cinta, con momentos conseguidos y sobre todo, notabilísimas actuaciones (entre ellas Arcelia Ramírez, quien repite con la directora) resulta, en el orden de las ideas, mucho más complaciente y menos inquietante que la anterior, sobre todo porque carece de su fuerza narrativa y enganche dramático.
Más ambiciosa y quizá por ello, menos conseguida, resultó la cinta con la cual cerró la Muestra: "Cosas insignificantes", de otra dama (Andrea Martínez Crowter),debutante y discípula no muy aventajada, al menos en esta experiencia, de su coterráneo Fernando Sariñana ("Todo el poder", "Ciudades oscuras"…); como él, gusta de un sujeto coral y de ofrecer anticipaciones temporales en la fase anunciativa, que en una posterior (expositiva) repite ahora ofreciendo las causas de tales efectos; sólo que a la cineasta le falta el amarre y la precisión narrativa de su colega: en su film tales engarces y enlaces se sienten un tanto forzados y hasta gratuitos, a pesar de lo cual un grupo de sensibles desempeños (el español Carmelo Gómez, Fernando Luján ,Bárbara Mori, Lucía Jiménez…) una efectiva banda sonora y varios personajes sólidamente construidos hacen tolerable el trayecto y nos permiten imaginar que para las próximas, a la bisoña cineasta le irá mejor.
Antes vimos el corto "Lección relámpago", de Alejandro Lubezki, que en solo 9 minutos discursa con ironía y lucidez acerca de lo snob y epatante en el arte pictórico contemporáneo, y ofrece otro magisterio: el de Jiménez Cacho, de nuevo demostrando cuán grande actor es.
Por lo que se aprecia, la muestra no fue del todo homogénea en cuanto a calidad, mas siempre valen estos acercamientos, que nos permiten tomarle el pulso a una cinematografía que, pese a todos los devaneos de las crisis y otros males, siempre se las arregla para reinventarse.