"Yo traidor", el thriller político según Rodrigo Fernández Engler y Mariano Martínez
- por © Alba Amestoy-NOTICINE.com
El cineasta Rodrigo Fernández estrena su nuevo trabajo, "Yo traidor", un thriller político protagonizado por el argentino Mariano Martinez. La película llega esta semana a la gran pantalla y cuenta también con las actuaciones de Jorge Marrale, Sergio Surraco, Mercedes Laborde y Arturo Puig, entre otros.
"Yo traidor" sigue a Máximo, un joven y ambicioso abogado que mezcla el beneficio propio con el familiar. A partir de la venta de la empresa que maneja junto a su padre y hermano, monta un negocio que a priori es beneficioso para todos, aunque la mejor tajada es para él mismo. Sin embargo, a medida que se adentra en la interna política del pueblo de pescadores en el que se instala, su situación se empieza a complicar y ve cómo tambalean sus propios principios y los límites de sus valores comienzan a correrse.
En una entrevista concedida a Diario Hoy el director cuenta cómo nació este su último largometraje: "Esta película surge hace muchos años. Yo había perdido a mi papá en 2007, me fui a Europa en 2008 a presentar 'Cartas a Malvinas', mi primera película, y estaba lastimado y triste por la pérdida de mi papá. Yo soy cristiano evangélico, y recuerdo que uno de los últimos días que estuve en Milán, fui a una Iglesia, y se predicó sobre un sermón basado en la Parábola del hijo pródigo, una historia muy sencilla y que a mí me gustó desde muy chiquito. Cuando volví a Córdoba, escribí el guión, muy rápido, en 10 o 15 días".
En una charla con la revista Télam, por su parte, el protagonista Mariano Martínez habla sobre la película, su rol, y muestra su deseo por quedarse en el cine y alejarse de la televisión. "El personaje, pendula entre el amor a la familia y sus ambiciones desmedidas, y esa es la contradicción, digamos. El Padre fue un buen padre, siempre estuvo presente y le hizo sentir que no tuvo nada que ver con la situación familiar. Desde su mirada, no quería traicionar a nadie; él sabe que era un negocio para todo el mundo y que cada uno se liberaba de donde no quería estar. Se fue mintiendo a sí mismo como nos pasa a muchos cuando queremos justificar algunas acciones y todo radica en el dolor que uno puede llevar adentro y que no se hace cargo. Uno no se perdona o no es sincero y todo eso convive en él, hasta que la vida le puso un freno y tuvo esa segunda oportunidad, ese perdón", cuenta el intérprete sobreMáximo.
La película habla de segundas oportunidades y lo más salvaje del neoliberalismo, algo que para Fernández fue sencillo: "Si vos leés la parábola de 'El hijo pródigo' en la Biblia, que es un cuento, esta película es esa misma historia, adaptada, con ciertas licencias, y de manera contemporánea, pero es la historia de un padre con sus dos hijos, uno que pide su parte de la herencia, se va, le va mal y vuelve y el padre lo recibe de manera magnánima. A eso había que darle un contexto, armamos esta familia de empresarios marítimos, pusimos a Máximo en un mundo que él cree que conoce, con personajes siniestros, y así le va", cuenta el director sobre la película.
Cuando el trabajo llegó a oídos de Martinez este se encontraba haciendo trabajo, pero en ningún momento dudó en protagonizar el film de Fernández: "La versión libre esta que hicieron de 'El Hijo Pródigo' me encantaba cuando leí el guión, porque deja un mensaje de perdón y el arrepentimiento que es tan importante, tanto como el amor. A nivel actoral, Máximo está casi la hora y media en pantalla y eso era un desafío. Algo así, para un actor, es un regalo".
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"Yo traidor" sigue a Máximo, un joven y ambicioso abogado que mezcla el beneficio propio con el familiar. A partir de la venta de la empresa que maneja junto a su padre y hermano, monta un negocio que a priori es beneficioso para todos, aunque la mejor tajada es para él mismo. Sin embargo, a medida que se adentra en la interna política del pueblo de pescadores en el que se instala, su situación se empieza a complicar y ve cómo tambalean sus propios principios y los límites de sus valores comienzan a correrse.
En una entrevista concedida a Diario Hoy el director cuenta cómo nació este su último largometraje: "Esta película surge hace muchos años. Yo había perdido a mi papá en 2007, me fui a Europa en 2008 a presentar 'Cartas a Malvinas', mi primera película, y estaba lastimado y triste por la pérdida de mi papá. Yo soy cristiano evangélico, y recuerdo que uno de los últimos días que estuve en Milán, fui a una Iglesia, y se predicó sobre un sermón basado en la Parábola del hijo pródigo, una historia muy sencilla y que a mí me gustó desde muy chiquito. Cuando volví a Córdoba, escribí el guión, muy rápido, en 10 o 15 días".
En una charla con la revista Télam, por su parte, el protagonista Mariano Martínez habla sobre la película, su rol, y muestra su deseo por quedarse en el cine y alejarse de la televisión. "El personaje, pendula entre el amor a la familia y sus ambiciones desmedidas, y esa es la contradicción, digamos. El Padre fue un buen padre, siempre estuvo presente y le hizo sentir que no tuvo nada que ver con la situación familiar. Desde su mirada, no quería traicionar a nadie; él sabe que era un negocio para todo el mundo y que cada uno se liberaba de donde no quería estar. Se fue mintiendo a sí mismo como nos pasa a muchos cuando queremos justificar algunas acciones y todo radica en el dolor que uno puede llevar adentro y que no se hace cargo. Uno no se perdona o no es sincero y todo eso convive en él, hasta que la vida le puso un freno y tuvo esa segunda oportunidad, ese perdón", cuenta el intérprete sobreMáximo.
La película habla de segundas oportunidades y lo más salvaje del neoliberalismo, algo que para Fernández fue sencillo: "Si vos leés la parábola de 'El hijo pródigo' en la Biblia, que es un cuento, esta película es esa misma historia, adaptada, con ciertas licencias, y de manera contemporánea, pero es la historia de un padre con sus dos hijos, uno que pide su parte de la herencia, se va, le va mal y vuelve y el padre lo recibe de manera magnánima. A eso había que darle un contexto, armamos esta familia de empresarios marítimos, pusimos a Máximo en un mundo que él cree que conoce, con personajes siniestros, y así le va", cuenta el director sobre la película.
Cuando el trabajo llegó a oídos de Martinez este se encontraba haciendo trabajo, pero en ningún momento dudó en protagonizar el film de Fernández: "La versión libre esta que hicieron de 'El Hijo Pródigo' me encantaba cuando leí el guión, porque deja un mensaje de perdón y el arrepentimiento que es tan importante, tanto como el amor. A nivel actoral, Máximo está casi la hora y media en pantalla y eso era un desafío. Algo así, para un actor, es un regalo".
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