Murió García Ferré, maestro de la animación latinoamericana
- por © Redacción (Argentina)-NOTICINE.com
El llamado "Walt Disney argentino", Manuel García Ferré, creador de inolvidables personajes como Hijitus, Petete o Manuelita, falleció a primeras horas de este jueves en Buenos Aires, tras un fallo cardiorespiratorio cuando era operado, a los 83 años. Español de nacimiento, pero afincado en tierras australes desde los 17 años, triunfó con sus dibujos para historietas, comerciales, televisión y cine, desde los años 50 del pasado siglo.
Cuando hace cuatro años lo nombraron ciudadano ilustre de la capital argentina, recordaba como fue su llegada: "Venía de una ciudad de provincia (la andaluza Almería) y cuando bajé del barco, Buenos Aires me pareció enorme. Me sentía perdido".
Empezó dibujando para la publicidad e historieras en la revista Billiken. Después editó la revista infantil "Anteojito", y ya en los años 60 dio el salto a la televisión, con la serie animada "Hijitus", primera de producción nacional en la Argentina, con una periodicidad diaria, durante siete años, de 1967 a 1974.
"He sido -decía el año pasado- editor y director de cine, pero en el fondo me considero un dibujante. Para mí el arte es uno solo. Cuando veo que Leonardo Da Vinci era dibujante, pintor, arquitecto, pienso que esa multiplicidad era posible porque llevaba consigo el "sentido común". Mi madre siempre me decía 'Dedícate medio día a lo que te gusta y la otra mitad a lo que te pide la sociedad'".
El creador de Anteojito, Hijitus y tantos personajes que forman parte de la cultura popular argentina, realizador de las cintas más reconocidas del género como "Mil intentos y un invento", "Ico, el caballito valiente", "Manuelita", era el pionero, maestro y -hasta hace pocos años- el único exponente del género de la animación en la Argentina.
Su mayor éxito en cine fue "Manuelita" logró más de dos millones de espectadores a finales de los años 90, y fue la primera cinta animada latinoamericana en optar al Oscar. Luego vendrían "Corazón, las alegrías de Pantriste" y la última, mezcla de dibujos animados e imagen real en 3D "Soledad y Larguirucho" (2012), cuyos personajes centrales eran la cantante Soledad Pastorutti y al entrañable Larguirucho
Entonces, en una entrevista con La Gaceta, decía: "Soy un dibujante que se inspira en la realidad a la que trato de no copiar. Trato de tener ilusiones para no envejecer. El ser humano debe tener nuevas metas; eso es lo importante en el diario vivir".
"Hoy -añadía- se le dan al niño diferentes ofertas por televisión e internet; tiene un bombardeo de información y así no es fácil que alcance en el momento adecuado la madurez. Los sentimientos del chico siguen siendo la nobleza, el buen gusto; las virtudes no cambian a través del tiempo. Siempre va a existir la lucha del bien y el mal, Cachavacha contra Hijitus. Hoy en día, el niño tiene más información que el niño de hace 30 años. En mi época no teníamos pelota de fútbol y la armábamos con las manos y la imaginación·.
La familia anunció que sus restos reposarán en el cementerio Jardín de Paz, en los alrededores de la capital, y su recuerdo imborrable este jueves emociona a varias generaciones de argentinos y latinoamericanos.
Cuando hace cuatro años lo nombraron ciudadano ilustre de la capital argentina, recordaba como fue su llegada: "Venía de una ciudad de provincia (la andaluza Almería) y cuando bajé del barco, Buenos Aires me pareció enorme. Me sentía perdido".
Empezó dibujando para la publicidad e historieras en la revista Billiken. Después editó la revista infantil "Anteojito", y ya en los años 60 dio el salto a la televisión, con la serie animada "Hijitus", primera de producción nacional en la Argentina, con una periodicidad diaria, durante siete años, de 1967 a 1974.
"He sido -decía el año pasado- editor y director de cine, pero en el fondo me considero un dibujante. Para mí el arte es uno solo. Cuando veo que Leonardo Da Vinci era dibujante, pintor, arquitecto, pienso que esa multiplicidad era posible porque llevaba consigo el "sentido común". Mi madre siempre me decía 'Dedícate medio día a lo que te gusta y la otra mitad a lo que te pide la sociedad'".
El creador de Anteojito, Hijitus y tantos personajes que forman parte de la cultura popular argentina, realizador de las cintas más reconocidas del género como "Mil intentos y un invento", "Ico, el caballito valiente", "Manuelita", era el pionero, maestro y -hasta hace pocos años- el único exponente del género de la animación en la Argentina.
Su mayor éxito en cine fue "Manuelita" logró más de dos millones de espectadores a finales de los años 90, y fue la primera cinta animada latinoamericana en optar al Oscar. Luego vendrían "Corazón, las alegrías de Pantriste" y la última, mezcla de dibujos animados e imagen real en 3D "Soledad y Larguirucho" (2012), cuyos personajes centrales eran la cantante Soledad Pastorutti y al entrañable Larguirucho
Entonces, en una entrevista con La Gaceta, decía: "Soy un dibujante que se inspira en la realidad a la que trato de no copiar. Trato de tener ilusiones para no envejecer. El ser humano debe tener nuevas metas; eso es lo importante en el diario vivir".
"Hoy -añadía- se le dan al niño diferentes ofertas por televisión e internet; tiene un bombardeo de información y así no es fácil que alcance en el momento adecuado la madurez. Los sentimientos del chico siguen siendo la nobleza, el buen gusto; las virtudes no cambian a través del tiempo. Siempre va a existir la lucha del bien y el mal, Cachavacha contra Hijitus. Hoy en día, el niño tiene más información que el niño de hace 30 años. En mi época no teníamos pelota de fútbol y la armábamos con las manos y la imaginación·.
La familia anunció que sus restos reposarán en el cementerio Jardín de Paz, en los alrededores de la capital, y su recuerdo imborrable este jueves emociona a varias generaciones de argentinos y latinoamericanos.