Marina Glezer y Alfonso Tort hablan del estreno de "La ruptura"
- por © Jorge Orte-NOTICINE.com
La argentina Marina Glezer, reconocida por su carrera como actriz, debuta como directora con su ópera prima "La ruptura", un largometraje que se estrena este 4 de julio después de ocho años de trabajo. La película, ambientada en un pintoresco pueblo costero amenazado por la gentrificación, entrelaza una historia de amor con el conflicto social generado por la llegada de residentes adinerados que ponen en peligro la identidad del lugar. "No soy de definirme personalmente con una sola cosa porque tengo mucha curiosidad y me gusta hacer de todo", comentó Glezer.
"La ruptura" narra la historia de Julia (Catalina Silva), quien enfrenta la difícil decisión de poner fin a su relación con Pablo (Alfonso Tort). Paralelamente, el pueblo se organiza en manifestaciones permanentes contra los negocios que buscan comercializar la vida y la vivienda en la comunidad. La película establece un paralelismo entre la ruptura amorosa de Julia y Pablo y la transformación social del pueblo, mostrando cómo ambos enfrentan la pérdida y la lucha por conservar lo que aman.
Julia, a medida que se involucra en las protestas del pueblo y lucha con su decisión de dejar a Pablo, se convierte en artífice de su destino. La historia refleja su proceso de desapego y su búsqueda de una nueva relación con su entorno y consigo misma.
El elenco de "La ruptura" además de esta pareja protagonista, incluye a Adriana Ferrer, Sergio Gorfain y Félix Santamaría.
En declaraciones a la Agencia DAF, Marina Glezer explicó su enfoque en la dirección como un trabajo en equipo: "Una película es como un reloj, en el que tiene un engranaje donde están todas las piezas, pero este engranaje en vez de dar la hora cuenta un cuento y si cuenta el cuento que quería contar es porque ese grupo humano se organizó bien a la hora de hacerlo".
La elección de Cabo Polonio, en Uruguay, como escenario no fue casual para la cineasta argentina, quien ha habitado ese lugar desde siempre y lo considera perfecto para la historia. "Podría haber sido cualquier pueblo con una belleza rústica y natural, pero imaginé y proyecté esta historia específicamente en ese lugar", explicó. En cuanto a la posibilidad de actuar y dirigir simultáneamente, Glezer prefiere dejar la interpretación en manos de otros. "Me gusta que me dirijan cuando actúo. No creo que podría autodirigirme", confesó.
Por su parte, Alfonso Tort, en una entrevista con el diario Página 12, compartió su entusiasmo por trabajar bajo la dirección de Glezer. "Es una actriz que ha hecho muchas películas argentinas y algunas muy emblemáticas. Hace unos años, ella había hecho varios cortos, venía en un proceso de querer dirigir una película. Es un film muy personal. Hay algo de conocer mucho el territorio de donde se iba a filmar", explicó Tort.
Tort también destacó las dos historias paralelas de la película: el vínculo amoroso entre los protagonistas y la historia del pueblo. "En esta película hay como dos historias paralelas: el vínculo amoroso entre la protagonista y su pareja, y por otro lado, la historia del pueblo, que es muy verídica y que pasa en Cabo Polonio, que se marcan casas, y se tiran porque están en zonas que no está permitido, o que son ilegales. Por otro lado, hay una cosa de conservar el lugar. Es muy singular Cabo Polonio", comentó.
El título de la película, según Tort, alude a una metáfora profunda. "Pablo empieza a romper su propia casa: antes que la tiren otros, empieza a tirarla él. Agarra un martillo y empieza a darle a la pared. Creo que la ruptura vale en ambos. Es una síntesis de las dos historias que corren", reflexionó.
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"La ruptura" narra la historia de Julia (Catalina Silva), quien enfrenta la difícil decisión de poner fin a su relación con Pablo (Alfonso Tort). Paralelamente, el pueblo se organiza en manifestaciones permanentes contra los negocios que buscan comercializar la vida y la vivienda en la comunidad. La película establece un paralelismo entre la ruptura amorosa de Julia y Pablo y la transformación social del pueblo, mostrando cómo ambos enfrentan la pérdida y la lucha por conservar lo que aman.
Julia, a medida que se involucra en las protestas del pueblo y lucha con su decisión de dejar a Pablo, se convierte en artífice de su destino. La historia refleja su proceso de desapego y su búsqueda de una nueva relación con su entorno y consigo misma.
El elenco de "La ruptura" además de esta pareja protagonista, incluye a Adriana Ferrer, Sergio Gorfain y Félix Santamaría.
En declaraciones a la Agencia DAF, Marina Glezer explicó su enfoque en la dirección como un trabajo en equipo: "Una película es como un reloj, en el que tiene un engranaje donde están todas las piezas, pero este engranaje en vez de dar la hora cuenta un cuento y si cuenta el cuento que quería contar es porque ese grupo humano se organizó bien a la hora de hacerlo".
La elección de Cabo Polonio, en Uruguay, como escenario no fue casual para la cineasta argentina, quien ha habitado ese lugar desde siempre y lo considera perfecto para la historia. "Podría haber sido cualquier pueblo con una belleza rústica y natural, pero imaginé y proyecté esta historia específicamente en ese lugar", explicó. En cuanto a la posibilidad de actuar y dirigir simultáneamente, Glezer prefiere dejar la interpretación en manos de otros. "Me gusta que me dirijan cuando actúo. No creo que podría autodirigirme", confesó.
Por su parte, Alfonso Tort, en una entrevista con el diario Página 12, compartió su entusiasmo por trabajar bajo la dirección de Glezer. "Es una actriz que ha hecho muchas películas argentinas y algunas muy emblemáticas. Hace unos años, ella había hecho varios cortos, venía en un proceso de querer dirigir una película. Es un film muy personal. Hay algo de conocer mucho el territorio de donde se iba a filmar", explicó Tort.
Tort también destacó las dos historias paralelas de la película: el vínculo amoroso entre los protagonistas y la historia del pueblo. "En esta película hay como dos historias paralelas: el vínculo amoroso entre la protagonista y su pareja, y por otro lado, la historia del pueblo, que es muy verídica y que pasa en Cabo Polonio, que se marcan casas, y se tiran porque están en zonas que no está permitido, o que son ilegales. Por otro lado, hay una cosa de conservar el lugar. Es muy singular Cabo Polonio", comentó.
El título de la película, según Tort, alude a una metáfora profunda. "Pablo empieza a romper su propia casa: antes que la tiren otros, empieza a tirarla él. Agarra un martillo y empieza a darle a la pared. Creo que la ruptura vale en ambos. Es una síntesis de las dos historias que corren", reflexionó.
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