Daniel Burman, feliz por el lanzamiento internacional de "El Rey del Once" en la Berlinale

por © Jon Apaolaza (Berlín)-NOTICINE.com
Daniel Burman
Pese a encontrarse a miles de kilómetros de Buenos Aires, el cineasta argentino Daniel Burman estaba este pasado fin de semana absolutamente pendiente, a través de su teléfono inteligente, de los datos de taquilla que le llegaban sobre los primeros pasos comerciales de "El rey del Once", su película estrenada el jueves pasado (19 050 espectadores hasta este domingo inclusive), que simultáneamente abría el apartado Panorama del Festival de Berlín en su edición 66. NOTICINE.com habló con exclusiva con él.

- Para quién aún no sepa nada de "El Rey del Once"... ¿Qué cuenta en ella?
Mi décima película, "El rey del Once", narra el regreso de un hijo al universo de su padre que regenta una fundación de caridad en el barrio judío de Buenos Aires, el barrio del Once. Este regreso a la infancia de un hombre de cuarenta años que vive en EEUU, perdido en su día a día y en sus decisiones, le ayudará a recuperar su propia identidad. Se trata de una comedia dramática montada sobre un aspecto de falso documental en el que veremos la fundación real en el barrio del Once interactuando con la ficción en un delicado y creo que logrado equilibrio.

- Se ha comentado mucho que esta película marca como una especie de retorno a los temas de tus primeras obras, hace más de una década ¿Ese regreso ha sido algo casual o ha tenido algo que ver el hecho de que quizás en estas últimas películas se había alejado de esos temas tan humanos y familiares, y no terminaban de funcionar tan bien como las primeras?
Yo no creo que haya ninguna ruta, voy haciendo película tras película, y obviamente con la perspectiva del tiempo, todos tenemos algún tipo de sentido o de orden. De todas formas tenía muchas ganas de volver a hacer una película, como digo yo, con las manos evitando la infraestructura industrial que tuve que sumar a las anteriores películas, una película de a pie, sin camiones, recorriendo un barrio, viviéndolo y poniéndome al ritmo del lugar. De alguna manera si podría ser una vuelta a mi origen, a un modo de hacer cine que abandoné porque intentaba contar otras historias que necesitaban de otro tipo de infraestructura. Pero todos estos pasos de este camino de veinte años de cine, para estas diez películas han sido necesarios. Toda película fue necesaria para hacer otra, todo va sucediendo porque si planificamos Dios se ríe de nuestros planes y en el cine eso siempre se cumple.

- Aunque no sea en competencia, donde años atrás usted logró un Oso de Plata por "El abrazo partido", esta cinta marca también su regreso a un festival que es para usted casi el nacimiento internacional de su carrera...
Sí, así es. La primera vez fue hace cerca de dos décadas. Presenté mi opera prima, "Un crisantemo estalla en cinco esquinas"... Y no sólo era mi primera participación en un festival extranjero, sino incluso la primera vez que crucé el océano... incluso mi primer vuelo en avión. A partir de ahí regresé varios años y me gané el Premio del Jurado, ese Oso del que hablaste, que para mí reconocimiento fue muy importante. Es cierto que ahora no estamos en competencia, pero abrir el segundo apartado en importancia del festival, Panorama, es también un honor y una gran satisfacción. Berlín está abriendo puertas a "El rey del Once" en el resto del mundo...

- Tiene una productora que además está potenciando nuevos talentos, buscando nuevos guiones… ¿puede hablarnos un poco de este proyecto?
Regentamos la Oficina Burman de creación de contenidos, sobre todo para televisión en español para todo el continente. Ponemos mucho énfasis en el valor de los autores, realizando un trabajo colaborativo en el que los autores aprendemos de otros que se dedican a Sorftware o a Gameing y donde dejamos de lado nuestros egos y trabajamos en un ambiente de colaboración, construyendo equipos de trabajo de personas muy diferentes para construir historias que puedan atrapar audiencias en diferentes áreas de Latinoamérica. Esta pequeña fábrica de historias es un proyecto bastante ambicioso que ha arrancado muy bien.

- ¿Cree que va a ocurrir, como en Estados Unidos, que en el mundo iberoamericano cada vez más profesionales del cine se pasen a la televisión en busca de otro tipo de libertad?
Yo creo que sí, hoy en día la televisión es el mayor medio de experimentación que tiene cualquier cineasta, la vanguardia está en la televisión, los productos más interesantes que uno ve a nivel narrativo, de experimentación narrativa y de dramaturgia están en la televisión. Sigo amando, amo hacer películas, pero la televisión hoy en día me parece una industria donde los autores podemos tener un campo de experimentación mucho más amplio que en el cine, y además mucho mayor en el sentido de que puede llegar a un público enorme más fácilmente, aunque esto no quiere decir que en el cine no se pueda experimentar.