Max Lemcke escribe sobre "Cinco metros cuadrados"
- por © Redacción-NOTICINE.com
Por Max Lemcke *
"Cinco metros cuadrados" es la medida de un deseo. Lo que mide una terraza. Una pequeña terraza de un piso a las afueras de una gran ciudad. "Cinco metros cuadrados" es una fábula de los tiempos del "boom" inmobiliario, un relato moderno con sus héroes y sus villanos. Personajes contemporáneos y anónimos que tratan de dar alcance a aquello que desean. Unos comprar. Otros vender. Algunos construir.
Desde los años cincuenta nuestro cine más realista ha contado la dificultad del ciudadano medio por llegar a tener una vivienda digna. Hay grandes ejemplos... El Inquilino, El Verdugo, El Pisito. Enormes películas que hablaban de esa enquistada lacra que sacude nuestra sociedad...encontrar un lugar donde vivir para comenzar una nueva vida. Ya entonces otras parejas...Evaristo y Marta, José Luis y Carmen o Petrita y Rodolfo, sufrieron distintas peripecias, algunas llenas de humor negro e ironía, para conseguir sus objetivos.
¿Qué es lo que necesitas para ser feliz?
La pareja protagonista de "Cinco metros cuadrados" se decide. Compran. Quieren un futuro, un futuro juntos. Nada especial. Como he dicho antes son seres anónimos, gente trabajadora y honesta, buena gente. Quieren una casa para empezar una nueva vida, para tener, por qué no, una familia. Como la que tuvieron antes sus padres. Nada especial. Un hogar.
Ese lugar, esta idealización construida en ladrillo, está en peligro. Nuestra historia cuenta la lucha de Alex y de Virginia por recuperar su casa, y como se enfrentan ambos a ese momento de desesperación al ver truncados sus sueños.
Nuestra película no quiere ser condescendiente con nadie, ni desdeñosa con los culpables de esta crisis total. Sólo es una mirada a un momento que nos ha tocado vivir, y es una mirada limpia y con humor hacía los seres que la habitan, a los que no se juzga por las cosas que hacen o no hacen.
Aunque esta película no esté basada en hechos reales, todos sabemos que han sucedido a nuestro alrededor.
Intento creer que nuestro héroe anónimo, este ciudadano que nos representa a todos, humillando al poderoso, hace posible una especie de redención colectiva que nos libera finalmente a todos. Aunque a cambio de un alto precio.
Con el tiempo, he comprendido lo difícil que es hablar de una película, por eso prefiero definir "Cinco metros cuadrados" por lo que no es, no es una película de aventuras, aunque tiene momentos de acción, no es una película romántica, aunque habla de amor, y no es una comedia, aunque tiene muchas dosis de humor.
(*): Ganador del último Festival de Málaga, "Cinco metros cuadrados" es el tercer largometraje del madrileño Max Lemcke, tras "Mundo fantástico" y "Casual day". Protagonizado por la popular pareja televisivo-cinematográfica Fernando Tejero-Malena Alterio, llega este viernes a los cines españoles.
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"Cinco metros cuadrados" es la medida de un deseo. Lo que mide una terraza. Una pequeña terraza de un piso a las afueras de una gran ciudad. "Cinco metros cuadrados" es una fábula de los tiempos del "boom" inmobiliario, un relato moderno con sus héroes y sus villanos. Personajes contemporáneos y anónimos que tratan de dar alcance a aquello que desean. Unos comprar. Otros vender. Algunos construir.
Desde los años cincuenta nuestro cine más realista ha contado la dificultad del ciudadano medio por llegar a tener una vivienda digna. Hay grandes ejemplos... El Inquilino, El Verdugo, El Pisito. Enormes películas que hablaban de esa enquistada lacra que sacude nuestra sociedad...encontrar un lugar donde vivir para comenzar una nueva vida. Ya entonces otras parejas...Evaristo y Marta, José Luis y Carmen o Petrita y Rodolfo, sufrieron distintas peripecias, algunas llenas de humor negro e ironía, para conseguir sus objetivos.
¿Qué es lo que necesitas para ser feliz?
La pareja protagonista de "Cinco metros cuadrados" se decide. Compran. Quieren un futuro, un futuro juntos. Nada especial. Como he dicho antes son seres anónimos, gente trabajadora y honesta, buena gente. Quieren una casa para empezar una nueva vida, para tener, por qué no, una familia. Como la que tuvieron antes sus padres. Nada especial. Un hogar.
Ese lugar, esta idealización construida en ladrillo, está en peligro. Nuestra historia cuenta la lucha de Alex y de Virginia por recuperar su casa, y como se enfrentan ambos a ese momento de desesperación al ver truncados sus sueños.
Nuestra película no quiere ser condescendiente con nadie, ni desdeñosa con los culpables de esta crisis total. Sólo es una mirada a un momento que nos ha tocado vivir, y es una mirada limpia y con humor hacía los seres que la habitan, a los que no se juzga por las cosas que hacen o no hacen.
Aunque esta película no esté basada en hechos reales, todos sabemos que han sucedido a nuestro alrededor.
Intento creer que nuestro héroe anónimo, este ciudadano que nos representa a todos, humillando al poderoso, hace posible una especie de redención colectiva que nos libera finalmente a todos. Aunque a cambio de un alto precio.
Con el tiempo, he comprendido lo difícil que es hablar de una película, por eso prefiero definir "Cinco metros cuadrados" por lo que no es, no es una película de aventuras, aunque tiene momentos de acción, no es una película romántica, aunque habla de amor, y no es una comedia, aunque tiene muchas dosis de humor.
(*): Ganador del último Festival de Málaga, "Cinco metros cuadrados" es el tercer largometraje del madrileño Max Lemcke, tras "Mundo fantástico" y "Casual day". Protagonizado por la popular pareja televisivo-cinematográfica Fernando Tejero-Malena Alterio, llega este viernes a los cines españoles.
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