Ricardo Darín y Julio Chávez: astros del cine argentino con vocación teatral
- por © Redacción (Argentina)-NOTICINE.com
3-III-04
Ricardo Darín, uno de los más internacionales actores argentinos, acaba de terminar las representaciones de su obra "ART" en Barcelona, y muy pronto seguirá la gira en Valencia, siempre por tierras españolas, donde su popularidad es más que notable gracias a películas como "El hijo de la novia" o "Kamchatka". Mientras, en su Buenos Aires natal, su colega Julio Chávez, multipremiado por la cinta "Un oso rojo", estrenará el próximo día 19 la obra "Rancho (una historia aparte)", en el Teatro San Martín, que dirigirá y de la que es coautor.
Deja Darín Barcelona después de un notable éxito y muchos encuentros por la calle con compatriotas: "Cada uno te hace depositario de su situación, triste, nostálgica, optimista, o rayada", cuenta este miércoles en el diario Clarín. "En general hemos recogido mucha frustración, mucho desánimo por las ilusiones truncadas y tenemos noticias de que muchos se están volviendo. Muchos creyeron que por el sólo hecho de salir de Argentina se acaban los problemas; pero no hay un sólo país en el mundo que no sufra alguna crisis. El planeta está en crisis, no sólo la Argentina", sentencia el actor.
Después de terminar su gira española con "ART", el intérprete de "El mismo amor, la misma lluvia" volverá a la Argentina para estrenar su última última colaboración con Juan José Campanella "Luna de Avellaneda", en la que se reencuentra gran parte del equipo de "El hijo de la novia", además de colocarse nuevamente ante la cámara a las órdenes de Fabián Bielinsky, su director en "Nueve reinas".
En cuanto a Chávez, considera que "Rancho", coescrita por él plantea "que el hombrecito articula su mundo de un modo determinado y todo aquello que no pertenece a eso es algo foráneo, extraño, difícil de poder convivir. Porque acá el problema es la convivencia entre miradas diferentes, más allá del campo y la ciudad. Dile a cuatro personas que terminan de ver una película que te la cuenten y que se pongan de acuerdo y vas a ver que es imposible. El problema que tenemos es esa pretensión de estar de acuerdo", dice en una entrevista con Clarín.
El protagonista de "Un oso rojo", "El visitante" y "Extraño", que también se ha expresado durante años en la pintura, no pretende limitarse al cine y al teatro: "Vos podés encontrar una expresión viva en cualquier lugar, teatro de revistas, publicidad. ¿Dónde de pronto aparece un hecho vivo? En cualquier lugar. ¿Y dónde puede aparecer un hecho muerto? En cualquier lugar, desde el Actors Studio hasta lo que se supone es la panacea del arte".
Ricardo Darín, uno de los más internacionales actores argentinos, acaba de terminar las representaciones de su obra "ART" en Barcelona, y muy pronto seguirá la gira en Valencia, siempre por tierras españolas, donde su popularidad es más que notable gracias a películas como "El hijo de la novia" o "Kamchatka". Mientras, en su Buenos Aires natal, su colega Julio Chávez, multipremiado por la cinta "Un oso rojo", estrenará el próximo día 19 la obra "Rancho (una historia aparte)", en el Teatro San Martín, que dirigirá y de la que es coautor.
Deja Darín Barcelona después de un notable éxito y muchos encuentros por la calle con compatriotas: "Cada uno te hace depositario de su situación, triste, nostálgica, optimista, o rayada", cuenta este miércoles en el diario Clarín. "En general hemos recogido mucha frustración, mucho desánimo por las ilusiones truncadas y tenemos noticias de que muchos se están volviendo. Muchos creyeron que por el sólo hecho de salir de Argentina se acaban los problemas; pero no hay un sólo país en el mundo que no sufra alguna crisis. El planeta está en crisis, no sólo la Argentina", sentencia el actor.
Después de terminar su gira española con "ART", el intérprete de "El mismo amor, la misma lluvia" volverá a la Argentina para estrenar su última última colaboración con Juan José Campanella "Luna de Avellaneda", en la que se reencuentra gran parte del equipo de "El hijo de la novia", además de colocarse nuevamente ante la cámara a las órdenes de Fabián Bielinsky, su director en "Nueve reinas".
En cuanto a Chávez, considera que "Rancho", coescrita por él plantea "que el hombrecito articula su mundo de un modo determinado y todo aquello que no pertenece a eso es algo foráneo, extraño, difícil de poder convivir. Porque acá el problema es la convivencia entre miradas diferentes, más allá del campo y la ciudad. Dile a cuatro personas que terminan de ver una película que te la cuenten y que se pongan de acuerdo y vas a ver que es imposible. El problema que tenemos es esa pretensión de estar de acuerdo", dice en una entrevista con Clarín.
El protagonista de "Un oso rojo", "El visitante" y "Extraño", que también se ha expresado durante años en la pintura, no pretende limitarse al cine y al teatro: "Vos podés encontrar una expresión viva en cualquier lugar, teatro de revistas, publicidad. ¿Dónde de pronto aparece un hecho vivo? En cualquier lugar. ¿Y dónde puede aparecer un hecho muerto? En cualquier lugar, desde el Actors Studio hasta lo que se supone es la panacea del arte".