Ezequiel Acuña estrena "Excursiones", su cura a la depresión
- por © Redacción (Argentina)-NOTICINE.com
El argentino Ezequiel Acuña lanza esta semana en Rosario, Córdoba y el MALBA de Buenos Aires su tercer largo, "Excursiones", film en gran medida autobiográfico (de él y de sus actores-coguionistas), en el que narra una relación profesional entre amigos. Se trata también del reencuentro de dos personajes, Martín y Marcos (Alberto Rojas Apel y Matías Castelli), surgidos de un corto que Acuña rodó hace una década. Entonces escribían juntos una obra de teatro, y en esta especie de secuela, los encontramos uno como guionista en crisis y otro como empleado de una empresa alimenticia, intentando colaborar en un proyecto del primero.
Esta comedia le sirve a Acuña para exorcizar una depresión por el fracaso de su segundo film, "Como un avión estrellado". "Se me había agotado un poco la temática adolescente. Uno va creciendo y se aleja de las cosas que le interesaban retratar. Medio que me alejé del cine", explica en declaraciones a Clarín.
Para "Excursiones", el director argentino de "Nadar solo" provocó que sus actores -amigos a su vez- participaran de lleno en la creación del guión. "Un dia les dije "Tengo esta idea, probemos". Nos empezamos a cagar de risa y dijimos "Bueno, empecemos a laburar esto". Así evité lo que me había paralizado, que era el trabajo de guión, de bar, de estar en un proyecto mucho tiempo. Fue más dinámico. Tenia esto de la acción, de juntarnos los tres, empezar a improvisar y a laburar situaciones e ir escribiéndolo ahí".
Acuña sigue prefiriendo la imagen filmada al vídeo, y por ello rodó "Excursiones" en 16mm y en blanco y negro, algo que quizás dificulte aún más una distribución amplia. El propio Acuña admite la paradoja de que siendo sus películas accesibles por temática y planteamiento a casi cualquier público, acaben mostrándose en pocas salas y siendo minoritarias. "A mí me sorprendió por ejemplo -explica a Crítica Digital- cuando Marcelo Piñeyro dijo que "Nadar solo" era una película que con otro lanzamiento u otro marketing tendría que haberla visto mucha más gente de la que la vio. Y después me encontré con él y me dijo lo mismo: el problema es siempre el puente con la gente. Aunque es un imponderable, porque "Excursiones" es también una película bastante accesible y bastante corta, pero si alguien dice que haberla filmado en blanco y negro es un problema, qué hacerle. Era lógico hacerla así porque el corto original era en blanco y negro. En realidad no es porque yo quiera hacer cine de autor o algo rebuscado, sino más bien que tenga una impronta de uno, algo que me interese. Así como que reflejar cierto tipo de gente; creo que la gente de treinta es muy reconocible en estas películas. No son gente con un plan a largo plazo, por lo demás".
"Excursiones" fue uno de los títulos nacionales que más y mejor dieron que hablar el pasado año en el Festival de Cine Independiente de Buenos Aires (BAFICI).
Esta comedia le sirve a Acuña para exorcizar una depresión por el fracaso de su segundo film, "Como un avión estrellado". "Se me había agotado un poco la temática adolescente. Uno va creciendo y se aleja de las cosas que le interesaban retratar. Medio que me alejé del cine", explica en declaraciones a Clarín.
Para "Excursiones", el director argentino de "Nadar solo" provocó que sus actores -amigos a su vez- participaran de lleno en la creación del guión. "Un dia les dije "Tengo esta idea, probemos". Nos empezamos a cagar de risa y dijimos "Bueno, empecemos a laburar esto". Así evité lo que me había paralizado, que era el trabajo de guión, de bar, de estar en un proyecto mucho tiempo. Fue más dinámico. Tenia esto de la acción, de juntarnos los tres, empezar a improvisar y a laburar situaciones e ir escribiéndolo ahí".
Acuña sigue prefiriendo la imagen filmada al vídeo, y por ello rodó "Excursiones" en 16mm y en blanco y negro, algo que quizás dificulte aún más una distribución amplia. El propio Acuña admite la paradoja de que siendo sus películas accesibles por temática y planteamiento a casi cualquier público, acaben mostrándose en pocas salas y siendo minoritarias. "A mí me sorprendió por ejemplo -explica a Crítica Digital- cuando Marcelo Piñeyro dijo que "Nadar solo" era una película que con otro lanzamiento u otro marketing tendría que haberla visto mucha más gente de la que la vio. Y después me encontré con él y me dijo lo mismo: el problema es siempre el puente con la gente. Aunque es un imponderable, porque "Excursiones" es también una película bastante accesible y bastante corta, pero si alguien dice que haberla filmado en blanco y negro es un problema, qué hacerle. Era lógico hacerla así porque el corto original era en blanco y negro. En realidad no es porque yo quiera hacer cine de autor o algo rebuscado, sino más bien que tenga una impronta de uno, algo que me interese. Así como que reflejar cierto tipo de gente; creo que la gente de treinta es muy reconocible en estas películas. No son gente con un plan a largo plazo, por lo demás".
"Excursiones" fue uno de los títulos nacionales que más y mejor dieron que hablar el pasado año en el Festival de Cine Independiente de Buenos Aires (BAFICI).