Colaboración: Cortos cortos
- por © NOTICINE.com
Por Josep María Jolis
Una de mis debilidades en literatura es el relato breve. El cuento. La fuerza expresiva, su originalidad, su capacidad para crear situaciones (fantásticas y cotidianas), sus finales… en el mundo literario se distingue entre escritores de cuentos y novelas. En cambio en el mundo del cine la situación es distinta: el equivalente al cuento (el cortometraje) no parece un formato con autonomía artística; se ve como el paso intermedio hacia el largometraje.
Me gustan los cortometrajes. Pero ojo, no por eso he titulado el artículo con redundancia. Lo he hecho por otra cuestión: ¿no es una desgracia que un corto se te haga largo, como decía Alfonso Sánchez? He asistido a muchos festivales de cortos y mi sensación personal es que algunos cortometrajes son demasiado largos, con muchas cosas por contar (o lo contrario), muchos medios técnicos pero al final (si sigues despierto) te quedas indiferente.
Un corto (para mí) debe ser breve, con un punto de partida original, un desarrollo ágil, divertido y con un final que te sorprenda. Es mucho mejor quedarte con la miel en los labios, con un “me habría gustado ver más”, que con un “esto no se acaba nunca”.
Estos días se celebra en la villa catalana de Torelló el Fescurts, un festival especializado en cortos de comedia. El Fescurts es modesto en presupuesto pero ideal en planteamiento: ver cortos de humor por la noche, al aire libre (sentado en tumbonas), tomando una bebida (tal vez alcohólica para soportar algunos cortos largos). Ahora mismo, cuando termine el artículo, iré para allá. Iré degustando y si me aburro me pondré a pensar en la situación de este país: una panda de cortos cortos que han conseguido vivir del cuento.
SI QUIERES COMENTAR ESTA INFORMACIÓN, VEN A NUESTRO FACEBOOK... O SIGUENOS A TRAVÉS DE TWITTER: @NOTICINEcom
Una de mis debilidades en literatura es el relato breve. El cuento. La fuerza expresiva, su originalidad, su capacidad para crear situaciones (fantásticas y cotidianas), sus finales… en el mundo literario se distingue entre escritores de cuentos y novelas. En cambio en el mundo del cine la situación es distinta: el equivalente al cuento (el cortometraje) no parece un formato con autonomía artística; se ve como el paso intermedio hacia el largometraje.
Me gustan los cortometrajes. Pero ojo, no por eso he titulado el artículo con redundancia. Lo he hecho por otra cuestión: ¿no es una desgracia que un corto se te haga largo, como decía Alfonso Sánchez? He asistido a muchos festivales de cortos y mi sensación personal es que algunos cortometrajes son demasiado largos, con muchas cosas por contar (o lo contrario), muchos medios técnicos pero al final (si sigues despierto) te quedas indiferente.
Un corto (para mí) debe ser breve, con un punto de partida original, un desarrollo ágil, divertido y con un final que te sorprenda. Es mucho mejor quedarte con la miel en los labios, con un “me habría gustado ver más”, que con un “esto no se acaba nunca”.
Estos días se celebra en la villa catalana de Torelló el Fescurts, un festival especializado en cortos de comedia. El Fescurts es modesto en presupuesto pero ideal en planteamiento: ver cortos de humor por la noche, al aire libre (sentado en tumbonas), tomando una bebida (tal vez alcohólica para soportar algunos cortos largos). Ahora mismo, cuando termine el artículo, iré para allá. Iré degustando y si me aburro me pondré a pensar en la situación de este país: una panda de cortos cortos que han conseguido vivir del cuento.
SI QUIERES COMENTAR ESTA INFORMACIÓN, VEN A NUESTRO FACEBOOK... O SIGUENOS A TRAVÉS DE TWITTER: @NOTICINEcom