Noticine.com

La cineasta de origen argentino afincada en España Daniela Fejerman ha contado con la poderosa complicidad de los actores catalanes Nora Navas y Francesc Garrido y de su compatriota Alejo Flah para llevar en "La adopción", que este martes se ha estrenado en la Semana de Cine de Valladolid, la experiencia por la que pasó para adoptar un niño ucraniano (aunque en la película, que se filmó en Lituania nada apunta a esa otra exnación soviética. El carácter autobiográfico de este melodrama español que entró en la competencia por la Espiga de Oro junto a la alemana "El mundo abandonado / Die abhandene Welt", de Margarethe von Trotta, y la islandesa "El valle de los carneros / Hrútar", de Grímur Hákonarson, aporta veracidad a esta crónica realista, emotiva e implacable sobre la corrupción de un sistema y unos seres humanos que no dudan en manejar vidas de niños inocentes en su beneficio económico.

Fejerman cuenta que compartió en la distancia con sus amigos el complicado y largo periplo que sufrió en Ucrania para conseguir culminar el proceso de adopción del hoy su hijo, y entonces un bebé. El productor Gerardo Herrero sugirió filmar en Lituania, donde él mismo había trabajado recientemente y -posiblemente para ahorrar en ambientación- aunque no se se cita directamente el país donde se desarrolla la historia, se usa en parte del metraje el idioma de esa república báltica así como el ruso, que también se habla. En realidad -la película tiene doble versión en español y catalán- usa el arma de la diversidad idiomatica para subrayar la indefensión de la pareja ibérica en un país donde la corrupción campa por sus respetos y muchos quieren hacer dinero con las ansias de paternidad de parejas occidentales sin posibilidad de procrear.

"Mientras estaba allí iba contando a mis amigos por skype cómo de largas y complicadas eran las gestiones, algunos me decían que con el tiempo cogería distancia y hasta podría escribir sobre ello. Uno de esos amigos era Alejo (su coguionista Alejo Flah). Cuando llegó ese momento coincidimos en una premisa: No podíamos ser "peliculeros", inventarnos cosas para acentuar emotividades. La mayoría de lo que se ve en pantalla es real, y añadimos elementos también de otras experiencias de parejas en nuestra misma situación. Los dos protagonistas (Nora Navas y Francesc Garrido) han puesto cuerpo y alma. Son grandes actores y siempre le ponen verdad, pero esta vez han sido de una entrega radical", detalla Daniel Fejerman, cuya obra estaba hasta ahora fundamentalmente dedicada a la comedia.

Por su parte, la premiada actriz catalana Nora Navas, que vuelve a brillar en un papel que bien podría significarle otra nominación a los Goya, agrega que saber que su personaje existió y es la propia directora fue una ayuda: "Me dio mucha seguridad que fuese su historia. Daniela nos dio posibilidad de aportar en las lecturas del guión e incluso mientras preparábamos las escenas la víspera de cada jornada de rodaje. Nos ha dejado mucho a Francesc y a mí tocar su historia. Ella se iba nutriendo. No puedo actuar desde la mentira y aquí hay mucha verdad".

Fejerman cuenta que Navas estuvo elegida desde el principio, pero que a su oponente masculino llegaron después de probar a al menos otros dos actores, y entre ella y Garrido surgió una gran química. "No habiamos trabajado juntos nunca, Nora y yo, y es responsabilidad o merito de Daniela el habernos unido", dice el actor, mientras Navas agrega que tienen una forma de ser y trabajar muy parecidas, y ello le aportó credibilidad a esta pareja que tiene que pasar de la esperanza al desaliento, pasando

Sigue nuestras últimas noticias por TWITTER.