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Bajo las luces del salón de baile del hotel Beverly Wilshire, la ceremonia de los 40 Premios Imagen transcurrió el pasado fin de semana con un ritmo discreto, lejos del bullicio de los grandes galardones televisados. El acto, que reconoce las contribuciones latinas en el entretenimiento, entregó sus distinciones en veintisiete categorías, tejiendo una narrativa sobre un año de logros diversos y, a menudo, alejados del foco principal de la industria. Sofía Carson, Liza Colón, Manuel Garcia-Rulfo, Barbie Ferreira, John Leguízamo, Benjamín Bratt o Sasha Calle fueron algunos de los intérpretes agraciados.

Casi un año después de su estreno mundial en el Festival de Toronto, "Eden", el último trabajo del director Ron Howard, en cuyo elenco figuran la cubana Ana de Armas y el español Daniel Brühl, recaudó aproximadamente un millón de dólares en su primer fin de semana norteamericano, proyectándose en 664 pantallas. La cifra confirma el complicado viaje que ha tenido esta producción, valorada en 55 millones de dólares, desde su concepción hasta su llegada a la taquilla.

La actriz de origen hondureño América Ferrera se sumerge una vez más en el mundo de la animación. La californiana forma parte del elenco de voces de la versión en inglés de "Arco", la película de animación francesa que la distribuidora Neon lanzará en EEUU con voluntad de que sea candidata en los Oscars. Ferrera se une a un estelar reparto que incluye a Will Ferrell, Natalie Portman, Mark Ruffalo, Andy Samberg y Flea, bajista de Red Hot Chili Peppers.

La plataforma de votación para los Premios Soto de la Academia Venezolana de Cine recibirá este fin de semana los últimos votos antes del cierre definitivo, el próximo 25 de agosto. Es la etapa final de un proceso que reconocerá lo más destacado de la producción cinematográfica nacional en su sexta edición.

La directora croata Hana Jušić no olvida el instante en que vio a Manuela Martelli por primera vez. Fue en un cortometraje italiano llamado "Valparaiso", dirigido por Carlo Sironi. Ahí estaba la semilla de lo que después sería "God Will Not Help" (Dios no ayudará), su segundo largometraje, una coproducción europea que ha recorrido los festivales de Locarno y Sarajevo. La cineasta no dudó: la protagonista de su drama de pastores en los Balcanes a principios del siglo XX debía ser esa actriz chilena.