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En el primer día de la carrera por el León de Oro este jueves, la Mostra de Venecia proyectó dos cintas, ambas con personajes centrales femeninos, y de los fuertes: la australiana "Tracks", basada en la real aventura de una joven veinteañera que en 1977 decidió cruzar sola el desierto a lo largo de 1700 millas, acompañada sólo por cuatro camellos y un perro, y la italiana "Via Castellana Bandiera", en la que dos coches conducidos por mujeres se encuentran en una estrecha vía de Palermo sin que ninguna de las conductoras quiera retroceder. Más interesante y trabajada resultó la primera, que tiene como protagonista a la Alicia de Burton, Mia Wasikowska, mientras que la segunda, debut en cine de una conocida directora de teatro siciliana, quien también actúa, Emma Dante, fue tediosa e insustancial.

Estéticamente preciosista, dignamente rodada, escrita y actuada, "Tracks" es la nueva propuesta del estadounidense afincado en Australia John Curran, a partir de la experiencia vivida por una joven, Robyn Davidson, quien decidió cruzar el desierto australiano a pie, acompañada en principio sólo por animales, aunque ocasionalmente encontró aborígenes y a un fotógrafo de National Geographic, con quien había concertado tres citas a lo largo del camino, que duró nueve meses, en los que recorrió esas 1700 millas por el Oeste de Australia.

La principal fuente del film es el relato en primera persona que publicó la propia Davidson en 1980, y que ha sido dramatizado con algunos aditamentos que no desmerecen el original por parte de Marion Nelson, quien utiliza con mesura la voz en Off para cubrir los largos momentos de soledad de la marchadora y sus imprevisibles camellos.

El libro, "Tracks", pasó por varios intentos de adaptación, el más sonado con la hollywoodiense Julia Roberts como Davidson, en los años 90 del pasado siglo.

Mantener el interés durante 110 minutos con una historia que se resume en menos de dos líneas no es tarea fácil. Curran y las talentosas mujeres con las que se ha rodeado lo consiguen sin llegar a espectaculares resultados, pero al menos su film se ve agradablemente, sobre todo si lo comparamos con la segunda propuesta del día, que sufre del  origen teatral de su autora, una Emma Dante que considera que su mínimo y claustrofóbico punto de partida puede ganar cinematográficamente gracias a una temblorosa cámara en mano. Y se equivoca de parte a parte.

"Via Castellana Bandiera" parte de una novela homónima de la propia Dante, que se resume en lo antes dicho: una carretera urbana (llamarla calle sería exagerado) en Palermo, dos coches (uno con una pareja de lesbianas, el otro con una familia entera, pero conducido por la suegra) que se obstinan en pasar sin moverse ni retroceder para dejar pasar al otro. ¿No sería más propio de un espacio teatral? Posiblemente, pero Dante innecesariamente ha querido convertirlo en su opera prima, y hacer una especie de drama con toques de comedia y crítica social que no logra evitar convertirse en reiterativo y aburrido, que queda tan varado y bloqueado como sus dos automóviles.