Miki Esparbé, en Málaga con "Las distancias": "El esfuerzo de mantener las amistades vivas permanentemente es un desgaste"
- por © Jon Apaolaza (Málaga)-NOTICINE.com
El actor catalán Miki Esparbé, conocido por películas como "Perdiendo el Norte", "Requisitos para ser una persona normal", "Cuerpo de élite" o "El rey tuerto", vuelve a Málaga con un drama coral, "Las distancias", dirigido por Elena Trapé, que opta a la Biznaga de Oro. En entrevista exclusiva con NOTICINE.com, Esparbé, cuyo personaje es el desencadenante de un conflicto entre amigos de largo recorrido, reflexiona sobre la evolución de los relaciones a lo largo del tiempo y la posibilidad de empatizar con esta historia en la que muchos se reconocerán.
- ¿Qué cuenta su película y cómo definiría a su personaje?
"Las distancias" trata sobre un grupo de amigos que acuden a Berlín a felicitar a un cuarto amigo que lleva ahí doce años viviendo y que el fin de semana donde pasa la acción cumple 35 años. Aprovechan la excusa del cumpleaños para ir a visitarle, lo que no se esperan es ver como este amigo que vive allí les recibe como les recibe, la hostilidad con la que les recibe. A lo largo de este fin de semana este grupo de amigos acaba descubriendo que ya no tiene tanto en común como creían que tenían y lo que les aborda en realidad es un golpe de realidad y decepción. Mi personaje dentro de la historia es el que vive ahí, yo soy Comas en la peli. Es un tipo que lleva 12 años viviendo en Berlín, sobre los 2000 se fue ahí porque le despertaba muchísimo la ciudad en cuanto a las inquietudes artístico-culturales que le podía ofrecer y ahora mismo Comas es un tío con 35 años y es un poco la sombra de lo que fue, ni se siente de aquí ni se siente de allí. Es un fin de semana en el que le han pasado muchas cosas a la vez y la última cosa que esperaba y deseaba era que acudieran sus amigos a felicitarle el cumpleaños cuando en realidad en realidad no tiene ganas de cumplirlos.
- Se han hecho unas cuantas películas sobre cómo afecta el paso del tiempo a grupos de amigos ¿Qué tiene ésta de especial?
Para mi tiene de especial que me toca porque es de mi quinta, de mi generación digamos, este escalafón entre los 30 y los 40. Cuando uno tenía 20 años pensaba en una serie de expectativas que colocaba ahí arriba y una vez llega a esa edad dice bueno la realidad quizás es otra y ahí tienes que hacer el ejercicio de madurar y de tratar de asumirlo. En este caso, la decepción está ahí, porque muy pocas veces eso sucede tal cual te lo habías imaginado. Para mí lo que tiene en el caso de mi generación que lo veo muy claro sobre los 2000 cuando todo el mundo terminaba la universidad y se iba a Londres, se iba a Berlín o se iba incluso a Paris, Italia... porque era aquello de "para estar sirviendo copas aquí estoy sirviéndolas ahí" y llega un momento en el que eso caduca. Yo tengo muchos amigos que se fueron fuera a trabajar y ahora mismo no se sienten ni de aquí ni de allí, por eso creo que es especial, porque es un retrato actual de lo que pasa en mi generación. Es un retrato muy desalentador. Por otra parte es algo que me toca de cerca, que creo que sí que hay algo con lo que todo el mundo puede empatizar en la peli y es que todos tenemos amigos de la adolescencia, incluso de la infancia, con los que te puedes reunir cada x tiempo, ya sea porque en Navidad vuelves a casa de tus padres, y ahí te rencuentras con ellos aunque sean dos noches para salir de fiesta y te das cuenta que el único nexo de unión que tenéis es el pasado. No puedes compartir apenas nada del presente porque apenas lo has vivido a su lado. Entonces es triste ver como sólo las anécdotas, las batallitas, es lo que os mantiene mínimamente unidos. Pero tratar de hacer el esfuerzo de mantener eso vivo permanentemente es un desgaste, es lo que se dan cuenta este grupo de amigos durante este fin de semana en "Las distancias".
- Es inevitable pensar en "cualquier tiempo pasado fue mejor"...
Idealizamos lo pasado en parte, también es verdad que de alguna manera yo creo que lo que toca con cierta edad, en cada momento vital, tienes que asumir tu realidad y esta gente no se permite hacer eso. Yo siempre defino a Comas, mi personaje, como un poco la sombra de lo que fue. No está preparado para asumir el presente. Si miras atrás inevitablemente hay muchas cosas que inevitablemente idealizas, eso te puedo hablar de mil cosas, no solo en lo profesional, a veces pasa en lo personal, en lo sentimental, en el núcleo familiar, de amistades... Estamos condenados a eso permanentemente, pero si vamos pensando que tiempos pasados fueron mejores nunca nos vamos a permitir disfrutar del presente.
- ¿Cómo ve el Festival de Málaga?
Para mi es una fiesta del cine, del cine español y ahora latinoamericano, pero además es el festival como más cercano, igual el más caluroso. Para mí es una ciudad que muta durante los días del festival, en los que la gente se vuelca con las películas. Ver el teatro Cervantes lleno para cualquier visionado es un espectáculo. Es un placer ver cómo durante una semana, semana y poco, la ciudad cambia y la gente sale fascinada de los pases, antes, después. La gente transita estas calles que separan el hotel del teatro Cervantes encantadísimos con que la ciudad acoja el festival, así que yo encantadísimo de la vida de volver.
- ¿Aspiran a premio?
De alguna manera, un premio sería el reconocimiento a todo el esfuerzo que hay detrás, que hay mucho. De momento estamos pendientes de a ver cómo responden los primeros espectadores. Ya estar aquí para nosotros es una maravilla, y después del largo camino que llevamos, igual que el reconocimiento sería bienvenido. Pero de hecho estar ya seleccionados y estar en sección oficial es un premio también, así que encantados de la vida.
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- ¿Qué cuenta su película y cómo definiría a su personaje?
"Las distancias" trata sobre un grupo de amigos que acuden a Berlín a felicitar a un cuarto amigo que lleva ahí doce años viviendo y que el fin de semana donde pasa la acción cumple 35 años. Aprovechan la excusa del cumpleaños para ir a visitarle, lo que no se esperan es ver como este amigo que vive allí les recibe como les recibe, la hostilidad con la que les recibe. A lo largo de este fin de semana este grupo de amigos acaba descubriendo que ya no tiene tanto en común como creían que tenían y lo que les aborda en realidad es un golpe de realidad y decepción. Mi personaje dentro de la historia es el que vive ahí, yo soy Comas en la peli. Es un tipo que lleva 12 años viviendo en Berlín, sobre los 2000 se fue ahí porque le despertaba muchísimo la ciudad en cuanto a las inquietudes artístico-culturales que le podía ofrecer y ahora mismo Comas es un tío con 35 años y es un poco la sombra de lo que fue, ni se siente de aquí ni se siente de allí. Es un fin de semana en el que le han pasado muchas cosas a la vez y la última cosa que esperaba y deseaba era que acudieran sus amigos a felicitarle el cumpleaños cuando en realidad en realidad no tiene ganas de cumplirlos.
- Se han hecho unas cuantas películas sobre cómo afecta el paso del tiempo a grupos de amigos ¿Qué tiene ésta de especial?
Para mi tiene de especial que me toca porque es de mi quinta, de mi generación digamos, este escalafón entre los 30 y los 40. Cuando uno tenía 20 años pensaba en una serie de expectativas que colocaba ahí arriba y una vez llega a esa edad dice bueno la realidad quizás es otra y ahí tienes que hacer el ejercicio de madurar y de tratar de asumirlo. En este caso, la decepción está ahí, porque muy pocas veces eso sucede tal cual te lo habías imaginado. Para mí lo que tiene en el caso de mi generación que lo veo muy claro sobre los 2000 cuando todo el mundo terminaba la universidad y se iba a Londres, se iba a Berlín o se iba incluso a Paris, Italia... porque era aquello de "para estar sirviendo copas aquí estoy sirviéndolas ahí" y llega un momento en el que eso caduca. Yo tengo muchos amigos que se fueron fuera a trabajar y ahora mismo no se sienten ni de aquí ni de allí, por eso creo que es especial, porque es un retrato actual de lo que pasa en mi generación. Es un retrato muy desalentador. Por otra parte es algo que me toca de cerca, que creo que sí que hay algo con lo que todo el mundo puede empatizar en la peli y es que todos tenemos amigos de la adolescencia, incluso de la infancia, con los que te puedes reunir cada x tiempo, ya sea porque en Navidad vuelves a casa de tus padres, y ahí te rencuentras con ellos aunque sean dos noches para salir de fiesta y te das cuenta que el único nexo de unión que tenéis es el pasado. No puedes compartir apenas nada del presente porque apenas lo has vivido a su lado. Entonces es triste ver como sólo las anécdotas, las batallitas, es lo que os mantiene mínimamente unidos. Pero tratar de hacer el esfuerzo de mantener eso vivo permanentemente es un desgaste, es lo que se dan cuenta este grupo de amigos durante este fin de semana en "Las distancias".
- Es inevitable pensar en "cualquier tiempo pasado fue mejor"...
Idealizamos lo pasado en parte, también es verdad que de alguna manera yo creo que lo que toca con cierta edad, en cada momento vital, tienes que asumir tu realidad y esta gente no se permite hacer eso. Yo siempre defino a Comas, mi personaje, como un poco la sombra de lo que fue. No está preparado para asumir el presente. Si miras atrás inevitablemente hay muchas cosas que inevitablemente idealizas, eso te puedo hablar de mil cosas, no solo en lo profesional, a veces pasa en lo personal, en lo sentimental, en el núcleo familiar, de amistades... Estamos condenados a eso permanentemente, pero si vamos pensando que tiempos pasados fueron mejores nunca nos vamos a permitir disfrutar del presente.
- ¿Cómo ve el Festival de Málaga?
Para mi es una fiesta del cine, del cine español y ahora latinoamericano, pero además es el festival como más cercano, igual el más caluroso. Para mí es una ciudad que muta durante los días del festival, en los que la gente se vuelca con las películas. Ver el teatro Cervantes lleno para cualquier visionado es un espectáculo. Es un placer ver cómo durante una semana, semana y poco, la ciudad cambia y la gente sale fascinada de los pases, antes, después. La gente transita estas calles que separan el hotel del teatro Cervantes encantadísimos con que la ciudad acoja el festival, así que yo encantadísimo de la vida de volver.
- ¿Aspiran a premio?
De alguna manera, un premio sería el reconocimiento a todo el esfuerzo que hay detrás, que hay mucho. De momento estamos pendientes de a ver cómo responden los primeros espectadores. Ya estar aquí para nosotros es una maravilla, y después del largo camino que llevamos, igual que el reconocimiento sería bienvenido. Pero de hecho estar ya seleccionados y estar en sección oficial es un premio también, así que encantados de la vida.
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