Crítica: "La búsqueda de Martina", Mercedes Morán en un papel conmovedor por la memoria
- por © EscribiendoCine-NOTICINE.com
Por Denise Pieniazek
El largometraje argentino “La búsqueda de Martina” narra la historia de una “Madre y abuela de Plaza de Mayo” en busca de su nieto, mientras se ve afectada por el advenimiento de una enfermedad.
"La búsqueda de Martina / A Procura de Martina" (2024) es una película de la directora brasileña Márcia Faria, quien escribió el guión junto a Gabriela Amaral Almeida y tiene como protagonista a Martina, una mujer mayor que hace más de treinta años busca a su nieto nacido en cautiverio durante la dictadura militar argentina (1976-1983). Dicho largometraje fue premiado como Mejor Película Internacional en el 39 Festival Internacional de Cine de Mar del Plata.
Interpretada por la siempre convincente Mercedes Morán, quien realiza un sobresaliente trabajo respecto a la acción interna del personaje, Martina es una mujer mayor que vive sola y tiene la compañía de sus amigas personificadas por Adriana Aizenberg (a quien conoce desde la niñez) y Cristina Banegas (compañera de “Madres y Abuelas de Plaza de Mayo”). A Martina solo la mantiene en pie la esperanza de algún día encontrar a su nieto, más ahora que recibe un diagnóstico de Alzheimer a la par que aparece la posibilidad de encontrar a su presunto nieto en Brasil.
A partir de allí, Martina emprende un viaje arriesgándolo todo, con tal de por fin encontrar al último integrante de su familia. El film, rodado en Río de Janeiro, reflexiona profundamente sobre varias cuestiones como la memoria, los terribles traumas que ha dejado la dictadura militar, la pérdida, la vejez, la enfermedad y la proximidad a la muerte. Todo ello, con gran sensibilidad sin caer en “golpes bajos” o planos truculentos. En palabras de su directora, hay un interés por una “mirada directa sobre lo cotidiano, su convivencia con el silencio y su equilibrio natural entre drama y humor. Esa forma de narrar, que confía en la fuerza de lo no dicho, siempre me ha interpelado”.
Ese equilibrio entre una atmósfera sensorial y la magnífica expresión de la acción interna del personaje compuesto por morán, logran esbozar la realidad de una mujer que es frágil y vulnerable pero también posee una fortaleza enorme. Asimismo, a través de un relato fragmentario donde las piezas se van uniendo de forma magistral y donde la información va llegando al espectador por acumulación, se produce una unión entre forma y contenido, entre el cómo se cuenta y qué se cuenta. Mediante los vaivenes y fragmentos el espectador logra reconstruir la mentalidad y la persistencia de la memoria de Martina y su búsqueda por la verdad y sus lazos de sangre. Esa tenacidad del personaje con un final que resignifica todo lo visto anteriormente, producen esa justicia poética, que a veces lamentablemente no es posible en el orden de lo real.
Por último, "La búsqueda de Martina" se suma a los recientes largometrajes brasileños "Aún estoy aquí / Ainda estou aquí" (2024) y "O Agente Secreto" (2025), que realizan en cierto modo una revisión histórica del duro periodo de las dictaduras militares en Latinoamérica. Tanto Eunice, la protagonista de "Aún estoy aquí", como Martina están marcadas por el trauma y la pérdida y realizan un ejercicio constante de la memoria. Martina emprende un viaje mental en el que el pasado y el presente se entrelazan y difunden, luchando constantemente contra el olvido y el paso del tiempo.
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El largometraje argentino “La búsqueda de Martina” narra la historia de una “Madre y abuela de Plaza de Mayo” en busca de su nieto, mientras se ve afectada por el advenimiento de una enfermedad.
"La búsqueda de Martina / A Procura de Martina" (2024) es una película de la directora brasileña Márcia Faria, quien escribió el guión junto a Gabriela Amaral Almeida y tiene como protagonista a Martina, una mujer mayor que hace más de treinta años busca a su nieto nacido en cautiverio durante la dictadura militar argentina (1976-1983). Dicho largometraje fue premiado como Mejor Película Internacional en el 39 Festival Internacional de Cine de Mar del Plata.
Interpretada por la siempre convincente Mercedes Morán, quien realiza un sobresaliente trabajo respecto a la acción interna del personaje, Martina es una mujer mayor que vive sola y tiene la compañía de sus amigas personificadas por Adriana Aizenberg (a quien conoce desde la niñez) y Cristina Banegas (compañera de “Madres y Abuelas de Plaza de Mayo”). A Martina solo la mantiene en pie la esperanza de algún día encontrar a su nieto, más ahora que recibe un diagnóstico de Alzheimer a la par que aparece la posibilidad de encontrar a su presunto nieto en Brasil.
A partir de allí, Martina emprende un viaje arriesgándolo todo, con tal de por fin encontrar al último integrante de su familia. El film, rodado en Río de Janeiro, reflexiona profundamente sobre varias cuestiones como la memoria, los terribles traumas que ha dejado la dictadura militar, la pérdida, la vejez, la enfermedad y la proximidad a la muerte. Todo ello, con gran sensibilidad sin caer en “golpes bajos” o planos truculentos. En palabras de su directora, hay un interés por una “mirada directa sobre lo cotidiano, su convivencia con el silencio y su equilibrio natural entre drama y humor. Esa forma de narrar, que confía en la fuerza de lo no dicho, siempre me ha interpelado”.
Ese equilibrio entre una atmósfera sensorial y la magnífica expresión de la acción interna del personaje compuesto por morán, logran esbozar la realidad de una mujer que es frágil y vulnerable pero también posee una fortaleza enorme. Asimismo, a través de un relato fragmentario donde las piezas se van uniendo de forma magistral y donde la información va llegando al espectador por acumulación, se produce una unión entre forma y contenido, entre el cómo se cuenta y qué se cuenta. Mediante los vaivenes y fragmentos el espectador logra reconstruir la mentalidad y la persistencia de la memoria de Martina y su búsqueda por la verdad y sus lazos de sangre. Esa tenacidad del personaje con un final que resignifica todo lo visto anteriormente, producen esa justicia poética, que a veces lamentablemente no es posible en el orden de lo real.
Por último, "La búsqueda de Martina" se suma a los recientes largometrajes brasileños "Aún estoy aquí / Ainda estou aquí" (2024) y "O Agente Secreto" (2025), que realizan en cierto modo una revisión histórica del duro periodo de las dictaduras militares en Latinoamérica. Tanto Eunice, la protagonista de "Aún estoy aquí", como Martina están marcadas por el trauma y la pérdida y realizan un ejercicio constante de la memoria. Martina emprende un viaje mental en el que el pasado y el presente se entrelazan y difunden, luchando constantemente contra el olvido y el paso del tiempo.
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