Con "Milk" el habanero Cine Club Diferente celebra su segundo aniversario

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Penn es Milk
Penn es Milk
Por Frank Padrón *

La próxima edición del Cine club sobre Diversidad Sexual (un proyecto CENESEX-ICAIC) reviste características especiales, no sólo porque con ella arribamos al segundo año de provechoso intercambio y sostenida labor educativa con amplias y disímiles capas poblacionales, sino porque la misma se enmarca en unos días donde tales características se arrecian: la Jornada por el "Día Internacional contra la Homofobia" (17 de mayo).                                                                                                     

Sólo 24 horas después, a las 8:00 p.m se proyectará, y después debatirá, en la que ha sido su generalmente abarrotada sala durante casi todo este tiempo (23 y 12) a las 8:00 p.m, el polémico film norteamericano "Milk" (2008), de Gus Van Sant, en torno a la vida y obra de Harvey Milk, primer homosexual elegido para ocupar un cargo político en Estados Unidos, en 1977.                                                                                                                        

El film, protagonizado por Sean Penn (Oscar al mejor actor) no es el primero en focalizar la vida del controvertido personaje. En 1984 Robert Epstein rodó el documental "The times of Harvey Milk", también ganador de una estatuilla de la Academia, y del cual Van Sant tomó fragmentos para su propia obra.                               

Director de controvertidas cintas como "Mi mundo privado / Mi Idaho privado" ("My Own Private Idaho", 1991), "Elephant" (2003) y "Paranoid Park" (2007), el estadounidense Gus Van Sant se ha hecho famoso como director independiente, a quien podemos considerar todo un autor, aunque incursionando en ocasiones en un cine más comercial, donde pudiéramos ubicar títulos como "El indomable Will Hunting / Mente indomable" ("Good Will Hunting" ,1997) y la propia y reciente "Milk".                               

De veras no quisiera, en aras de la riqueza que sin lugar a dudas generará el debate de este film, prejuiciarlos con mis consideraciones personales acerca de los resultados estéticos de esta "biopic" en torno a una figura que, sobre todo por su asumida y pública orientación sexual vivió en auténtica "capilla ardiente" durante su intensa y controvertida gestión pública y su no menos cuestionada existencia íntima.                        

Sólo apuntar lo polémico que ha resultado desde su estreno, en todos las plazas donde se ha exhibido, este acercamiento, eso sí, serio y profesional, al político que también fue, como es lógico, un ser humano con vida privada, con secretos y contradicciones que no deja de abordar la cámara siempre inquieta y aguda de Van Sant.                           

Para que se tenga idea de las reacciones que ha generado en la crítica "Milk", quisiera, eso sí, insertar un par de segmentos de sendas reseñas: El colombiano Alberto Duque, en NOTICINE.com apunta:
"Al espectador que no conozca bien la historia real del personaje y las circunstancias tormentosas que lo motivaron, le queda una película sobria y contenida, contada de manera fracturada alrededor de la confesión que el protagonista graba en la soledad de una cocina mientras el enemigo lo acecha para destruirlo, además de abundante material de noticieros".          

Soledad Pardo, en su blog personal, aunque  considera que "merece resaltarse el abordaje que el film hace de la figura del "gay" y del de la homosexualidad como tema. (porque) la  representación de esta suele ser problemática en el cine (…) señala que "a pesar de la interesante construcción del personaje, el film no deja de caer en ciertas moralejas y/o enseñanzas para el espectador que pueden resultar un tanto molestas. El triunfo de Milk en base a su esfuerzo constante parecería tener un cierto aire de mensaje didáctico: algo así como que quien dedica su vida a trabajar duro por una causa justa  logra su objetivo. De hecho, la palabra hope (esperanza)  aparece una y otra vez a lo largo del film, casi a modo de leit motiv, agotando un poco al espectador, quien entiende que lo que el político pretende es cambiar la indignante situación de la  comunidad "gay" norteamericana, pero realmente no necesita que se lo expliquen tanto".

Todo el mundo, sin embargo, parece coincidir en los elogios a la interpretación de Sean Penn como ese hombre contradictorio, testarudo y a la vez auténtico y audaz que dio un inescamoteable empujón a las conquistas civiles de la comunidad GTLB en Estados Unidos y en todo el mundo.

En fin, esos y otros puntos debatibles y polémicos serán objeto de análisis en nuestro próximo Cine club.