Albert Serra, de Locarno a Toronto: "El cómo esté hecha la película no tiene importancia"
- por © Cineuropa-NOTICINE.com
El cineasta catalán Albert Serra se ha forjado una fama "autoral" importante en los festivales internacionales, aunque sus películas, siempre dirigidas a una élite cinéfila, apenas sean vistas en su propio país. Ello no quita para que cuente con un innegable aprecio en el exterior. Su film "Honor de cavalleria", por ejemplo, se mantuvo dos años en las salas de cine francesas. Ahora lanza "Historia de la meva mort / Historia de mi muerte", donde plantea el encuentro de dos de los personajes literarios europeos más populares. Es un viaje desde el racionalismo del siglo XVIII de Casanova al Romanticismo decimonónico de Drácula. Con su distribución confirmada en España, Francia y Portugal, la película compite en el Festival de Locarno antes de se proyectada en el Festival de Cine de Toronto. Cineuropa dialogó con él.
- Esta es una película conceptualmente muy ambiciosa. ¿Cómo ha enfocado el guión?
Sin duda, en lo que más me he esforzado ha sido en los diálogos. Buscaba que fueran más originales de lo habitual. Quería que sonaran cotidianos pero, a su vez, que fueran algo abstractos y filosóficos. El discurso de los personajes se sitúa entre lo concreto y la insinuación. También he querido que el espectador tuviera la sensación de que cualquier cosa puede pasar en cada una de las escenas.
- ¿Ve la Europa del siglo XXI más racional o más cercana al romanticismo?
Sin duda se ha inclinado más hacia la parte oscura de Drácula. Europa vive una situación que no se sabe cómo va a acabar todo. Los principios del racionalismo aún rigen nuestra sociedad. Mantenemos los derechos fundamentales que se establecieron entonces y la misma separación de poderes, pero parece que el poder actual lo ostentan personas y organizaciones que permanecen en la sombra.
- Rodó más de 400 horas de metraje. Condensarlas en 150 minutos de película le llevó año y medio de trabajo. ¿Qué criterio siguió para incluir solo una pequeña parte de lo rodado?
Di prioridad a las escenas rodadas en interior. Durante el proceso de montaje me daba cuenta de que las prefería, porque buscaba dar a la película un efecto de intimidad y de reflexión.
- Define su cine, especialmente esta película, como algo que el espectador tiene que amar u odiar tal y como es, sin término medio. ¿Opina que no tiene sentido analizar la película en partes sino como un concepto global?
Para mí lo importante es siempre establecer un concepto inicial y mantenerme fiel a él durante el rodaje. El cómo esté hecha la película no tiene importancia. Uno de esas ideas que se muestran en "Historia de la meva mort" es enseñar el mal de un modo latente. Es una casualidad, pero esa misma idea aparece en películas recientes como "L'inconnu du lac" o "Solo Dios perdona".
- Esta es una película conceptualmente muy ambiciosa. ¿Cómo ha enfocado el guión?
Sin duda, en lo que más me he esforzado ha sido en los diálogos. Buscaba que fueran más originales de lo habitual. Quería que sonaran cotidianos pero, a su vez, que fueran algo abstractos y filosóficos. El discurso de los personajes se sitúa entre lo concreto y la insinuación. También he querido que el espectador tuviera la sensación de que cualquier cosa puede pasar en cada una de las escenas.
- ¿Ve la Europa del siglo XXI más racional o más cercana al romanticismo?
Sin duda se ha inclinado más hacia la parte oscura de Drácula. Europa vive una situación que no se sabe cómo va a acabar todo. Los principios del racionalismo aún rigen nuestra sociedad. Mantenemos los derechos fundamentales que se establecieron entonces y la misma separación de poderes, pero parece que el poder actual lo ostentan personas y organizaciones que permanecen en la sombra.
- Rodó más de 400 horas de metraje. Condensarlas en 150 minutos de película le llevó año y medio de trabajo. ¿Qué criterio siguió para incluir solo una pequeña parte de lo rodado?
Di prioridad a las escenas rodadas en interior. Durante el proceso de montaje me daba cuenta de que las prefería, porque buscaba dar a la película un efecto de intimidad y de reflexión.
- Define su cine, especialmente esta película, como algo que el espectador tiene que amar u odiar tal y como es, sin término medio. ¿Opina que no tiene sentido analizar la película en partes sino como un concepto global?
Para mí lo importante es siempre establecer un concepto inicial y mantenerme fiel a él durante el rodaje. El cómo esté hecha la película no tiene importancia. Uno de esas ideas que se muestran en "Historia de la meva mort" es enseñar el mal de un modo latente. Es una casualidad, pero esa misma idea aparece en películas recientes como "L'inconnu du lac" o "Solo Dios perdona".