El gallego Xavier Bermúdez estrena "El oro del tiempo" en el Festival de Karlovy Vary

por © Oscar Peyrou (Karlovy Vary)-NOTICINE.com
'El oro del tiempo'
La película española "O ouro do tempo" (El oro del tiempo), del gallego  Xavier Bermúdez,  que compite por los Globos de Cristal en la sección oficial de la 48 edición del Festival Internacional de Cine de Karlovy Vary, narra de una manera sencilla y eficaz dos historias de amor, una de ellas  inspirada en hechos reales. Los Globos son los máximos galardones de la muestra que se desarrolla desde el pasado fin de semana en el balneario checo.

Alfredo, un anciano médico, tiene el cadáver de su difunta esposa criogénicamente congelado durante muchos años, convencido de que un día la ciencia sería capaz de traerla de vuelta a la vida. Este hecho está inspirado en la realidad.

La dedicación con la que el protagonista se preocupa por este drama, el amor que le profesa a la difunta, se convierten en la base para la representación de un ser humano interesante,  es decir, contradictorio, claramente excéntrico, pero admirable en su integridad moral.

La narración fluye libremente en un espíritu de melancolía, en armonía con los cambios de las estaciones y la nostalgia del personaje central y del clima gallego.

Sin embargo, hay momentos de humor suave, irónico. Así, sobre todo en las escenas en las que Alfredo mira películas caseras y fotografías de familia en las que su amada Amalia hace alarde de su belleza.

La ironía también subyace en la representación de la vida cotidiana del médico, con imágenes que reflejan su relación ambivalente hacia su hermosa ama de llaves y enfermera  -con la que se sugiere que en algún momento ha tenido relaciones amorosas-, y con su hijo, que tiene una forma de ser exactamente opuesta a la  de su padre.

Sin recurrir a giros  superfluos de la trama dramática, las capas ocultas de la  película muestran las relaciones humanas -siempre complejas- y también exploran temas de la vejez y del tiempo que pasa.

Lo interesante es que el oro del tiempo al que hace alusión el título de la cinta y que parece referirse solo a la apacible y retirada vida del médico, en realidad incluye también a la asistenta.

Esta última, se va completando como persona a medida que avanza la cinta. Comienza como una figura plana y lentamente se convierte en una mujer llena de intereses, con un muy rico mundo interior.

Una película interesante, excepto por los últimos diez minutos, en los que el realizador abandona el minimalismo y la sencillez, siempre eficaces, y bate con brío los tambores del sentimentalismo, a menudo barato y prescindible.