Sergio Olhovich habla del estreno de "1983, Cuando el petróleo era nuestro", película "soberanista"
- por © Redacción (México)-NOTICINE.com

El director mexicano Sergio Olhovich, de 83 años, ha dedicado más de dos décadas a concretar un proyecto que lleva en su mente desde hace tiempo: llevar a la pantalla grande la historia de la expropiación petrolera de 1938, un hecho histórico que marcó la política y la economía de México. Inspirado por las historias que su padre, un ingeniero petrolero, le contaba, Olhovich ("El infierno de todos tan temido", "Esperanza") logra finalmente estrenar esta semana su película, titulada "1938, Cuando el petróleo era nuestro".
En una entrevista con Álvaro Delgado para el programa "Los Periodistas", Olhovich destacó la importancia del petróleo para México y su relevancia en la actualidad. "Primero, que el petróleo no pertenezca a ningún propietario privado, a ningún propietario extranjero, que sea un bien de la nación y está ya puesto en la Constitución", afirmó el cineasta. "Luego, y ahí es donde entro yo con mi película, que el pueblo sepa lo que sucedió, la importancia que tiene el petróleo en la política y en la economía de México. Sin petróleo no hay posibilidad de avanzar. El petróleo es fundamental para la economía del país. No solamente es energía para los coches o los aviones, el petróleo está en todo: en los plásticos, en las llantas, en las medicinas. El petróleo es actualmente indispensable para la vida de una nación".
Olhovich también subrayó la necesidad de que las generaciones actuales conozcan este episodio histórico, especialmente en un contexto en el que, según él, el neoliberalismo intentó borrar este legado. "Yo creo que es fundamental recordar y enseñarle a las generaciones actuales lo importante que sucedió entonces porque el neoliberalismo se ocupó de borrar ese momento histórico", dijo. "Lo que interesaba en ese momento de los presidentes neoliberales era tratar, de otra vez, entregar el petróleo a los extranjeros. Gracias al Gobierno de López Obrador eso se detuvo, y yo creo que las nuevas generaciones deben entender dónde empezó todo eso, en la época del Cardenismo".
El guion de la película fue escrito por Olhovich junto con el fallecido escritor Carlos Montemayor, con quien comenzó a trabajar en el proyecto en 2002. Sin embargo, el film enfrentó numerosos obstáculos durante varios sexenios. "Cuando yo quise hacer la película, estos gobiernos neoliberales no querían que se hiciera. No me daban el dinero para hacerla", recordó Olhovich. "No fue hasta que entró el Gobierno de López Obrador, de la 4T, que pude echar a andar de nuevo la producción. El Presidente me dio chance de filmar en Palacio Nacional. Gran parte de la película está filmada en Palacio".
El director expresó su deseo de que la película genere reflexión entre los espectadores. "Lo más importante para mí es que cuando el espectador terminara de ver la película se quedara pensando en lo que vio, pensando en esa época, pensando en lo que sucedió en 1938 y haciendo el paralelismo con el día de hoy porque es enorme el paralelismo. Es increíble cómo se parece una época con la otra", dijo. "Que la gente sepa y lo defienda como lo defendió en 1938. Por eso se llama así la película".
La cinta, que cuenta con las actuaciones de Ianis Guerrero en el papel de Lázaro Cárdenas, Baltimore Beltrán, Sergio Bonilla, María Penella y la participación especial de Ofelia Medina, retrata no solo la expropiación petrolera, sino también las batallas internas del expresidente y el apoyo de la sociedad mexicana. "Desde niño viví esta historia en mi casa. Mi papá me llevaba a campamentos petroleros en Tabasco y en otros países, y de ahí entendí la importancia del petróleo en nuestra historia", relató Olhovich.
La película, que también incluye material de archivo de la época, fue producido con recursos de instituciones como PEMEX y CFE, y contó con imágenes del archivo familiar de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, hijo del expresidente.
Olhovich no oculta que se trata de una película con un mensaje político claro. "Es una película de izquierda", afirmó en una conferencia de prensa. "El subtexto es la soberanía nacional", detalló, añadiendo que "el petróleo es parte de la soberanía nacional. Y eso es algo que no debemos olvidar".
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En una entrevista con Álvaro Delgado para el programa "Los Periodistas", Olhovich destacó la importancia del petróleo para México y su relevancia en la actualidad. "Primero, que el petróleo no pertenezca a ningún propietario privado, a ningún propietario extranjero, que sea un bien de la nación y está ya puesto en la Constitución", afirmó el cineasta. "Luego, y ahí es donde entro yo con mi película, que el pueblo sepa lo que sucedió, la importancia que tiene el petróleo en la política y en la economía de México. Sin petróleo no hay posibilidad de avanzar. El petróleo es fundamental para la economía del país. No solamente es energía para los coches o los aviones, el petróleo está en todo: en los plásticos, en las llantas, en las medicinas. El petróleo es actualmente indispensable para la vida de una nación".
Olhovich también subrayó la necesidad de que las generaciones actuales conozcan este episodio histórico, especialmente en un contexto en el que, según él, el neoliberalismo intentó borrar este legado. "Yo creo que es fundamental recordar y enseñarle a las generaciones actuales lo importante que sucedió entonces porque el neoliberalismo se ocupó de borrar ese momento histórico", dijo. "Lo que interesaba en ese momento de los presidentes neoliberales era tratar, de otra vez, entregar el petróleo a los extranjeros. Gracias al Gobierno de López Obrador eso se detuvo, y yo creo que las nuevas generaciones deben entender dónde empezó todo eso, en la época del Cardenismo".
El guion de la película fue escrito por Olhovich junto con el fallecido escritor Carlos Montemayor, con quien comenzó a trabajar en el proyecto en 2002. Sin embargo, el film enfrentó numerosos obstáculos durante varios sexenios. "Cuando yo quise hacer la película, estos gobiernos neoliberales no querían que se hiciera. No me daban el dinero para hacerla", recordó Olhovich. "No fue hasta que entró el Gobierno de López Obrador, de la 4T, que pude echar a andar de nuevo la producción. El Presidente me dio chance de filmar en Palacio Nacional. Gran parte de la película está filmada en Palacio".
El director expresó su deseo de que la película genere reflexión entre los espectadores. "Lo más importante para mí es que cuando el espectador terminara de ver la película se quedara pensando en lo que vio, pensando en esa época, pensando en lo que sucedió en 1938 y haciendo el paralelismo con el día de hoy porque es enorme el paralelismo. Es increíble cómo se parece una época con la otra", dijo. "Que la gente sepa y lo defienda como lo defendió en 1938. Por eso se llama así la película".
La cinta, que cuenta con las actuaciones de Ianis Guerrero en el papel de Lázaro Cárdenas, Baltimore Beltrán, Sergio Bonilla, María Penella y la participación especial de Ofelia Medina, retrata no solo la expropiación petrolera, sino también las batallas internas del expresidente y el apoyo de la sociedad mexicana. "Desde niño viví esta historia en mi casa. Mi papá me llevaba a campamentos petroleros en Tabasco y en otros países, y de ahí entendí la importancia del petróleo en nuestra historia", relató Olhovich.
La película, que también incluye material de archivo de la época, fue producido con recursos de instituciones como PEMEX y CFE, y contó con imágenes del archivo familiar de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, hijo del expresidente.
Olhovich no oculta que se trata de una película con un mensaje político claro. "Es una película de izquierda", afirmó en una conferencia de prensa. "El subtexto es la soberanía nacional", detalló, añadiendo que "el petróleo es parte de la soberanía nacional. Y eso es algo que no debemos olvidar".
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