Crónicas
Robert Rodríguez: "Mi secreto es hacer películas baratas que dan dinero"
3-VII-01
Robert Rodríguez, que filma ahora mismo en el país de sus antepasados "Once upon a time in México", con un espectacular reparto que incluye a Antonio Banderas, Salma Hayek, Johnny Depp y Willem Dafoe, ha contado cuál es el secreto de su libertad: "Mis películas cuestan poco y recaudan mucho. No hay otro misterio", ha dicho en declaraciones recogidas por la agencia DPA.
Tras haber filmado en San Miguel de Allende, Rodríguez se ha trasladado con su equipo a Guanajuato, en donde utilizarán el edificio del Congreso del Estado. El pasado fin de semana, el cineasta texano aprovecho la pausa para pre-estrenar su anterior realización, "Spy kids" ("Miniespías" se llamará en México), algunos de cuyos efectos especiales hizo el propio realizador en el garaje de su casa.
Esta comedia de acción para toda la familia, que también protagoniza Banderas, ejemplifica según Rodríguez, el control que puede tener sobre sus películas frente a los estudios: "El precio que pagan por las imágenes que reciben de mis películas es muy bajo, por eso la industria no dice nada y me deja filmar tranquilo". "Spy kids" costó 30 millones de dólares y sólo en las salas USA ya ha recaudado más del triple.
A pesar de haber alcanzado con cintas violentas o de terror, como "Desperado" y "Abierto hasta el amanecer", Robert Rodríguez confiesa que deseaba hacer un film infantil como "Spy kids": "Formo parte de una familia de diez hijos, mis padres todavía están juntos y yo mismo tengo tres niños y espero poder tener muchos más, por eso quería rodar un film familiar".
Por otra parte, y a pesar de que el tema de "Once upon a time in México" es el de un intento de golpe de estado por parte de tres aventureros, el coordinador de la fracción del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el Congreso de Guanajuato, Francisco Arroyo, justificó a Notimex el prestamo del edificio legislativo en que la cinta de Rodríguez "representa una importante promoción para los prestadores de servicios turísticos".
Robert Rodríguez, que filma ahora mismo en el país de sus antepasados "Once upon a time in México", con un espectacular reparto que incluye a Antonio Banderas, Salma Hayek, Johnny Depp y Willem Dafoe, ha contado cuál es el secreto de su libertad: "Mis películas cuestan poco y recaudan mucho. No hay otro misterio", ha dicho en declaraciones recogidas por la agencia DPA.
Tras haber filmado en San Miguel de Allende, Rodríguez se ha trasladado con su equipo a Guanajuato, en donde utilizarán el edificio del Congreso del Estado. El pasado fin de semana, el cineasta texano aprovecho la pausa para pre-estrenar su anterior realización, "Spy kids" ("Miniespías" se llamará en México), algunos de cuyos efectos especiales hizo el propio realizador en el garaje de su casa.
Esta comedia de acción para toda la familia, que también protagoniza Banderas, ejemplifica según Rodríguez, el control que puede tener sobre sus películas frente a los estudios: "El precio que pagan por las imágenes que reciben de mis películas es muy bajo, por eso la industria no dice nada y me deja filmar tranquilo". "Spy kids" costó 30 millones de dólares y sólo en las salas USA ya ha recaudado más del triple.
A pesar de haber alcanzado con cintas violentas o de terror, como "Desperado" y "Abierto hasta el amanecer", Robert Rodríguez confiesa que deseaba hacer un film infantil como "Spy kids": "Formo parte de una familia de diez hijos, mis padres todavía están juntos y yo mismo tengo tres niños y espero poder tener muchos más, por eso quería rodar un film familiar".
Por otra parte, y a pesar de que el tema de "Once upon a time in México" es el de un intento de golpe de estado por parte de tres aventureros, el coordinador de la fracción del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el Congreso de Guanajuato, Francisco Arroyo, justificó a Notimex el prestamo del edificio legislativo en que la cinta de Rodríguez "representa una importante promoción para los prestadores de servicios turísticos".
- © Corresponsal-NOTICINE.com
Antonio Banderas negocia interpretar a Emiliano Zapata
2-VII-01
El actor español Antonio Banderas, que prosigue en México el rodaje de "Once upon a time in México", de Robert Rodríguez, está negociando incorporar al líder revolucionario Emiliano Zapata en una película que proyecta Gregory Nava ("Selena"), según él mismo ha contado a la prensa azteca. Para el malagueño, este papel significaría hacer realidad un sueño. "Me encanta la idea, ya que me identifico mucho con él en términos políticos. Soy también un hombre de izquierdas, y he defendido al partido socialista español en varias ocasiones", asegura.
Banderas, que se despidió de los habitantes de la localidad de San Miguel de Allende proyectando gratuitamente en el zócalo de la ciudad su película "Spy Kids", también dirigida por Rodríguez, explicó a los periodistas sus diferencias respecto de Zapata: "Pese a que tengo un cierto parecido con él, lo que si marca una gran diferencia son los valores que el poseía y la enorme fuerza para luchar. Yo bastante tengo con luchar por mí mismo. El era un hombre de pueblo".
El astro malagueño afincado en Hollywood comentó que le gustaría volver a México para esta vez rodar con algún director local. Confesó admirar el cine de Arturo Ripstein y que en sus próximas vacaciones se llevará una película mexicana que le había impresionado: "En los últimos tiempos las producciones mexicanas han causado mucho revuelo, eso quiere decir que las cosas se están haciendo bien. Cuando vaya de vacaciones a Puerto Vallarta me llevaré en el equipaje "Amores perros" porque me ha despertado gran inquietud".
En su encuentro con la prensa, Banderas fue interrogado sobre su compatriota Penélope Cruz, de la que dijo que estaba trabajando muy duro en EEUU: "Ha encontrado películas buenas o malas como suele sucedernos a todos, pero tiene que entender que eso es solo durante los primeros cinco años, ya que después te ofrecen cosas mejores". El actor español negó que Cruz le hubiera pedido algún consejo. "No lo ha hecho, además de que yo no le doy consejos a nadie. Es más fácil que en un futuro ella me los tenga que dar a mi", comentó.
El actor español Antonio Banderas, que prosigue en México el rodaje de "Once upon a time in México", de Robert Rodríguez, está negociando incorporar al líder revolucionario Emiliano Zapata en una película que proyecta Gregory Nava ("Selena"), según él mismo ha contado a la prensa azteca. Para el malagueño, este papel significaría hacer realidad un sueño. "Me encanta la idea, ya que me identifico mucho con él en términos políticos. Soy también un hombre de izquierdas, y he defendido al partido socialista español en varias ocasiones", asegura.
Banderas, que se despidió de los habitantes de la localidad de San Miguel de Allende proyectando gratuitamente en el zócalo de la ciudad su película "Spy Kids", también dirigida por Rodríguez, explicó a los periodistas sus diferencias respecto de Zapata: "Pese a que tengo un cierto parecido con él, lo que si marca una gran diferencia son los valores que el poseía y la enorme fuerza para luchar. Yo bastante tengo con luchar por mí mismo. El era un hombre de pueblo".
El astro malagueño afincado en Hollywood comentó que le gustaría volver a México para esta vez rodar con algún director local. Confesó admirar el cine de Arturo Ripstein y que en sus próximas vacaciones se llevará una película mexicana que le había impresionado: "En los últimos tiempos las producciones mexicanas han causado mucho revuelo, eso quiere decir que las cosas se están haciendo bien. Cuando vaya de vacaciones a Puerto Vallarta me llevaré en el equipaje "Amores perros" porque me ha despertado gran inquietud".
En su encuentro con la prensa, Banderas fue interrogado sobre su compatriota Penélope Cruz, de la que dijo que estaba trabajando muy duro en EEUU: "Ha encontrado películas buenas o malas como suele sucedernos a todos, pero tiene que entender que eso es solo durante los primeros cinco años, ya que después te ofrecen cosas mejores". El actor español negó que Cruz le hubiera pedido algún consejo. "No lo ha hecho, además de que yo no le doy consejos a nadie. Es más fácil que en un futuro ella me los tenga que dar a mi", comentó.
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Gabriela Mistral: Película chileno-mexicana reaviva la polémica sobre su lesbianismo
29-VI-01
"La pasajera" es el título de la película que piensa dirigir el artista chileno residente en México Francisco Casas, ex componente con Pedro Lemebel del dúo Las Yeguas del Apocalipsis, y cuyo tema será la homosexualidad de la premio Nobel chilena Gabriela Mistral. El proyecto ha reavivado la polémica en el país andino, donde escritores y expertos discuten sobre esa característica de la personalidad de la escritora.
Doris Dana fue la última secretaria de Mistral, y su albacea. Hace tres años contó sobre su relación con la autora: "A veces ella era como mi madre y otras yo era la suya. También en otras ocasiones éramos como hermanas".
Casas, reconocido homosexual él mismo, cree por contra que la familiaridad pasó por el sexo: "Doris dice que no fue su pareja, pero en la entrevista está borracha, borracha, borracha. Ella fue su amor en los últimos tiempos. Lo real es que la Gabriela Mistral era total y completamente lesbiana y que hablaba y escribía desde ahí". Casas añade que la poeta chilena frecuentaba bares gays de Estados Unidos.
El diario de Santiago La Tercera consulta al respecto a varios expertos este viernes. El profesor y crítico Luis Vargas Saavedra, especialista en Mistral, cree que las presunciones "se estrellan contra el hecho de que no existen pruebas. Yo me inclino a pensar que era bisexual, pero no tengo evidencia para respaldarlo. Lo único que podría hacernos pensar en ello, hasta cierto punto, es que siempre tuvo secretarias y viajaba con ellas a todas partes".
Vargas Saavedra considera que quienes más insisten sobre la homosexualidad de la premio Nobel son precisamente "gays" y feministas, "que buscan en ella un ejemplo de libertad o enmascaramiento. Están haciendo lo posible por encontrar señas en su vida, ya que el tema no está en su obra".
"La pasajera" es el título de la película que piensa dirigir el artista chileno residente en México Francisco Casas, ex componente con Pedro Lemebel del dúo Las Yeguas del Apocalipsis, y cuyo tema será la homosexualidad de la premio Nobel chilena Gabriela Mistral. El proyecto ha reavivado la polémica en el país andino, donde escritores y expertos discuten sobre esa característica de la personalidad de la escritora.
Doris Dana fue la última secretaria de Mistral, y su albacea. Hace tres años contó sobre su relación con la autora: "A veces ella era como mi madre y otras yo era la suya. También en otras ocasiones éramos como hermanas".
Casas, reconocido homosexual él mismo, cree por contra que la familiaridad pasó por el sexo: "Doris dice que no fue su pareja, pero en la entrevista está borracha, borracha, borracha. Ella fue su amor en los últimos tiempos. Lo real es que la Gabriela Mistral era total y completamente lesbiana y que hablaba y escribía desde ahí". Casas añade que la poeta chilena frecuentaba bares gays de Estados Unidos.
El diario de Santiago La Tercera consulta al respecto a varios expertos este viernes. El profesor y crítico Luis Vargas Saavedra, especialista en Mistral, cree que las presunciones "se estrellan contra el hecho de que no existen pruebas. Yo me inclino a pensar que era bisexual, pero no tengo evidencia para respaldarlo. Lo único que podría hacernos pensar en ello, hasta cierto punto, es que siempre tuvo secretarias y viajaba con ellas a todas partes".
Vargas Saavedra considera que quienes más insisten sobre la homosexualidad de la premio Nobel son precisamente "gays" y feministas, "que buscan en ella un ejemplo de libertad o enmascaramiento. Están haciendo lo posible por encontrar señas en su vida, ya que el tema no está en su obra".
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Eliseo Subiela: "El cine realista que se ve es muy pobre"
29-VI-01
Eliseo Subiela, uno de los cineastas argentinos más conocido internacionalmente, estrenará el próximo día 5 en su país "El lado oscuro del corazón II", una década después del lanzamiento de la película original. Darío Grandinetti, Sandra Ballesteros y Nacha Guevara repiten, pero ahora es la catalana Ariadna Gil (se trata de una coproducción con España rodada en Barcelona y Buenos Aires) quien ocupa el principal protagonismo femenino. En entrevista publicada este viernes por el diario La Nación, Subiela asume que su cine poético "no está de moda ahora".
Sin embargo, el autor de "Las aventuras de Dios" (que pese a ser su anterior película se estrenará después en Argentina), se defiende atacando: "Creo que el cine realista que se ve es muy pobre. A mí me gustan las imágenes que genero porque tienen que ver con los sueños, con lo fantástico, porque en la vida el realismo está afuera, en la televisión. Sin que signifique escapismo, yo aspiro a llegar a la conciencia de la gente mediante el sueño y la emoción. Picasso dijo: "Si tenés una vaca y pintás una vaca, lo único que tenés es otra vaca".
Esta segunda parte muestra al mismo protagonista, Oliveiro, algo más maduro, pero sin olvidar su objetivo vital: encontrar a la mujer ideal. "Sigue siendo un soñador -dice Subiela- que cree en la poesía como forma de vida y sigue buscando la mujer que sea capaz de volar. Después de Ana no ha vuelto a volar con ninguna. En realidad, empieza a asustarse con el paso del tiempo, entonces sale a buscar a su viejo amor en Barcelona, que es adonde viaja Ana al final de la primera, y allí encuentra a una señora empleada y a una equilibrista de circo. ¡Qué curioso! Diez años atrás no sabía la importancia que iba a tener esa ciudad en donde terminando "No te mueras sin decirme a dónde vas" tuve un infarto y casi me muero. En la historia, el viaje también alude a esta supuesta necesidad argentina de buscar la felicidad en otro lado".
Para terminar, en sus declaraciones a La Nación, Eliseo Subiela asume sus contradicciones. "Mi cine te puede gustar o no, pero nadie puede negar que soy honesto conmigo. A pesar de las dificultades para hacer cine acá, nunca hice una película de tiros para levantar una hipoteca. Se me tildó de menemista por un proyecto que el ex presidente apoyó cuando en su mandato se me negó un crédito. Todas mis películas podrían ser una sola. Sé que movilizo a mucha gente y que se me ha tildado de cursi por considerarme un mensajero del amor. Pero cada vez estoy más atento a mi coherencia más allá de lo que opinen los críticos. Me importa la boletería para poder seguir haciendo cine. Y la respuesta de la gente me preocupa, pero no como para traicionarme", afirma.
Eliseo Subiela, uno de los cineastas argentinos más conocido internacionalmente, estrenará el próximo día 5 en su país "El lado oscuro del corazón II", una década después del lanzamiento de la película original. Darío Grandinetti, Sandra Ballesteros y Nacha Guevara repiten, pero ahora es la catalana Ariadna Gil (se trata de una coproducción con España rodada en Barcelona y Buenos Aires) quien ocupa el principal protagonismo femenino. En entrevista publicada este viernes por el diario La Nación, Subiela asume que su cine poético "no está de moda ahora".
Sin embargo, el autor de "Las aventuras de Dios" (que pese a ser su anterior película se estrenará después en Argentina), se defiende atacando: "Creo que el cine realista que se ve es muy pobre. A mí me gustan las imágenes que genero porque tienen que ver con los sueños, con lo fantástico, porque en la vida el realismo está afuera, en la televisión. Sin que signifique escapismo, yo aspiro a llegar a la conciencia de la gente mediante el sueño y la emoción. Picasso dijo: "Si tenés una vaca y pintás una vaca, lo único que tenés es otra vaca".
Esta segunda parte muestra al mismo protagonista, Oliveiro, algo más maduro, pero sin olvidar su objetivo vital: encontrar a la mujer ideal. "Sigue siendo un soñador -dice Subiela- que cree en la poesía como forma de vida y sigue buscando la mujer que sea capaz de volar. Después de Ana no ha vuelto a volar con ninguna. En realidad, empieza a asustarse con el paso del tiempo, entonces sale a buscar a su viejo amor en Barcelona, que es adonde viaja Ana al final de la primera, y allí encuentra a una señora empleada y a una equilibrista de circo. ¡Qué curioso! Diez años atrás no sabía la importancia que iba a tener esa ciudad en donde terminando "No te mueras sin decirme a dónde vas" tuve un infarto y casi me muero. En la historia, el viaje también alude a esta supuesta necesidad argentina de buscar la felicidad en otro lado".
Para terminar, en sus declaraciones a La Nación, Eliseo Subiela asume sus contradicciones. "Mi cine te puede gustar o no, pero nadie puede negar que soy honesto conmigo. A pesar de las dificultades para hacer cine acá, nunca hice una película de tiros para levantar una hipoteca. Se me tildó de menemista por un proyecto que el ex presidente apoyó cuando en su mandato se me negó un crédito. Todas mis películas podrían ser una sola. Sé que movilizo a mucha gente y que se me ha tildado de cursi por considerarme un mensajero del amor. Pero cada vez estoy más atento a mi coherencia más allá de lo que opinen los críticos. Me importa la boletería para poder seguir haciendo cine. Y la respuesta de la gente me preocupa, pero no como para traicionarme", afirma.
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"La libertad": todo en un día de hachero
28-VI-01
Los nuevos realizadores argentinos continúan acumulando estrenos en la cartelera nacional, luego de conocerse "Sólo por Hoy", de Ariel Rotter y "Rosarigasinos", de Rodrigo Grande, por nombrar a los filmes más recientes, este jueves 28 de junio se estrena "La libertad", opera prima de Lisandro Alonso, que formó parte de la selección de la última edición del Festival de Cannes en la sección Un certain regard y que describe un día en la vida de un hachero pampeano.
Fue viendo trabajar en la tala de árboles a Misael Saavedra en el campo de su padre (Hugo Alonso, también productor de la película) que Alonso encontró el tema indicado para desarrollar "La libertad", "a Misael lo veía seguido en la Pampa y me parecía que su forma de vida, aislado en el campo, reflejaba como puede sentirse una persona en la ciudad", explica Alonso acerca de la característica que lo motivó a contar esa rutina diaria que el mismo Misael debió reflejar en la película, aunque, claro, no sea un actor profesional, sino un hachero profesional.
Siendo Misael quien representa en un largometraje su propia vida, entonces se podría decir que "La libertad" es básicamente un documental, una consideración que Alonso se encarga de desestimar: "El actor siempre está delimitado por los bordes del cuadro, por sus marcas y las instrucciones de la puesta en escena. Si la película fuera un documental la cámara estaría a disposición de Misael; siendo una ficción, es Misael el que está a disposición de la cámara. Por eso yo creo que es una ficción".
Centrar toda la película en un monótono día fue una elección que Alonso buscó desde el primer momento: "Elegí no mostrar hechos extraordinarios o espectaculares que pasan cada dos, tres o cinco años en la vida de alguien, como tener un hijo, un accidente grave o algo inesperado. Uno vive la mitad de su vida en una rutina que nadie nota. Quise registrar esos momentos mínimos para al verlos uno pudiera pensar qué está haciendo con su propia vida. La película no intenta reflejar simplemente las experiencias de Misael, sino relacionar su vida con otras experiencias, la de los espectadores y la mía, que soy alguien que vive una vida completamente diferente, en la ciudad".
"La libertad" expone unas rutinarias horas en la vida de Misael, ni más ni menos que eso, y está en la lectura que haga individualmente cada espectador lo que determine el verdadero significado del filme, y así lo afirma Alonso: "Es una película que tiene que terminar el espectador. Si no se completa con el espectador, si no logra insertarse, no llega a descifrar cosas, acciones, movimientos, formas de pensar el mundo, no llega a ser una película. En cambio sí lo es cuando el espectador se mete e intenta interrelacionarse".
Los nuevos realizadores argentinos continúan acumulando estrenos en la cartelera nacional, luego de conocerse "Sólo por Hoy", de Ariel Rotter y "Rosarigasinos", de Rodrigo Grande, por nombrar a los filmes más recientes, este jueves 28 de junio se estrena "La libertad", opera prima de Lisandro Alonso, que formó parte de la selección de la última edición del Festival de Cannes en la sección Un certain regard y que describe un día en la vida de un hachero pampeano.
Fue viendo trabajar en la tala de árboles a Misael Saavedra en el campo de su padre (Hugo Alonso, también productor de la película) que Alonso encontró el tema indicado para desarrollar "La libertad", "a Misael lo veía seguido en la Pampa y me parecía que su forma de vida, aislado en el campo, reflejaba como puede sentirse una persona en la ciudad", explica Alonso acerca de la característica que lo motivó a contar esa rutina diaria que el mismo Misael debió reflejar en la película, aunque, claro, no sea un actor profesional, sino un hachero profesional.
Siendo Misael quien representa en un largometraje su propia vida, entonces se podría decir que "La libertad" es básicamente un documental, una consideración que Alonso se encarga de desestimar: "El actor siempre está delimitado por los bordes del cuadro, por sus marcas y las instrucciones de la puesta en escena. Si la película fuera un documental la cámara estaría a disposición de Misael; siendo una ficción, es Misael el que está a disposición de la cámara. Por eso yo creo que es una ficción".
Centrar toda la película en un monótono día fue una elección que Alonso buscó desde el primer momento: "Elegí no mostrar hechos extraordinarios o espectaculares que pasan cada dos, tres o cinco años en la vida de alguien, como tener un hijo, un accidente grave o algo inesperado. Uno vive la mitad de su vida en una rutina que nadie nota. Quise registrar esos momentos mínimos para al verlos uno pudiera pensar qué está haciendo con su propia vida. La película no intenta reflejar simplemente las experiencias de Misael, sino relacionar su vida con otras experiencias, la de los espectadores y la mía, que soy alguien que vive una vida completamente diferente, en la ciudad".
"La libertad" expone unas rutinarias horas en la vida de Misael, ni más ni menos que eso, y está en la lectura que haga individualmente cada espectador lo que determine el verdadero significado del filme, y así lo afirma Alonso: "Es una película que tiene que terminar el espectador. Si no se completa con el espectador, si no logra insertarse, no llega a descifrar cosas, acciones, movimientos, formas de pensar el mundo, no llega a ser una película. En cambio sí lo es cuando el espectador se mete e intenta interrelacionarse".
- © Cynthia García (Argentina)-NOTICINE.com