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Este jueves 9 de mayo se ha estrenado en salas colombianas la película "Amalia", segundo film de Ana Sofía Osorio ("Sin Palabras"). "`Amalia´ es mi visión de la maternidad y enfrenta dos versiones distintas de la misma", ha dicho la cineasta, que también ha escrito el guion. En la financiación de la cinta han tenido un importante papel los recursos obtenidos del Fondo para el Desarrollo Cinematográfico, ayuda estatal otorgada gracias a la ley de cine colombiana, además de contar con la producción de la empresa caleña Cine de Amigos y del realizador y productor Alexánder Giraldo ("Destinos", "180 segundos").

El film, rodado en Colombia, cuenta la historia de Cristina, interpretada por Ángela Carrizosa ("Karen llora en un bus"), una mujer que a sus 43 años tiene un embarazo de riesgo que la obliga a permanecer en casa. Cuando se entera de que su hija adolescente, Amalia, encarnada por Vanessa Blandón ("Vikki RPM"), fruto de su primer matrimonio, puede haber sido víctima de una explosión, se enfrentará a su suegra, Helena, a quien da vida la actriz María Cecilia Botero ("La Bruja").
El conflicto de intereses que surge entre ambas está motivado por la segunda, quien desea que Cristina permanezca en cama para asegurar el bienestar de su futuro nieto. Por otro lado, su esposo, Julián, interpretado por Alejandro Aguilar, promete a Cristina que encontrará su hija con vida.

"Lo que se muestra en esta película es el sufrimiento de Cristina, porque su instinto maternal la obliga a salir a buscar a su hija, pero también la obliga a guardar la calma por el hijo que está esperando", explica Osorio.

La película fue estrenada a nivel mundial en la edición 35 del Chicago Latino Film Festival (CLFF), el pasado mes de abril, donde fue bien recibida por la crítica y consiguió el mayor número de espectadores en el festival.

El largometraje es la segunda película producida por la compañía Cine de Amigos, que realizó "Destinos" (2016), dirigida por Giraldo, que también contó con la producción de Osorio y con la interpretación de Aguilar. "Esta película vinculó el trabajo de amigos y compañeros cercanos. En Colombia hacer cine es muy costoso y en el caso de esta cinta la única posibilidad que tuvimos para hacerla fue juntar energías y fuerzas para, casi de modo colaborativo, realizar el proyecto", ha declarado el productor a El Espectador.

La directora ha confesado a La Patria la importancia de la ayuda estatal recibida tras ganar el Fondo para el Desarrollo Cinematográfico el pasado año, destacando que "a modo de financiación y convocatorias Colombia está bien", pero señalando a distribuidores y exhibidores como "cuello de botella", porque "se escudan en que el cine es un negocio". Giraldo también destacó el papel de la ayuda para sacar adelante la película, de la que también ha dicho que "se hizo muy rápido, otra cosa que la hace valiosa y menos costosa. Fueron solo 12 días de rodaje, tiene 73 minutos y está rodada en dos locaciones solamente".

Respecto a la inspiración del film, la colombiana ha destacado dos factores como principales motivadores de la historia. El primero hace referencia a la recurrencia del tema de la maternidad en las mujeres, que es "un tema cotidiano" en la vida de la directora, pese a no ser madre. El segundo, tiene que ver con una circunstancia personal, cuando vivía en Madrid y tuvieron lugar los atentados del 11 de marzo de 2004, que provocaron una situación de pánico en su madre, a la que describe como "extremadamente sobreprotectora", quien llegó a comprar billetes de avión, pese a que Osorio no fue víctima de la masacre. Esta situación llevó a la cineasta a preguntarse "hasta dónde están dispuestas a llegar las mamás por el bienestar de un hijo".


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