Jesús Monllaó habla sobre su opera prima, a concurso en Málaga, "Hijo de Caín"
- por © Jon Apaolaza-NOTICINE.com
El director catalán Jesús Monllaó ha visto refrendada su primera película, a concurso en el Festival de Málaga, por el respaldo de crítica y público. Este "thriller" psicológico sobre el mal oculto en el seno de una familia aparentemente feliz y modélica, protagonizado por David Solans, Jose Coronado y María Molins, cuenta con un guión de Sergio Barrejón y David Victori, a partir de la novela de Ignacio García-Valiño, y es ante todo -defiende su director en entrevista exclusiva con NOTICINE.com- "una buena historia", capaz de empatizar con el espectador.
- "Hijo de Caín" ha debutado con aplausos aquí en Málaga. ¿Cómo definiría su historia?
Lo que pretendo es llevar al espectador de la mano y llevarle en un viaje al corazón de una familia que está al borde del colapso. Esta familia tiene problemas con su hijo, adolescente, y cuando la situación llega a un punto de no retorno contratan a un psicólogo que va a intentar a través de la empatía y la afición común por el ajedrez averiguar qué pasa en el interior de este chico tan rebelde. Lo que no sabe es que cuando entre en esta familia se va a tener que enfrentar a demonios mucho más grandes de lo que había imaginado, y no sólo los de la familia, sino los suyos propios.
- ¿Le ha costado mucho hacer realidad esta opera prima?
Rodar cine siempre es complejo, y más en Europa. Hay fuerzas contrapuestas que llegan a decir que el cine no deja de ser un lastre para la sociedad, pero yo creo que lo que hacemos es colocar a la sociedad en un baño de autocrítica y eso es lo que molesta a algunos. En el caso de "Hijo de Caín" sí fue difícil, porque estamos pasando un momento duro, con cuotas de miseria no vistas en 50 años, sobre todo en España, con el paro por encima del 25%, pero me gustaría mandar un mensaje de optimismo. Las películas van a seguir haciéndose, tienen que seguir haciéndose. En medio de guerras civiles se ha hecho cine. ¿Por qué no vamos a seguir haciéndolo ahora que es cuando más se necesita? Lo haremos con mucho o poco dinero, con los medios que sean, pero si nos nutrimos de buenas historias, ahí vamos con todo. En mi caso, empezamos este proyecto en 2008 cuando la crisis no era tan galopante, y hemos ido redimensionándolo y finalmente lo hemos conseguido. Con casi la mitad del presupuesto inicial hemos sacado la película adelante, y estoy supersatisfecho.
- A pesar de ese recorte en los recursos, imagino que debe estar orgulloso de tener en cartel a uno de los actores más taquilleros y reconocidos en España, Jose Coronado...
Efectivamente, hemos conseguido a Jose y les diré por qué. En contra de lo que se pueda pensar, dentro de la industria del cine hay muchísima gente que es apasionada de su trabajo. Jose Coronado, que es un actor gigante aquí, y que se le ofrecen papeles enormes, él sigue buscando el reto interpretativo, y nosotros le agarramos por ahí, con un guión potente y un papel que a él le apetecía mucho hacer, con 300 registros en los que él ha podido explorarse a sí mismo como actor. Le he visto disfrutar en el rodaje, y yo he disfrutado con él. Nos hemos reído, hemos llorado, nos hemos abrazado... y profesionalmente es mi hermano mayor. Me gustaría romper una lanza a favor de todos esos profesionales entre los que me incluyo que lo que vemos al final es la pasión por contar buenas historias, o lo que creemos que son buenas historias. Coronado, una especie de Robert de Niro español, que haya querido estar con un señor en su primera película... bueno, sólo demuestra lo grande y generoso que es, y que en momentos de crisis y riesgo, se la juega.
- Usted debuta con "Hijo de Caín", y no lo hace como la mayoría de los cineastas por debajo de los 30 años...
La verdad es que soy un poco mayorcito para hacer una primera película. Yo creo que si uno canta bien, lo hace igual de bien a los 30 que a los 40. Si el público y el jurado deciden que canto bien eso se verá. Empecé diez años más tarde que la mayoría, con 32 años, porque tenía una vida profesional anterior francamente satisfactoria en lo económico, pero también un mundo interior que me hacía sentirme insatisfecho. En ese momento, 1997, decidí irme a Inglaterra a formarme con director, y de ahí salió un corto que se rodó en Cataluña, luego se montó y arregló en Gran Bretaña y gané un montón de premios... Estuve nominado al Goya, luego hice otros cortos más... y eso hizo que poco a poco un director de provincias, que vive en Tarragona, alejado de los centros de producción, pudiera abrirse paso. Finalmente, he tardado más tiempo, por estar fuera, pero me ha acogido la industria en sus brazos y aquí estoy hablando contigo. Ojalá pueda hacerlo en más ocasiones.
- El cine de género está ganando terreno en España. ¿Cree que es una buena manera de ganar público?
El cine es tan amplio como la música. Tiene que haber para todos los gustos. No soy quien para analizar todo eso, ni me lo planteo demasiado. Yo lo que he hecho ha sido buscar esa historia que me hizo dejarme cuatro años y jirones de piel, de vida, por el camino. Como autor quería contar la historia. Es un "thriller" con tintes dramáticos. Yo quería que el espectador empatizara, que los personajes no fueran meros artefactos de una intriga, sino que quería unos personajes que se me rebelaran un poquito. Pienso que se produce empatía por esos personajes, que te haces preguntas que provocan y quiero pensar que humildemente producen placer al espectador. Si te crees la película y tomas partido, te sientes agradecido, porque has viajado en otras vidas sin arriesgar la tuya propia, una experiencia que jamás vivirías. En cuanto si al cine le ayuda el género... Yo creo que al cine español lo que le tiene que ayudar son historias, autores potentes con una firma durísima, que de alguna manera cuando vayas a verlos sepas que estás ante un tipo de cine, y luego tiene que haber otros directores, entre los que creo que me encuentro, que somos artesanos del cine, como esos directores de Hollywood cuyas películas se recuerdan pero sus nombres no, algo maravilloso. No pretendo pasar a la historia como director, pero me gustaría que si se me tiene que recordar en algún momento, sea como alguien que hacía buenas pelis...
- ¿Y tiene alguna otra "buena peli" en camino?
(Ríe...) ¡Perdón por mi arrogancia! Sí, tengo otra. Si no pensara que es otro magnífico proyecto, el nivel de sufrimiento, de implicación que requiere, o se hace por muchísimo dinero, que no es el caso, francamente no merecería la pena. El nuevo proyecto, que ya existe, con el mismo productor, será un drama. Tenemos ya un tratamiento de 40 páginas. He dado con otra buenísima historia, o lo que yo considero como tal. Si van a ver "Hijo de Caín" y les gusta, tengo otra que espero que podamos hacer con mucha implicación y creatividad.
- "Hijo de Caín" ha debutado con aplausos aquí en Málaga. ¿Cómo definiría su historia?
Lo que pretendo es llevar al espectador de la mano y llevarle en un viaje al corazón de una familia que está al borde del colapso. Esta familia tiene problemas con su hijo, adolescente, y cuando la situación llega a un punto de no retorno contratan a un psicólogo que va a intentar a través de la empatía y la afición común por el ajedrez averiguar qué pasa en el interior de este chico tan rebelde. Lo que no sabe es que cuando entre en esta familia se va a tener que enfrentar a demonios mucho más grandes de lo que había imaginado, y no sólo los de la familia, sino los suyos propios.
- ¿Le ha costado mucho hacer realidad esta opera prima?
Rodar cine siempre es complejo, y más en Europa. Hay fuerzas contrapuestas que llegan a decir que el cine no deja de ser un lastre para la sociedad, pero yo creo que lo que hacemos es colocar a la sociedad en un baño de autocrítica y eso es lo que molesta a algunos. En el caso de "Hijo de Caín" sí fue difícil, porque estamos pasando un momento duro, con cuotas de miseria no vistas en 50 años, sobre todo en España, con el paro por encima del 25%, pero me gustaría mandar un mensaje de optimismo. Las películas van a seguir haciéndose, tienen que seguir haciéndose. En medio de guerras civiles se ha hecho cine. ¿Por qué no vamos a seguir haciéndolo ahora que es cuando más se necesita? Lo haremos con mucho o poco dinero, con los medios que sean, pero si nos nutrimos de buenas historias, ahí vamos con todo. En mi caso, empezamos este proyecto en 2008 cuando la crisis no era tan galopante, y hemos ido redimensionándolo y finalmente lo hemos conseguido. Con casi la mitad del presupuesto inicial hemos sacado la película adelante, y estoy supersatisfecho.
- A pesar de ese recorte en los recursos, imagino que debe estar orgulloso de tener en cartel a uno de los actores más taquilleros y reconocidos en España, Jose Coronado...
Efectivamente, hemos conseguido a Jose y les diré por qué. En contra de lo que se pueda pensar, dentro de la industria del cine hay muchísima gente que es apasionada de su trabajo. Jose Coronado, que es un actor gigante aquí, y que se le ofrecen papeles enormes, él sigue buscando el reto interpretativo, y nosotros le agarramos por ahí, con un guión potente y un papel que a él le apetecía mucho hacer, con 300 registros en los que él ha podido explorarse a sí mismo como actor. Le he visto disfrutar en el rodaje, y yo he disfrutado con él. Nos hemos reído, hemos llorado, nos hemos abrazado... y profesionalmente es mi hermano mayor. Me gustaría romper una lanza a favor de todos esos profesionales entre los que me incluyo que lo que vemos al final es la pasión por contar buenas historias, o lo que creemos que son buenas historias. Coronado, una especie de Robert de Niro español, que haya querido estar con un señor en su primera película... bueno, sólo demuestra lo grande y generoso que es, y que en momentos de crisis y riesgo, se la juega.
- Usted debuta con "Hijo de Caín", y no lo hace como la mayoría de los cineastas por debajo de los 30 años...
La verdad es que soy un poco mayorcito para hacer una primera película. Yo creo que si uno canta bien, lo hace igual de bien a los 30 que a los 40. Si el público y el jurado deciden que canto bien eso se verá. Empecé diez años más tarde que la mayoría, con 32 años, porque tenía una vida profesional anterior francamente satisfactoria en lo económico, pero también un mundo interior que me hacía sentirme insatisfecho. En ese momento, 1997, decidí irme a Inglaterra a formarme con director, y de ahí salió un corto que se rodó en Cataluña, luego se montó y arregló en Gran Bretaña y gané un montón de premios... Estuve nominado al Goya, luego hice otros cortos más... y eso hizo que poco a poco un director de provincias, que vive en Tarragona, alejado de los centros de producción, pudiera abrirse paso. Finalmente, he tardado más tiempo, por estar fuera, pero me ha acogido la industria en sus brazos y aquí estoy hablando contigo. Ojalá pueda hacerlo en más ocasiones.
- El cine de género está ganando terreno en España. ¿Cree que es una buena manera de ganar público?
El cine es tan amplio como la música. Tiene que haber para todos los gustos. No soy quien para analizar todo eso, ni me lo planteo demasiado. Yo lo que he hecho ha sido buscar esa historia que me hizo dejarme cuatro años y jirones de piel, de vida, por el camino. Como autor quería contar la historia. Es un "thriller" con tintes dramáticos. Yo quería que el espectador empatizara, que los personajes no fueran meros artefactos de una intriga, sino que quería unos personajes que se me rebelaran un poquito. Pienso que se produce empatía por esos personajes, que te haces preguntas que provocan y quiero pensar que humildemente producen placer al espectador. Si te crees la película y tomas partido, te sientes agradecido, porque has viajado en otras vidas sin arriesgar la tuya propia, una experiencia que jamás vivirías. En cuanto si al cine le ayuda el género... Yo creo que al cine español lo que le tiene que ayudar son historias, autores potentes con una firma durísima, que de alguna manera cuando vayas a verlos sepas que estás ante un tipo de cine, y luego tiene que haber otros directores, entre los que creo que me encuentro, que somos artesanos del cine, como esos directores de Hollywood cuyas películas se recuerdan pero sus nombres no, algo maravilloso. No pretendo pasar a la historia como director, pero me gustaría que si se me tiene que recordar en algún momento, sea como alguien que hacía buenas pelis...- ¿Y tiene alguna otra "buena peli" en camino?
(Ríe...) ¡Perdón por mi arrogancia! Sí, tengo otra. Si no pensara que es otro magnífico proyecto, el nivel de sufrimiento, de implicación que requiere, o se hace por muchísimo dinero, que no es el caso, francamente no merecería la pena. El nuevo proyecto, que ya existe, con el mismo productor, será un drama. Tenemos ya un tratamiento de 40 páginas. He dado con otra buenísima historia, o lo que yo considero como tal. Si van a ver "Hijo de Caín" y les gusta, tengo otra que espero que podamos hacer con mucha implicación y creatividad.