Hablamos con Renato Quattordio, mejor actor en Huelva con "Yo, adolescente"
- por © Jon Apaolaza (Huelva)-NOTICINE.com
El joven intérprete argentino Renato Quattordio, conocido por las series televisivas "O11CE", "El Mundo de Mateo" y "Simona", acaba de lograr en el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva su primer premio internacional en la gran pantalla, como protagonista de la película de Lucas Santa Ana "Yo, adolescente", adaptación del blog y novela autobiográficos de Nicolás "Zabo" Zamorano, a quien Renato da vida. VIENDOMOVIES habló en exclusiva con él.
- ¿Cómo es Zabo, su personaje en esta película?
Mi personaje es el protagonista, que cuenta y narra la historia. La película es una adaptación de una novela escrita por Nicolás Zamorano, es una novela autorreferencial. Se trata de un joven de unos 16 años que, en el contexto de la Argentina, Buenos Aires, de 2004, empieza a escribir acerca de lo que es su mundo, sus intereses, sus amigos, sus preguntas y demás. Es el personaje que cuenta la historia. A lo largo de la película hay una voz en off, que hace referencia a lo que mi personaje escribe en su ordenador. Lo que va contando es lo que le pasa a él en su interior, y lo comparamos con lo que él muestra hacia fuera. Entonces está ese diálogo entre lo que le pasa con sus amigos en Buenos Aires, y lo que realmente les dice a sus amigos que le pasa.
- No debe ser habitual para usted interpretar a alguien que existe ¿Cuál fue su relación personal con el autor de la novela?
La verdad que desde un primer momento tuvimos una buena relación. Yo durante un tiempo tenía la duda de si debía interpretar cómo era él, o si tenía que construir algo totalmente nuevo por mi parte. Y creo que hice un poco de las dos cosas, porque la película tiene un guion y una trama que está muy buena para ser interpretada y que se parece mucho a cómo es él en la vida real. Entonces yo creo que tomé un poco lo que yo vi de él y aproveché para construir el personaje.
- A lo largo de la preparación de su papel ¿Habló en algún momento con él, le preguntó o consultó algo?
Sí, yo quería tener la libertad de interpretar lo que yo pensaba que era el personaje, pero sí que hemos tenido charlas. La película es muy autorreferencial, él habla en primera persona a cerca de lo que le pasa en su infancia, entonces si hemos tenido algunas conversaciones acerca de cómo se sintió él en algún aspecto. Pero después, más allá de eso, yo tuve mi trabajo con el director para tratar de contar la historia de lo que nosotros queremos contar. Si bien la película está basada en la novela, se trataba de hacer algo nuevo. Entonces era un poco el trabajo de saber qué era lo que le ocurría a él, pero al mismo tiempo tener la libertad de poder seguir la línea de la película.
- ¿Cree que han cambiado mucho los adolescentes de la época de la película a los de hoy?
Pienso que hay algunas cosas que cambiaron. Naturalmente, la película está ubicada entre 2004-2005 y bueno, de 2004 hasta ahora han cambiado muchas cosas en todos los sentidos: la forma de comunicarnos, las redes sociales, la tecnología, los vínculos. Todo ha cambiado bastante. Pero sin embargo yo creo que hay algo que tiene la adolescencia que lo comparten todas las generaciones. Cada generación, del modo que sea, comparte el hecho de empezar a conocerse a uno mismo, de encontrar respuestas en algunas dudas que uno tiene en el tránsito de esa edad, la diversión, los amigos, salir a conocer el mundo y las calles. De todo esto tiene mucho la película y creo que se puede sentir muy reflejado tanto un adolescente actual, como cualquier generación que ha sido joven y que comparte esas cosas en común.
- ¿Cómo llegó usted al proyecto?
Yo recibí un email para hacer el casting de la película, y es algo muy extraño lo que pasó, porque yo leí la gacetilla y la historia, pero yo en ese momento estaba previsto para hacer otro personaje. No me di cuenta, pero leí la película para hacer el personaje principal, el de Zabo, y en el día del casting antes de ir, fui a revisar el email y en ese momento ví que me habían llamado para el otro personaje. Cuando llegué, le dije al director: "Mira, yo te voy a decir la verdad, no es por agrandado ni por nada, pero yo leí la historia y me imaginaba interpretando a este personaje". Él me contestó que realizase el casting de los dos, y al final terminó resultando lo de Zabo y aquí estamos...
- ¿En qué se parece y se diferencia el personaje de usted?
Creo que hay algo que tiene el personaje que mucha gente se puede sentir identificada. Tiene problema para comunicar qué es lo que le pasa, y yo creo que en algún aspecto me puedo ver identificado en ese sentido, y al mismo tiempo no, porque uno siempre necesita tener a sus familiares o a sus amigos para poder expresarse y ser libre, y en ese sentido digamos que no tenemos el mismo final. Pero después hay muchas cosas que te digo que me han salido naturales porque yo también las comparto, esto de tener hambre de conocer el mundo, de disfrutar y hay algo que tiene el personaje que, en el lugar en el que está él tiene que ser el protagonista, quiere que le miren, y yo creo que ahí también nos podemos parecer en algún aspecto.
- Esta es su primera película como protagonista ¿Cómo ve usted al cine argentino?
Yo creo que lo más importante es que se le pueda dar lugar al cine y a la proyección para que haya trabajo. En Argentina hay un nivel, tanto en el área de producción, dirección y arte, como en actores y actrices, muy bueno, y siempre está bien que haya la posibilidad de poder trabajar y que haya mucha oferta para que la gran cantidad de actores y actrices que tenemos pueda tener trabajo. Me gusta mucho el cine argentino, pero pienso que lo más importante son las políticas para que se pueda realizar cine, y tener una identidad y una soberanía en el cine me parece muy importante.
- ¿Que sintió al obtener el premio al mejor actor en Huelva?
Bueno, un sueño realmente, disfruté todo mucho, empezando por viajar a España y presentar mundialmente por primera vez la película. Yo había visto alguna versión más antigua pero no la última, y la vi en Huelva. Que pudiéramos presentar la película en España y que haya posibilidades de que la vean fuera ya era un premio. Me daba por satisfecho porque la vea la gente y le guste y se sienta identificada, con eso ya era suficiente, pero además resultar premiado fue increíble.
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- ¿Cómo es Zabo, su personaje en esta película?
Mi personaje es el protagonista, que cuenta y narra la historia. La película es una adaptación de una novela escrita por Nicolás Zamorano, es una novela autorreferencial. Se trata de un joven de unos 16 años que, en el contexto de la Argentina, Buenos Aires, de 2004, empieza a escribir acerca de lo que es su mundo, sus intereses, sus amigos, sus preguntas y demás. Es el personaje que cuenta la historia. A lo largo de la película hay una voz en off, que hace referencia a lo que mi personaje escribe en su ordenador. Lo que va contando es lo que le pasa a él en su interior, y lo comparamos con lo que él muestra hacia fuera. Entonces está ese diálogo entre lo que le pasa con sus amigos en Buenos Aires, y lo que realmente les dice a sus amigos que le pasa.
- No debe ser habitual para usted interpretar a alguien que existe ¿Cuál fue su relación personal con el autor de la novela?
La verdad que desde un primer momento tuvimos una buena relación. Yo durante un tiempo tenía la duda de si debía interpretar cómo era él, o si tenía que construir algo totalmente nuevo por mi parte. Y creo que hice un poco de las dos cosas, porque la película tiene un guion y una trama que está muy buena para ser interpretada y que se parece mucho a cómo es él en la vida real. Entonces yo creo que tomé un poco lo que yo vi de él y aproveché para construir el personaje.
- A lo largo de la preparación de su papel ¿Habló en algún momento con él, le preguntó o consultó algo?
Sí, yo quería tener la libertad de interpretar lo que yo pensaba que era el personaje, pero sí que hemos tenido charlas. La película es muy autorreferencial, él habla en primera persona a cerca de lo que le pasa en su infancia, entonces si hemos tenido algunas conversaciones acerca de cómo se sintió él en algún aspecto. Pero después, más allá de eso, yo tuve mi trabajo con el director para tratar de contar la historia de lo que nosotros queremos contar. Si bien la película está basada en la novela, se trataba de hacer algo nuevo. Entonces era un poco el trabajo de saber qué era lo que le ocurría a él, pero al mismo tiempo tener la libertad de poder seguir la línea de la película.
- ¿Cree que han cambiado mucho los adolescentes de la época de la película a los de hoy?
Pienso que hay algunas cosas que cambiaron. Naturalmente, la película está ubicada entre 2004-2005 y bueno, de 2004 hasta ahora han cambiado muchas cosas en todos los sentidos: la forma de comunicarnos, las redes sociales, la tecnología, los vínculos. Todo ha cambiado bastante. Pero sin embargo yo creo que hay algo que tiene la adolescencia que lo comparten todas las generaciones. Cada generación, del modo que sea, comparte el hecho de empezar a conocerse a uno mismo, de encontrar respuestas en algunas dudas que uno tiene en el tránsito de esa edad, la diversión, los amigos, salir a conocer el mundo y las calles. De todo esto tiene mucho la película y creo que se puede sentir muy reflejado tanto un adolescente actual, como cualquier generación que ha sido joven y que comparte esas cosas en común.
- ¿Cómo llegó usted al proyecto?
Yo recibí un email para hacer el casting de la película, y es algo muy extraño lo que pasó, porque yo leí la gacetilla y la historia, pero yo en ese momento estaba previsto para hacer otro personaje. No me di cuenta, pero leí la película para hacer el personaje principal, el de Zabo, y en el día del casting antes de ir, fui a revisar el email y en ese momento ví que me habían llamado para el otro personaje. Cuando llegué, le dije al director: "Mira, yo te voy a decir la verdad, no es por agrandado ni por nada, pero yo leí la historia y me imaginaba interpretando a este personaje". Él me contestó que realizase el casting de los dos, y al final terminó resultando lo de Zabo y aquí estamos...
- ¿En qué se parece y se diferencia el personaje de usted?
Creo que hay algo que tiene el personaje que mucha gente se puede sentir identificada. Tiene problema para comunicar qué es lo que le pasa, y yo creo que en algún aspecto me puedo ver identificado en ese sentido, y al mismo tiempo no, porque uno siempre necesita tener a sus familiares o a sus amigos para poder expresarse y ser libre, y en ese sentido digamos que no tenemos el mismo final. Pero después hay muchas cosas que te digo que me han salido naturales porque yo también las comparto, esto de tener hambre de conocer el mundo, de disfrutar y hay algo que tiene el personaje que, en el lugar en el que está él tiene que ser el protagonista, quiere que le miren, y yo creo que ahí también nos podemos parecer en algún aspecto.
- Esta es su primera película como protagonista ¿Cómo ve usted al cine argentino?
Yo creo que lo más importante es que se le pueda dar lugar al cine y a la proyección para que haya trabajo. En Argentina hay un nivel, tanto en el área de producción, dirección y arte, como en actores y actrices, muy bueno, y siempre está bien que haya la posibilidad de poder trabajar y que haya mucha oferta para que la gran cantidad de actores y actrices que tenemos pueda tener trabajo. Me gusta mucho el cine argentino, pero pienso que lo más importante son las políticas para que se pueda realizar cine, y tener una identidad y una soberanía en el cine me parece muy importante.
- ¿Que sintió al obtener el premio al mejor actor en Huelva?
Bueno, un sueño realmente, disfruté todo mucho, empezando por viajar a España y presentar mundialmente por primera vez la película. Yo había visto alguna versión más antigua pero no la última, y la vi en Huelva. Que pudiéramos presentar la película en España y que haya posibilidades de que la vean fuera ya era un premio. Me daba por satisfecho porque la vea la gente y le guste y se sienta identificada, con eso ya era suficiente, pero además resultar premiado fue increíble.
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