Crónicas

Miguel Angel Solá cambia de serie de televisión y de cadena
28-VI-07
A apenas dos semanas de iniciar la grabación del primer episodio y sólo unos días después de aparecer públicamente al lado del otro protagonista, José Coronado, el prestigioso actor argentino afincado en España Miguel Angel Solá ha dejado plantada a la productora Videomedia y su serie "R.I.S.", versión apócrifa de la célebre "C.S.I." norteamericana con destino al canal privado Tele 5. Según el portal Vertele, otra serie televisiva también policíaca que prepara la pública TVE podría estar detrás de la decisión del protagonista de "Bajo bandera" o "Plenilunio".
Reconocen en Videomedia que a pesar de haber presentado a la prensa la semana pasada "R.I.S" junto a Coronado, el acuerdo que tenían con Solá era puramente verbal, y por tanto éste no ha incumplido ningún contrato. En la serie, el argentino iba a interpretar al veterano Guillermo Cuevas, mentor de Ricardo Ventura (José Coronado) en la policía científica y ahora prejubilado.
Miguel Ángel Solá ha preferido la posterior oferta de TVE para otra serie llamada "Desaparecida", de la misma productora de la exitosa "Cuéntame cómo pasó", que narra la historia de una joven que desaparece una noche sin dejar pistas, y su papel será el del detective que ayuda a la familia en su búsqueda. Probablemente se trata de un personaje más sustancioso que el secundario de "R.I.S.".
Solá, quien vive desde hace años en el país ibérico tras ser amenazado de muerte en la Argentina por sus ideas políticas, ha participado en numerosas películas españolas, como "Plenilunio", "Sé quien eres", "Fausto 5.0", "La playa de los galgos" y "El alquimista impaciente". Igualmente actuó en la serie de Antena 3 "Lobos", cancelada precipitadamente por su baja audiencia. Por otra parte, junto a su esposa, la española Blanca Oteyza, ha hecho teatro con notable éxito.
El actor, que ha seguido vinculado al cine de su país en "La puta y la ballena" o "La fuga", estuvo en el dique seco varios meses tras sufrir un grave accidente el año pasado mientras se bañaba en una playa. Sufrió una lesión de médula que le dejó paralítico en un primer momento, pero tras meses de hospital y rehabilitación, el doble ganador del Premio Coral en La Habana se recuperó de forma casi milagrosa y ahora regresa al trabajo.
A apenas dos semanas de iniciar la grabación del primer episodio y sólo unos días después de aparecer públicamente al lado del otro protagonista, José Coronado, el prestigioso actor argentino afincado en España Miguel Angel Solá ha dejado plantada a la productora Videomedia y su serie "R.I.S.", versión apócrifa de la célebre "C.S.I." norteamericana con destino al canal privado Tele 5. Según el portal Vertele, otra serie televisiva también policíaca que prepara la pública TVE podría estar detrás de la decisión del protagonista de "Bajo bandera" o "Plenilunio".
Reconocen en Videomedia que a pesar de haber presentado a la prensa la semana pasada "R.I.S" junto a Coronado, el acuerdo que tenían con Solá era puramente verbal, y por tanto éste no ha incumplido ningún contrato. En la serie, el argentino iba a interpretar al veterano Guillermo Cuevas, mentor de Ricardo Ventura (José Coronado) en la policía científica y ahora prejubilado.
Miguel Ángel Solá ha preferido la posterior oferta de TVE para otra serie llamada "Desaparecida", de la misma productora de la exitosa "Cuéntame cómo pasó", que narra la historia de una joven que desaparece una noche sin dejar pistas, y su papel será el del detective que ayuda a la familia en su búsqueda. Probablemente se trata de un personaje más sustancioso que el secundario de "R.I.S.".
Solá, quien vive desde hace años en el país ibérico tras ser amenazado de muerte en la Argentina por sus ideas políticas, ha participado en numerosas películas españolas, como "Plenilunio", "Sé quien eres", "Fausto 5.0", "La playa de los galgos" y "El alquimista impaciente". Igualmente actuó en la serie de Antena 3 "Lobos", cancelada precipitadamente por su baja audiencia. Por otra parte, junto a su esposa, la española Blanca Oteyza, ha hecho teatro con notable éxito.
El actor, que ha seguido vinculado al cine de su país en "La puta y la ballena" o "La fuga", estuvo en el dique seco varios meses tras sufrir un grave accidente el año pasado mientras se bañaba en una playa. Sufrió una lesión de médula que le dejó paralítico en un primer momento, pero tras meses de hospital y rehabilitación, el doble ganador del Premio Coral en La Habana se recuperó de forma casi milagrosa y ahora regresa al trabajo.
- © Redacción (España)-NOTICINE.com

OPINIÓN: Densidad conceptual y aliento artístico en la Semana de Cine Alemán habanera
28-VI-07
Por Frank Padrón
No es sorpresa para sus viejos seguidores (y en Cuba, dicho sea de paso, no somos pocos ): el cine alemán descuella dentro de sus colegas de la Comunidad Europea como uno de los más sólidos en cuanto a propuestas ideoestéticas, uno de los que mayores alturas alcanza en su vuelo artístico. Sus comedias son de un humor corrosivo e inteligente, sus dramas no menos intensos y caladores en la sensibilidad, sin descontar esas zonas intermedias que lo mismo estimulan la sonrisa que la reflexión más seria.
La nueva semana que acaba de finalizar en su andadura capitalina y en su mayoritario segmento “adulto”, no rompió esa tradición, si bien siempre se encuentran piezas menores: "Fantasmas", por ejemplo, de Christan Petzold, aún cuando fue seleccionada la mejor película del año 2005 por la crítica alemana, no logra una factura homogénea al seguir una pareja de chicas y pulsar en sus encuentros y desencuentros (entre ellas y con otros personajes) el tema de las necesidades afectivas, las perennes búsquedas y la soledad; cuenta con momentos conseguidos, actuaciones notables y logros parciales, pero le falta cohesión dramatúrgica y acabado formal.
Semejante destino corre "Perdido y encontrado" (2004 –2005) que sin embargo constituyó el filme más experimental e innovador de toda la muestra: enlazados por un sencillo y elocuente animado (“Gene más Ratio”) del estoniano Mait Laas sobre un hombre que ayuda a nacer una nueva generación, asistimos a cinco relatos de sendos realizadores procedentes de Europa Central y del Este, aceptados por una compañía alemana que acoge proyectos de estos países; entre ellos, sobresalen “La chica turca”, del rumano Cristian Mungiu, en torno a la ingenuidad campesina, no carente de belleza y el que cierra el filme, “Fabulosa Vera”, de Stefan Arsenijevic (Serbia-Montenegro), en clave de farsa muy bien encauzada, sobre el recurrente pero siempre interesante ítem de la felicidad encontrada a veces mediante caminos insospechados, por lo cual el trayecto en tranvía de este pequeña “road movie” viene como anillo al dedo; aún cuando el resto no alcanza el nivel de éstos, pueden hallarse aciertos, por ejemplo, en el tratamiento de la banda sonora del primero (”El ritual”, de la búlgara Nadejda Koseva) o el sugestivo uso del blanco y negro, en el no obstante efectista y poco convincente “Shortlasting silence”, del húngaro Kornél Mundroczó.
Otra de tintes fuertemente dramáticos resultó “Angustias” (2002), de Oskar Roehler, que aborda con un lenguaje descarnado e hiperrealista los avatares de una pareja disfuncional: sexo, paradójicos afectos y sobre todo, una presencia incisiva de la enfermedad (cáncer, VIH, neurosis...) informan una historia bien escrita y mejor plasmada que encuentra en la fotografía, una música contundente y energética y excelentes desempeños (Marie Bäumer fue elegida mejor actriz de ese año por los críticos locales), aliados imprescindibles.
Dentro de la cuerda más ligera que implica el humorismo, “El juego de Zucker” (2004), de Dani Levy, significó una simpática sátira de los excesos del judaísmo que hubiera hecho las delicias de Woody Allen, pero sobre todo, de las absurdas barreras que se levantan en el seno de las familias y más allá, de los regímenes sociopolíticos : un testamento (de previsible desenlace) permitirá el acercamiento de dos hermanos de creencias y militancias diferentes: uno, jugador empedernido y antiguo comunista de la exRDA, el otro, judío ortodoxo y no menos zarandeado por el capitalismo salvaje de la nueva Alemania: un tanto hiperbólico acaso, pero muy ingenioso y agudo este juego donde también las actuaciones son de primera.
“Kebab Connection” (2005), de Anno Saul, trae otro enfrentamiento étnico: el de turcos y griegos aficionados a la cocina en un barrio de Hamburgo; el mundo de la publicidad y del cine de kung-fu, la gastronomía (dos restaurantes y sus dueños, de esos respectivos países, rivalizan en calles paralelas), el matrimonio y sus responsabilidades, y los sentimientos xenofóbicos al revés: de quienes se instalan en grandes países hacia sus anfitriones, son algunos rubros que pulsa esta no menos divertida comedia.
Para el cierre, la Cinemateca de Cuba y el Goethe-Institut (coauspiciadores de la Semana) eligieron quizá el más redondo título: “Contra la pared” (2004), del turco-alemán Faith Akin, visto ya en un anterior festival habanero.
Una vez más, los conflictos por las tradiciones en los ancestros del cineasta se plasman en la evolutiva y profunda historia de amor que protagonizan Sibel, una hermosa joven turca radicada en Alemania y Cahit, un suicida, drogadicto y alcohólico que la acoge en matrimonio para ayudarla a escapar de las rigideces familiares; pero lo que se inicia en unión sólo de ayuda, deriva en una pasión sin límites, que Akin narra con una fuerza y una vitalidad complementaria a los sentimientos que experimenta la pareja.
Para ello, se apoya en una sustanciosa banda sonora, una matizada y sutil fotografía, un extraordinario montaje y un par de actuaciones (Birol Unel y Siebell Kekilli) que proyectan la riqueza sicológica de sus respectivos roles.
No gratuitamente, “Contra la pared” ha recibido varios e importantes lauros, entre ellos el de la FIPRESCI en Berlín y el Goya al mejor filme extranjero en España.
Restan, de esta muestra, los largos para niños y jóvenes programados para los próximos fines de semana, y su traslado a las provincias del interior (Sancti Espíritu y Pinar del Río) agraciadas con tan significativos títulos, y cuyos cinéfilos ya deben irse preparando para tan opulento banquete de exquisito cine.
Por Frank Padrón
No es sorpresa para sus viejos seguidores (y en Cuba, dicho sea de paso, no somos pocos ): el cine alemán descuella dentro de sus colegas de la Comunidad Europea como uno de los más sólidos en cuanto a propuestas ideoestéticas, uno de los que mayores alturas alcanza en su vuelo artístico. Sus comedias son de un humor corrosivo e inteligente, sus dramas no menos intensos y caladores en la sensibilidad, sin descontar esas zonas intermedias que lo mismo estimulan la sonrisa que la reflexión más seria.
La nueva semana que acaba de finalizar en su andadura capitalina y en su mayoritario segmento “adulto”, no rompió esa tradición, si bien siempre se encuentran piezas menores: "Fantasmas", por ejemplo, de Christan Petzold, aún cuando fue seleccionada la mejor película del año 2005 por la crítica alemana, no logra una factura homogénea al seguir una pareja de chicas y pulsar en sus encuentros y desencuentros (entre ellas y con otros personajes) el tema de las necesidades afectivas, las perennes búsquedas y la soledad; cuenta con momentos conseguidos, actuaciones notables y logros parciales, pero le falta cohesión dramatúrgica y acabado formal.
Semejante destino corre "Perdido y encontrado" (2004 –2005) que sin embargo constituyó el filme más experimental e innovador de toda la muestra: enlazados por un sencillo y elocuente animado (“Gene más Ratio”) del estoniano Mait Laas sobre un hombre que ayuda a nacer una nueva generación, asistimos a cinco relatos de sendos realizadores procedentes de Europa Central y del Este, aceptados por una compañía alemana que acoge proyectos de estos países; entre ellos, sobresalen “La chica turca”, del rumano Cristian Mungiu, en torno a la ingenuidad campesina, no carente de belleza y el que cierra el filme, “Fabulosa Vera”, de Stefan Arsenijevic (Serbia-Montenegro), en clave de farsa muy bien encauzada, sobre el recurrente pero siempre interesante ítem de la felicidad encontrada a veces mediante caminos insospechados, por lo cual el trayecto en tranvía de este pequeña “road movie” viene como anillo al dedo; aún cuando el resto no alcanza el nivel de éstos, pueden hallarse aciertos, por ejemplo, en el tratamiento de la banda sonora del primero (”El ritual”, de la búlgara Nadejda Koseva) o el sugestivo uso del blanco y negro, en el no obstante efectista y poco convincente “Shortlasting silence”, del húngaro Kornél Mundroczó.
Otra de tintes fuertemente dramáticos resultó “Angustias” (2002), de Oskar Roehler, que aborda con un lenguaje descarnado e hiperrealista los avatares de una pareja disfuncional: sexo, paradójicos afectos y sobre todo, una presencia incisiva de la enfermedad (cáncer, VIH, neurosis...) informan una historia bien escrita y mejor plasmada que encuentra en la fotografía, una música contundente y energética y excelentes desempeños (Marie Bäumer fue elegida mejor actriz de ese año por los críticos locales), aliados imprescindibles.
Dentro de la cuerda más ligera que implica el humorismo, “El juego de Zucker” (2004), de Dani Levy, significó una simpática sátira de los excesos del judaísmo que hubiera hecho las delicias de Woody Allen, pero sobre todo, de las absurdas barreras que se levantan en el seno de las familias y más allá, de los regímenes sociopolíticos : un testamento (de previsible desenlace) permitirá el acercamiento de dos hermanos de creencias y militancias diferentes: uno, jugador empedernido y antiguo comunista de la exRDA, el otro, judío ortodoxo y no menos zarandeado por el capitalismo salvaje de la nueva Alemania: un tanto hiperbólico acaso, pero muy ingenioso y agudo este juego donde también las actuaciones son de primera.
“Kebab Connection” (2005), de Anno Saul, trae otro enfrentamiento étnico: el de turcos y griegos aficionados a la cocina en un barrio de Hamburgo; el mundo de la publicidad y del cine de kung-fu, la gastronomía (dos restaurantes y sus dueños, de esos respectivos países, rivalizan en calles paralelas), el matrimonio y sus responsabilidades, y los sentimientos xenofóbicos al revés: de quienes se instalan en grandes países hacia sus anfitriones, son algunos rubros que pulsa esta no menos divertida comedia.
Para el cierre, la Cinemateca de Cuba y el Goethe-Institut (coauspiciadores de la Semana) eligieron quizá el más redondo título: “Contra la pared” (2004), del turco-alemán Faith Akin, visto ya en un anterior festival habanero.
Una vez más, los conflictos por las tradiciones en los ancestros del cineasta se plasman en la evolutiva y profunda historia de amor que protagonizan Sibel, una hermosa joven turca radicada en Alemania y Cahit, un suicida, drogadicto y alcohólico que la acoge en matrimonio para ayudarla a escapar de las rigideces familiares; pero lo que se inicia en unión sólo de ayuda, deriva en una pasión sin límites, que Akin narra con una fuerza y una vitalidad complementaria a los sentimientos que experimenta la pareja.
Para ello, se apoya en una sustanciosa banda sonora, una matizada y sutil fotografía, un extraordinario montaje y un par de actuaciones (Birol Unel y Siebell Kekilli) que proyectan la riqueza sicológica de sus respectivos roles.
No gratuitamente, “Contra la pared” ha recibido varios e importantes lauros, entre ellos el de la FIPRESCI en Berlín y el Goya al mejor filme extranjero en España.
Restan, de esta muestra, los largos para niños y jóvenes programados para los próximos fines de semana, y su traslado a las provincias del interior (Sancti Espíritu y Pinar del Río) agraciadas con tan significativos títulos, y cuyos cinéfilos ya deben irse preparando para tan opulento banquete de exquisito cine.
- © NOTICINE.com

Coppola ultima el casting de su película argentina
27-VI-07
En la recta final del proceso de selección de actores y técnicos locales que participarán en la próxima cinta de Francis Ford Coppola, "Tetro", a rodarse en la Argentina, la prensa local especula sobre algunos nombres. Según Telam, ya habría elegido a la actriz Paola Krum, más popular por su trabajo televisivo que cinematográfico, a pesar de haber intervenido en films como "La suerte está echada", "El faro", "El séptimo arcangel" o "La venganza". Por su parte, Ambito Financiero detalla que el célebre autor de "El padrino" no lleva a cabo un proceso de selección al uso, sino que prefiere ver trabajos en TV, vídeo u obras de teatro, y luego simplemente... hablar con los posibles candidatos.
El método -que el diario califica de "no convencional"- consiste en conversar informalmente, sin pedir que se interprete o recite sino que sólo se charle, para que él observe. Coppola, quien pronto dejará Buenos Aires para regresar a mediados de agosto y establecerse en el país al menos un año (el rodaje se preve a inicios de 2008), ha presenciado espectáculos y obras teatrales como "Tangokinesis", de Ana María Stekelman, o "La de Vicente López", que dirige el prestigioso actor Julio Chávez (otro posible candidato para algunos).
Con Paola Krum, cuenta la agencia Telam, el realizador italoamericano cenó días pasados en un grupo donde también estaban su esposa y el actor Mike Amigorena, a quien había conocido durante una función de "El niño argentino". El encuentro tuvo lugar en un restaurante de La Boca y fue grabado en vídeo.
Pero no sólo habrá argentinos en el reparto, ya que como en su día publicó NOTICINE.com un viejo conocido por Coppola, Matt Dillon, al que descubrió en "Rebeldes" y "La ley de la calle", formará parte del reparto, junto quizás al español Javier Bardem.
"Tetro" es una saga familiar de emigrantes italianos en tierras argentinas, aunque se desarrolla en la época actual.
En la recta final del proceso de selección de actores y técnicos locales que participarán en la próxima cinta de Francis Ford Coppola, "Tetro", a rodarse en la Argentina, la prensa local especula sobre algunos nombres. Según Telam, ya habría elegido a la actriz Paola Krum, más popular por su trabajo televisivo que cinematográfico, a pesar de haber intervenido en films como "La suerte está echada", "El faro", "El séptimo arcangel" o "La venganza". Por su parte, Ambito Financiero detalla que el célebre autor de "El padrino" no lleva a cabo un proceso de selección al uso, sino que prefiere ver trabajos en TV, vídeo u obras de teatro, y luego simplemente... hablar con los posibles candidatos.
El método -que el diario califica de "no convencional"- consiste en conversar informalmente, sin pedir que se interprete o recite sino que sólo se charle, para que él observe. Coppola, quien pronto dejará Buenos Aires para regresar a mediados de agosto y establecerse en el país al menos un año (el rodaje se preve a inicios de 2008), ha presenciado espectáculos y obras teatrales como "Tangokinesis", de Ana María Stekelman, o "La de Vicente López", que dirige el prestigioso actor Julio Chávez (otro posible candidato para algunos).
Con Paola Krum, cuenta la agencia Telam, el realizador italoamericano cenó días pasados en un grupo donde también estaban su esposa y el actor Mike Amigorena, a quien había conocido durante una función de "El niño argentino". El encuentro tuvo lugar en un restaurante de La Boca y fue grabado en vídeo.
Pero no sólo habrá argentinos en el reparto, ya que como en su día publicó NOTICINE.com un viejo conocido por Coppola, Matt Dillon, al que descubrió en "Rebeldes" y "La ley de la calle", formará parte del reparto, junto quizás al español Javier Bardem.
"Tetro" es una saga familiar de emigrantes italianos en tierras argentinas, aunque se desarrolla en la época actual.
- © Redacción (Argentina)-NOTICINE.com

Gael García Bernal goza pisando el cesped de su equipo favorito
27-VI-07
En su nuevo trabajo como actor, "Rudo y Cursi", opera prima como director de su amigo el guionista Carlos Cuarón, Gael García Bernal ha podido cumplir uno de sus sueños, jugar al balón en el campo de su equipo favorito, los Pumas de la UNAM. "Aquí estoy, en donde entrena el equipo de mi corazón. Pumas es todo para mí", comentó a la prensa al terminar la filmación en el Club Universidad Nacional A.C., en La Cantera.
"Rudo y Cursi", escrito y realizado por el menor de los Cuarón, no es un film más para el protagonista de "Diarios de motocicleta", sino que marca su reencuentro con buena parte del equipo técnico y artístico de su primer éxito, "Y tu mamá también". Diego Luna es el coprotagonista, el director de la actual -Carlos- fue coguionista de la anterior, mientras que su hermano Alfonso ahora hace de coproductor. Además, numerosos técnicos repiten.
"Para mí es un gran gusto estar en este elenco, estoy encantado, realmente muy emocionado, porque de esta producción ya conocía a todos, ya habíamos trabajado juntos, no sé si dos o tres veces, desde que hicimos "Y tu mamá también" hace unos siete años", ha dicho el internacional astro mexicano.
En "Rudo y Cursi" Gael interpreta a un joven jugador de fútbol, apodado "El Cursi", quien junto a su hermano "El Rudo" (Diego Luna) sueña con encontrar un futuro en el deporte rey. Sin embargo, no muchos más detalles se conocen de esta cinta que marca el debut de la nueva productora Cha Cha Cha, creada esencialmente por tres famosos realizadores mexicanos "exiliados" profesionalmente, Alejandro González Iñárritu, Alfonso Cuarón y Guillermo del Toro, quienes acordaron con Universal Pictures un plan de producción de cinco títulos. En principio se trataría de una realización de cada uno de ellos, más otras dos de Carlos Cuardón ("Rudo y Cursi") y Rodrigo García, el hijo del Nobel García Márquez.
Hace pocos días se supo que García Bernal había sido llamado por Fernando Meirelles para incorporarse tras este trabajo mexicano al equipo de "Ensayo sobre la ceguera", adaptación de la obra de Saramago, junto a Julianne Moore, Mark Ruffalo y Danny Glover.
En su nuevo trabajo como actor, "Rudo y Cursi", opera prima como director de su amigo el guionista Carlos Cuarón, Gael García Bernal ha podido cumplir uno de sus sueños, jugar al balón en el campo de su equipo favorito, los Pumas de la UNAM. "Aquí estoy, en donde entrena el equipo de mi corazón. Pumas es todo para mí", comentó a la prensa al terminar la filmación en el Club Universidad Nacional A.C., en La Cantera.
"Rudo y Cursi", escrito y realizado por el menor de los Cuarón, no es un film más para el protagonista de "Diarios de motocicleta", sino que marca su reencuentro con buena parte del equipo técnico y artístico de su primer éxito, "Y tu mamá también". Diego Luna es el coprotagonista, el director de la actual -Carlos- fue coguionista de la anterior, mientras que su hermano Alfonso ahora hace de coproductor. Además, numerosos técnicos repiten.
"Para mí es un gran gusto estar en este elenco, estoy encantado, realmente muy emocionado, porque de esta producción ya conocía a todos, ya habíamos trabajado juntos, no sé si dos o tres veces, desde que hicimos "Y tu mamá también" hace unos siete años", ha dicho el internacional astro mexicano.
En "Rudo y Cursi" Gael interpreta a un joven jugador de fútbol, apodado "El Cursi", quien junto a su hermano "El Rudo" (Diego Luna) sueña con encontrar un futuro en el deporte rey. Sin embargo, no muchos más detalles se conocen de esta cinta que marca el debut de la nueva productora Cha Cha Cha, creada esencialmente por tres famosos realizadores mexicanos "exiliados" profesionalmente, Alejandro González Iñárritu, Alfonso Cuarón y Guillermo del Toro, quienes acordaron con Universal Pictures un plan de producción de cinco títulos. En principio se trataría de una realización de cada uno de ellos, más otras dos de Carlos Cuardón ("Rudo y Cursi") y Rodrigo García, el hijo del Nobel García Márquez.
Hace pocos días se supo que García Bernal había sido llamado por Fernando Meirelles para incorporarse tras este trabajo mexicano al equipo de "Ensayo sobre la ceguera", adaptación de la obra de Saramago, junto a Julianne Moore, Mark Ruffalo y Danny Glover.
- © Redacción (México)-NOTICINE.com

El cine alemán regresa a la Cinemateca Cubana
26-VI-07
Hasta este jueves 28 la sala Chaplin de la Cinemateca de Cuba acoge una nueva semana de cine alemán, sin dudas de las más singulares y motivadoras producciones dentro de las que ahora mismo se desarrollan en Europa; la muestra continúa después (hasta el 6 de julio) en la sala Conrado Benítez, de Sancti Spíritu, y finaliza en el Praga (11 al 17 de julio) de Pinar del Río.
“Status Yo!”(2004), ópera prima de Till Hastreiter, fue elegida como première, aunque se repite varias veces durante la semana. El film, coproducido con Suiza, se mueve en el convulso mundo del hip-hop en el Berlín contemporáneo, y para el mismo, el realizador trabajó con actores no profesionales: son jóvenes que se ganan la vida “rapeando” en los pasillos del metro, organizan fiestas o sueñan con volver la inmensa y agitada urbe en un inmenso grafitti; procedentes de países latinos o árabes, tienen que enfrentarse a las costumbres retardatarias de padres y al desprecio de locales (lo mismo organizaciones fascistoides que a gerentes de firmas discográficas, a “padrinos” de drogas o a familiares intransigentes); lo cierto es que la contracultura hip hop en un Berlín excluyente y frío (en todo sentido) sirve de plataforma a esta cinta coral donde, como mérito inicial, sobresale una banda sonora riquísima, para escuchar a ojos cerrados, y que presta su fibra, nervio y energía a los diversos casos que van sucediéndose y alternando en la pantalla (y que, en las excelentes condiciones técnicas del Chaplin, llega en toda su nitidez y precisión).
Ahora bien, como ocurre con toda pieza coral, hay que mantener un pulso narrativo que, a decir verdad, no siempre logra el debutante Hastreiter, pagando así la novatada: el filme se resiente por una desigual labor de montaje, un irregular tratamiento de las diferentes historias que no se plasman con la misma felicidad ni se integran coherentemente al discurso.
A persar de lo cual, “Status yo!” logra más de un momento de altísima concentración dramática y estimable fuerza en las imágenes, como mismo consigue hallar un justo equilibrio entre pasajes humorísticos y otros muy graves; la pericia aludida en el diseño y plasmación de la banda sonora, se consigue también en la dirección de esos actores amateurs que, en términos generales, logran desenvolverse con una espontaneidad y una gracia que trasciende el plano danzario-musical para abarcar todo el nivel histriónico, y ello, a pesar de que casi todos los personajes sobresalen por una acertada y nada superficial construcción sicológica.
Pero las expectativas de la semana no finalizan, ni con mucho, con éste, su satisfactorio inicio; al parecer, los cinéfilos tendrán más de un motivo para el recocijo cuando se enfrenten a títulos que “pintan” muy bien, como “Perdido y encontrado” (2004 –2005), que contó con una extensa nómina de países participantes además de Alemania (Estonia, Bulgaria, Rumanía, Hungría, Bosnia-Herzegovina, etc) y que enlaza varios cuentos, desarrollados en alguno de esos sitios, mediante un animado; fue producida por una compañía germana que fomenta y acoge proyectos artÍsticos procedentes de Europa del Este y Central, y ya compitió en Mar del Plata, Argentina.
También se incluye una pieza de Fatih Akin (“Al otro lado”) que viene avalada por importantes premios en Berlín (nada menos que el Oso de Oro entre ellos) y España (Goya al mejor filme europeo): “Contra la pared”, que describe una atormentada historia de amor entre un alemán recluído en una clínica siquiátrica y una joven de ascendientes turcos que necesita huir de su conservadora familia.
Otra sobre parejas disfuncionales y raras es “Angustia” (2002), de Oskar Roehler, esta vez entre un egocéntrico dramaturgo teatral, su despreciada mujer y una prostituta a la que acude el primero; cinta que compitió oficialmente en Berlín y confirió a Marie Bäumer, la elección de mejor actriz del año por los críticos alemanes.
“Fantasmas” (2005), de Christian Petzold, “habla esencialmente –según el crítico Hans Günter Pflaum- de la pérdida y la añoranza: la pérdida de personas y de la realidad y la añoranza de que las cosas sean diferentes...” mediante las aventuras de dos amigas de conductas antisociales, mientras “Kebab Connection”(2005), de Anno Soul, mezcla el mundo de la publicidad con el cine de kung-fu, y “El juego de Zucker”, del mismo año, se anuncia como una comedia de humor negro que relaciona a un jugador empedernido y experiodista deportivo con la familia de su hijo y su madre, recien fallecida.
Hasta este jueves 28 la sala Chaplin de la Cinemateca de Cuba acoge una nueva semana de cine alemán, sin dudas de las más singulares y motivadoras producciones dentro de las que ahora mismo se desarrollan en Europa; la muestra continúa después (hasta el 6 de julio) en la sala Conrado Benítez, de Sancti Spíritu, y finaliza en el Praga (11 al 17 de julio) de Pinar del Río.
“Status Yo!”(2004), ópera prima de Till Hastreiter, fue elegida como première, aunque se repite varias veces durante la semana. El film, coproducido con Suiza, se mueve en el convulso mundo del hip-hop en el Berlín contemporáneo, y para el mismo, el realizador trabajó con actores no profesionales: son jóvenes que se ganan la vida “rapeando” en los pasillos del metro, organizan fiestas o sueñan con volver la inmensa y agitada urbe en un inmenso grafitti; procedentes de países latinos o árabes, tienen que enfrentarse a las costumbres retardatarias de padres y al desprecio de locales (lo mismo organizaciones fascistoides que a gerentes de firmas discográficas, a “padrinos” de drogas o a familiares intransigentes); lo cierto es que la contracultura hip hop en un Berlín excluyente y frío (en todo sentido) sirve de plataforma a esta cinta coral donde, como mérito inicial, sobresale una banda sonora riquísima, para escuchar a ojos cerrados, y que presta su fibra, nervio y energía a los diversos casos que van sucediéndose y alternando en la pantalla (y que, en las excelentes condiciones técnicas del Chaplin, llega en toda su nitidez y precisión).
Ahora bien, como ocurre con toda pieza coral, hay que mantener un pulso narrativo que, a decir verdad, no siempre logra el debutante Hastreiter, pagando así la novatada: el filme se resiente por una desigual labor de montaje, un irregular tratamiento de las diferentes historias que no se plasman con la misma felicidad ni se integran coherentemente al discurso.
A persar de lo cual, “Status yo!” logra más de un momento de altísima concentración dramática y estimable fuerza en las imágenes, como mismo consigue hallar un justo equilibrio entre pasajes humorísticos y otros muy graves; la pericia aludida en el diseño y plasmación de la banda sonora, se consigue también en la dirección de esos actores amateurs que, en términos generales, logran desenvolverse con una espontaneidad y una gracia que trasciende el plano danzario-musical para abarcar todo el nivel histriónico, y ello, a pesar de que casi todos los personajes sobresalen por una acertada y nada superficial construcción sicológica.
Pero las expectativas de la semana no finalizan, ni con mucho, con éste, su satisfactorio inicio; al parecer, los cinéfilos tendrán más de un motivo para el recocijo cuando se enfrenten a títulos que “pintan” muy bien, como “Perdido y encontrado” (2004 –2005), que contó con una extensa nómina de países participantes además de Alemania (Estonia, Bulgaria, Rumanía, Hungría, Bosnia-Herzegovina, etc) y que enlaza varios cuentos, desarrollados en alguno de esos sitios, mediante un animado; fue producida por una compañía germana que fomenta y acoge proyectos artÍsticos procedentes de Europa del Este y Central, y ya compitió en Mar del Plata, Argentina.
También se incluye una pieza de Fatih Akin (“Al otro lado”) que viene avalada por importantes premios en Berlín (nada menos que el Oso de Oro entre ellos) y España (Goya al mejor filme europeo): “Contra la pared”, que describe una atormentada historia de amor entre un alemán recluído en una clínica siquiátrica y una joven de ascendientes turcos que necesita huir de su conservadora familia.
Otra sobre parejas disfuncionales y raras es “Angustia” (2002), de Oskar Roehler, esta vez entre un egocéntrico dramaturgo teatral, su despreciada mujer y una prostituta a la que acude el primero; cinta que compitió oficialmente en Berlín y confirió a Marie Bäumer, la elección de mejor actriz del año por los críticos alemanes.
“Fantasmas” (2005), de Christian Petzold, “habla esencialmente –según el crítico Hans Günter Pflaum- de la pérdida y la añoranza: la pérdida de personas y de la realidad y la añoranza de que las cosas sean diferentes...” mediante las aventuras de dos amigas de conductas antisociales, mientras “Kebab Connection”(2005), de Anno Soul, mezcla el mundo de la publicidad con el cine de kung-fu, y “El juego de Zucker”, del mismo año, se anuncia como una comedia de humor negro que relaciona a un jugador empedernido y experiodista deportivo con la familia de su hijo y su madre, recien fallecida.
- © Frank Padrón (Cuba)-NOTICINE.com