Confiesa Carlos Reygadas su impotencia en terminar su nueva película
- por © J.M.Badillo/Correcámara-NOTICINE.com
La nueva película de Carlos Reygadas es sobre la oscuridad que invade al mundo. El proyecto lleva como título tentativo "Post tenebras lux" (después de las tinieblas la luz), tomado de la frase bíblica que adoptaron los Calvinistas durante la Reforma Protestante en el siglo XVI. En su proceso creativo, el reconocido cineasta mexicano parece encontrarse él mismo aún en terrenos tenebrosos, de los que le está costando mucho salir. El film contó el apoyo del Festival Internacional de Rotterdam y está, dijo el cineasta, a medio hacer. "De hecho he filmado casi la mitad de ella y aún así me siento frustrado, no sé cómo la voy a lograr", cuenta.
No es la primera vez que Reygadas se siente perdido frente a un proyecto. "Siempre me pasa, no sé hacia donde voy", explicó. "Todo me parece escuro e irrelevante, cuando la veo todo como que me parecen puras carpas llenas de lodo", añade. También pasa por un bache creativo y no tiene empacho en reconocer que se siente "absolutamente jodido".
"No tengo nada de inspiración, el hecho de tener hijos y familia como que te quita las ganas de crear", agrega.
La película, explica Reygadas, trata también de sueño, anhelos y personajes que han pasado por su vida, y de la oscuridad, "ojala y que me salga bien", aclara.
"Si hay suficientes elementos para concluir que el mundo actual sí es oscuro, sin duda, no sólo en México, con todas las barbaridades que leemos en los diario todos los día, incluso en lugares apacibles, como Suiza, el mundo es oscuro, creo", precisa.
Con tan sólo tres película de largometraje en su filmografía: "Japón", "Batalla en el cielo" y "Luz silenciosa", además de un par de cortometrajes, Carlos Reygadas es considerado hoy en día como uno de los cineasta más radicales y originales de la nueva generación de cintas mexicano.
En su nueva película, Reygadas aspira, incluso, a ir más allá de la narrativa, trascender el lenguaje mismo.
"Pienso que la narrativa y el tema dramático es una cosa artificiosa y quisiera transmitir algo todavía más puro, más directo, como si pudieras conectarte con el cerebro de alguien más, y ver lo que el siente, ni siquiera lo que él piensa", dice.
Reygadas presentó la pasada semana "El árbol", ópera prima del español Carlos Serrano Azcona, en la Cineteca Nacional, una de las tres salas donde se exhibe en México.
"El árbol" es una coproducción entre México y España, fue filmada con un presupuesto de "dos pesos", en locaciones españolas y con un actor mexicano, el pintor Bosco Sodi, y se estrenó el viernes pasado.
El cineasta lamentó que en España a nadie le interesa estrenar esta película porque "todos quieren ser como Alejandro Amenábar, o sea, los continuadores del cine norteamericano", aclaró.
El director mexicano dijo que produjo "El árbol", primero, porque "es mi amigo", y segundo, "porque cuando alguien es arriesgado y quiere hacer algo personal, eso me interesa", indicó.
"Que bueno que se estrene en nuestro país, la verdad, aunque vayan 500, 600 personas, 1000, eso está muy bien", aclaró. "El árbol" trata sobre la vida de un hombre, un mexicano en Madrid, que se va quedando solo gradualmente, sin dinero, sin mujer y sin hijos, y como única alternativa solamente le resta vagar por las calles sin rumbo fijo.
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No es la primera vez que Reygadas se siente perdido frente a un proyecto. "Siempre me pasa, no sé hacia donde voy", explicó. "Todo me parece escuro e irrelevante, cuando la veo todo como que me parecen puras carpas llenas de lodo", añade. También pasa por un bache creativo y no tiene empacho en reconocer que se siente "absolutamente jodido".
"No tengo nada de inspiración, el hecho de tener hijos y familia como que te quita las ganas de crear", agrega.
La película, explica Reygadas, trata también de sueño, anhelos y personajes que han pasado por su vida, y de la oscuridad, "ojala y que me salga bien", aclara.
"Si hay suficientes elementos para concluir que el mundo actual sí es oscuro, sin duda, no sólo en México, con todas las barbaridades que leemos en los diario todos los día, incluso en lugares apacibles, como Suiza, el mundo es oscuro, creo", precisa.
Con tan sólo tres película de largometraje en su filmografía: "Japón", "Batalla en el cielo" y "Luz silenciosa", además de un par de cortometrajes, Carlos Reygadas es considerado hoy en día como uno de los cineasta más radicales y originales de la nueva generación de cintas mexicano.
En su nueva película, Reygadas aspira, incluso, a ir más allá de la narrativa, trascender el lenguaje mismo.
"Pienso que la narrativa y el tema dramático es una cosa artificiosa y quisiera transmitir algo todavía más puro, más directo, como si pudieras conectarte con el cerebro de alguien más, y ver lo que el siente, ni siquiera lo que él piensa", dice.
Reygadas presentó la pasada semana "El árbol", ópera prima del español Carlos Serrano Azcona, en la Cineteca Nacional, una de las tres salas donde se exhibe en México.
"El árbol" es una coproducción entre México y España, fue filmada con un presupuesto de "dos pesos", en locaciones españolas y con un actor mexicano, el pintor Bosco Sodi, y se estrenó el viernes pasado.
El cineasta lamentó que en España a nadie le interesa estrenar esta película porque "todos quieren ser como Alejandro Amenábar, o sea, los continuadores del cine norteamericano", aclaró.
El director mexicano dijo que produjo "El árbol", primero, porque "es mi amigo", y segundo, "porque cuando alguien es arriesgado y quiere hacer algo personal, eso me interesa", indicó.
"Que bueno que se estrene en nuestro país, la verdad, aunque vayan 500, 600 personas, 1000, eso está muy bien", aclaró. "El árbol" trata sobre la vida de un hombre, un mexicano en Madrid, que se va quedando solo gradualmente, sin dinero, sin mujer y sin hijos, y como única alternativa solamente le resta vagar por las calles sin rumbo fijo.
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