Doble reencuentro de Saura con Banderas y Querejeta, en "biopic" picassiana
- por © Redacción-NOTICINE.com
"Todos vuelven...", cantó Rubén Blades, y si el año pasado Antonio Banderas volvió con Pedro Almodóvar para hacer uno de los mejores papeles de su vida en "La piel que habito", por qué no iba a repetir con otro de los directores españoles que cimentaron su primera fama nacional, Carlos Saura, quien le dirigió en "Los zancos" y "¡Dispara!", en los años 80 y 90, respectivamente. Pero el reencuentro es doble para este último, ya que el cineasta aragonés empezó de la mano del productor Elías Querejeta, y los tres colaborarán en "33 días", una película que reconstruye la autoría del "Guernica" por parte de Pablo Picasso, en plena Guerra Civil española.
Así lo explico el propio actor malagueño, entre cuyos sueños siempre ha estado incorporar al universal pintor, nativo de su misma ciudad andaluza, en entrevista dominical con el diario El País: "Es un personaje que me ha perseguido durante mucho tiempo y siempre lo había rechazado. Me merece mucho respeto porque soy malagueño, porque nací a cuatro cuadras de donde lo hizo él. Siempre me ha fascinado: salvando las distancias, se fue de Málaga un poco más joven que yo, y sentía como yo una morriña brutal por la tierra. Tuve la suerte de conocer hace tiempo a su hija Paloma y me contó que Picasso nunca abandonó su idea de volver a Málaga. También me dijo que le gustaba oírme porque yo hablo el español con el acento cerrado malagueño –que le recordaba a su padre-, de zeta pura. En mis inicios, cuando vine a Madrid, lo escondía por cierto complejo de inferioridad y para que los directores me escucharan en castellano neutro. Ahora no. Es una película especial, porque cuenta los 33 días de creación del "Guernica", en mitad de la Guerra Civil, con un Picasso que el corazón se le va a España… Con sus dudas ante el encargo de un mural, que se le van cuando ve las imágenes del bombardeo de Gernika.
Banderas, que este domingo acudió a los Goya junto a su esposa Melanie Griffith, asegura que ya ha empezado a documentarse para asumir el papel: "He hecho ya mis deberes, he investigado y he leído que él lo pintó con cierta idea de provisionalidad, de algo que no iba a permanecer. Picasso le decía a la gente que le rodeaba: “Cuando acabe la exposición (La Exposición Universal de París en 1937, en cuyo pabellón español -republicano- se expuso por vez primera) haced lo que queráis con él”. Y al mismo tiempo se contradecía: “Esto es un regalo para España, para los dos Españas, para la izquierda y para la derecha”. Para desesperación de su agente, que quería vender la obra y olvidarse de regalos".
Por su parte, Variety añade este lunes que la cinta se filmará en inglés y español el verano próximo, en París y la localidad vizcaína de Gernika, con un presupuesto de 6 millones de euros, aportados por compañías del País Vasco y Canadá. El guión es de el propio Saura, Elías Querejeta y el francés Louis-Charles Sirjacq ("Swing troubadour", "Vive la sociale!").
El mismo medio apunta a que muy probablemente Saura tendrá un tercer colaborador del pasado, ya que el fotógrafo que inmortalizó algunas de sus más conocidas cintas musicales, el ganador del Oscar Vittorio Storaro ("Tango", "Flamenco, flamenco") está negociando su presencia en el equipo.
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Así lo explico el propio actor malagueño, entre cuyos sueños siempre ha estado incorporar al universal pintor, nativo de su misma ciudad andaluza, en entrevista dominical con el diario El País: "Es un personaje que me ha perseguido durante mucho tiempo y siempre lo había rechazado. Me merece mucho respeto porque soy malagueño, porque nací a cuatro cuadras de donde lo hizo él. Siempre me ha fascinado: salvando las distancias, se fue de Málaga un poco más joven que yo, y sentía como yo una morriña brutal por la tierra. Tuve la suerte de conocer hace tiempo a su hija Paloma y me contó que Picasso nunca abandonó su idea de volver a Málaga. También me dijo que le gustaba oírme porque yo hablo el español con el acento cerrado malagueño –que le recordaba a su padre-, de zeta pura. En mis inicios, cuando vine a Madrid, lo escondía por cierto complejo de inferioridad y para que los directores me escucharan en castellano neutro. Ahora no. Es una película especial, porque cuenta los 33 días de creación del "Guernica", en mitad de la Guerra Civil, con un Picasso que el corazón se le va a España… Con sus dudas ante el encargo de un mural, que se le van cuando ve las imágenes del bombardeo de Gernika.
Banderas, que este domingo acudió a los Goya junto a su esposa Melanie Griffith, asegura que ya ha empezado a documentarse para asumir el papel: "He hecho ya mis deberes, he investigado y he leído que él lo pintó con cierta idea de provisionalidad, de algo que no iba a permanecer. Picasso le decía a la gente que le rodeaba: “Cuando acabe la exposición (La Exposición Universal de París en 1937, en cuyo pabellón español -republicano- se expuso por vez primera) haced lo que queráis con él”. Y al mismo tiempo se contradecía: “Esto es un regalo para España, para los dos Españas, para la izquierda y para la derecha”. Para desesperación de su agente, que quería vender la obra y olvidarse de regalos".
Por su parte, Variety añade este lunes que la cinta se filmará en inglés y español el verano próximo, en París y la localidad vizcaína de Gernika, con un presupuesto de 6 millones de euros, aportados por compañías del País Vasco y Canadá. El guión es de el propio Saura, Elías Querejeta y el francés Louis-Charles Sirjacq ("Swing troubadour", "Vive la sociale!").
El mismo medio apunta a que muy probablemente Saura tendrá un tercer colaborador del pasado, ya que el fotógrafo que inmortalizó algunas de sus más conocidas cintas musicales, el ganador del Oscar Vittorio Storaro ("Tango", "Flamenco, flamenco") está negociando su presencia en el equipo.
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