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Las cámaras volvieron a encenderse en los sets de TV Azteca para grabar los primeros capítulos de la tercera temporada de "Dra. Lucía: Un don extraordinario". La serie, que se ha convertido en una de las apuestas más sólidas de la televisora, reunió nuevamente a Marimar Vega, Ana Layevska y Carlos Ferro, mientras incorpora a Itatí Cantoral en un papel clave que promete sacudir la dinámica del Hospital Matilde Montoya.

La producción, que alcanzará los 150 episodios con esta nueva entrega, mantiene su fórmula de combinar drama médico con elementos sobrenaturales. En esta ocasión, la trama encuentra a la Dra. Lucía Castillo (Vega) en su momento más vulnerable: su amuleto protector fue robado por Kiri, la hermana del brujo, dejándola expuesta y con su salud deteriorada. "Sin su peculiar don, la doctora Lucía queda expuesta", adelantó el equipo de producción durante el anuncio del nuevo ciclo.

Itatí Cantoral se integra como Natalia Cervantes, una cirujana plástica cuyo arribo alterará el equilibrio del hospital. Junto a ella, Cayetano Arámburo y Ruy Senderos dan vida a nuevos personajes que, según los guionistas, traerán "conflictos, revelaciones y un renovado dinamismo".

Los hilos narrativos dejados pendientes en la temporada anterior comienzan a resolverse. El Dr. Emiliano (Christián de la Fuente) sigue desaparecido tras huir de la mafia, mientras Patricio (Ferro) se debate entre su relación con Mariana Esquivel (Layevska) y sus sentimientos no resueltos hacia Lucía. "Se convierte en el inesperado héroe del hospital cuando un suceso inesperado pone en crisis y en peligro la vida de varios", detallaron los productores.

Uno de los arcos más esperados es el desenlace de Mariana, cuyo personaje enfrentará consecuencias por sus actos anteriores. Acusada de fraude, encubrimiento y tentativa de asesinato contra Lucía, su caída parece inevitable: "Será destituida, arrestada y encarcelada", confirmó el equipo creativo.

Entre las subtramas secundarias, destacan la recuperación de Karina (Luisa Rubino) tras ser apuñalada por Kiri, y la nueva familia que Omar (José Carlos Femat) forma con Chabe (Paola Flores), pese a la oposición de Maribel. También surgirá una complicada relación entre los paramédicos Iker (Nacho Reyes) y Sarita (Andrea Lagunes).

Adrián Ortega, director general de contenidos de TV Azteca, destacó durante la presentación que la serie representa "una apuesta a la producción propia hecha en México". El ejecutivo vinculó el éxito del programa con la estrategia de la televisora, que incluye próximos estrenos como la cuarta temporada de "Rosario Tijeras" y nuevas ediciones de "Exatlón".

La dirección de esta temporada recae nuevamente en Raúl Caballero y José García Agraz, con producción de Martín Garza Cisneros. El equipo promete que esta será la entrega más intensa, resolviendo misterios planteados desde la primera temporada mientras introduce nuevos conflictos.

Con el hospital sin dirección clara, la salud de Lucía en riesgo y varios personajes en situaciones límite, los 50 nuevos capítulos buscarán mantener la atención de una audiencia que ya hizo de la serie un éxito en Azteca Uno. El estreno está previsto para los próximos meses, aunque la televisora no ha confirmado una fecha exacta.

Mientras tanto, el elenco completo -que incluye además a Julia Urbini, Daniel García y Norma Reyna, entre otros- continúa grabando en locaciones de la Ciudad de México, donde el hospital ficticio vuelve a llenarse de dramas médicos, poderes sobrenaturales y relaciones complicadas.

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