Víctor Hugo Trespalacios muestra en la gran pantalla la visita de Skakespeare a Colombia
- por © Corresponsal (Colombia)-NOTICINE.com
El actor colombiano Víctor Hugo Trespalacios Ferrer ha estrenado en gran pantalla su primera película como director, guionista y coprotagonista, titulada "Mi amigo Shakespeare", que ya pudo verse en 2021 -en plena pandemia- a través de internet. Este largometraje, que también cuenta con la participación de su hija Beatriz Trespalacios Gómez, Johan Candela Garzón y Alexander Páez Nieto, aborda la vida de un colectivo de teatro que se enfrenta al reto de montar "Hamlet", la célebre obra de William Shakespeare.
"Es una película profundamente colombiana que no acude ni a la violencia, ni al narcotráfico, ni al fútbol, ni a la corrupción para serlo, que parte del micromundo de los actores de teatro, para luego expandirse al macro de nuestra conducta como país", explicó el director.
La película narra cómo, durante los ensayos, los actores se encuentran atrapados en un ciclo de discusiones y frustraciones, incapaces de comunicarse efectivamente entre ellos. En medio de este caos, aparece un inesperado visitante en el teatro: el propio William Shakespeare. El dramaturgo, con su sabiduría, les ofrece consejos que los llevan a reflexionar sobre sí mismos, tanto como individuos como miembros de un país, resaltando la importancia de comprender su identidad para que su arte cobre verdadero sentido.
El intérprete y cineasta barranquillero explicó el por qué de la elección del bardo británico: "Sentimos que es un autor que no huyó de la realidad de
su tiempo, si no que por el contrario la enfrentó y logró construir una poesía elevada en sus obras sin desconectarse de la realidad. Y es lo que queremos plantear, que como artistas o individuos hagamos lo que hagamos, no nos desconectemos de la realidad".
A lo largo de la película, se muestra a un Shakespeare que recorre escenarios de Colombia, interactuando con la gente, conociendo las costumbres, la gastronomía, el folclore y la vida cotidiana del país. Este acercamiento no solo subraya la universalidad de la obra de Shakespeare, sino también la riqueza cultural de Colombia, presentando un mensaje de arraigo a la idiosincrasia colombiana y a la importancia de la autenticidad en el arte.
En "Mi amigo Shakespeare", se ofrece una mirada a lo que significa ser actor en Bogotá, reflejando las realidades y desafíos de quienes forman parte del mundo teatral en la capital. Según Trespalacios, los personajes de la película son un reflejo fiel de los actores en la vida real, mostrando tanto sus virtudes como sus dificultades en un contexto que combina lo artístico con lo cotidiano.
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"Es una película profundamente colombiana que no acude ni a la violencia, ni al narcotráfico, ni al fútbol, ni a la corrupción para serlo, que parte del micromundo de los actores de teatro, para luego expandirse al macro de nuestra conducta como país", explicó el director.
La película narra cómo, durante los ensayos, los actores se encuentran atrapados en un ciclo de discusiones y frustraciones, incapaces de comunicarse efectivamente entre ellos. En medio de este caos, aparece un inesperado visitante en el teatro: el propio William Shakespeare. El dramaturgo, con su sabiduría, les ofrece consejos que los llevan a reflexionar sobre sí mismos, tanto como individuos como miembros de un país, resaltando la importancia de comprender su identidad para que su arte cobre verdadero sentido.
El intérprete y cineasta barranquillero explicó el por qué de la elección del bardo británico: "Sentimos que es un autor que no huyó de la realidad de
su tiempo, si no que por el contrario la enfrentó y logró construir una poesía elevada en sus obras sin desconectarse de la realidad. Y es lo que queremos plantear, que como artistas o individuos hagamos lo que hagamos, no nos desconectemos de la realidad".
A lo largo de la película, se muestra a un Shakespeare que recorre escenarios de Colombia, interactuando con la gente, conociendo las costumbres, la gastronomía, el folclore y la vida cotidiana del país. Este acercamiento no solo subraya la universalidad de la obra de Shakespeare, sino también la riqueza cultural de Colombia, presentando un mensaje de arraigo a la idiosincrasia colombiana y a la importancia de la autenticidad en el arte.
En "Mi amigo Shakespeare", se ofrece una mirada a lo que significa ser actor en Bogotá, reflejando las realidades y desafíos de quienes forman parte del mundo teatral en la capital. Según Trespalacios, los personajes de la película son un reflejo fiel de los actores en la vida real, mostrando tanto sus virtudes como sus dificultades en un contexto que combina lo artístico con lo cotidiano.
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