Terrores mexicanos en la Cineteca
- por © Edna Campos-NOTICINE.com
15-VIII-03
El cine de horror en México será el tema que trate la Charla de Café de la Cineteca Nacional mexicana el martes 19 a las 17:00 hrs en el lobby de la Sala 4, Arcady Boytler. En ella participarán los especialistas Mauricio Matamoros, Leopoldo Laborde, Carlos González y Edna Campos. Esta última, directora del II Festival de Horror en Cine y Video: Macabro 2003 ha escrito este texto introductorio que por su interés reproducimos:
El horror en el cine ha existido desde sus inicios como industria, espectáculo y arte: Obras de arte que subliman el miedo y la angustia mas oscura del alma, así como churros abominables que mas bien nos hacen no querer volvernos a parar en un cine por lo menos en un año. Dentro de las primeras, ubicamos películas que conformaron corrientes como el expresionismo alemán que aportó entre otras cosas la atmósfera y la estética del horror con joyas como "El Gabinete del Dr. Caligari" (Robert Wiene, 1919), "El Golem" (Paul Wegener y Karl Boese, 1920), "Nosferatu", (F.W. Maurnau, 1922) etc.
Más adelante ya con el sonido y el color integrados al celuloide nos llegaron diversas películas de los estudios de Hollywood en los 30 y los 40 y de la productora inglesa Hammer Films en los 50 y 60 que produjeron películas inspiradas en historias salidas de la literatura como "Frankenstein" (1931) de James Whale, considerada hasta el momento la versión definitiva de este personaje; "Drácula" (Tod Browning, 1931) protagonizada por Bela Lugosi y por supuesto la consagración del más grande director de suspenso: Alfred Hitchcock.
A partir de los últimos años de la decada de los 60 y hasta los 80, en Italia surge un movimiento a partir de una colección de libros policíacos llamados Giallo. Varios cineastas (Mario Bava, Dario Argento, Pupi Avati, entre otros) le dan forma a un género con grandes salpicadas de sangre en la pantalla, miembros despedazados e historias cargadas de morbo y sexualidad. Este movimiento influyó a cinematografías como la española y la de Hollywood en donde empezaron a aparecer cintas de psicópatas, en las cuales los protagonistas generalmente eran asesinos deschavetados que no dejaban en paz a nadie, ni siquiera después de su muerte (ver el caso de Jason en "Viernes 13" - Sean S. Cunningham, 1980 ).
Actualmente, el género de horror, se ha retomado con gran entusiasmo a partir del lanzamiento de la película "The Blair witch project" (Eduardo Sánchez y Daniel Myrick, 1999), cuyo éxito ha hecho que los nuevos cineastas vuelvan a trabajar con el miedo, la oscuridad y la sangre, influidos por la historia del cine, destacándose entre estos, la actual producción japonesa de cine de horror.
En México, el horror aparentemente ha pasado sin pena ni gloria, generalmente despreciado por los especialistas y ante un publico acostumbrado más al melodrama que a la fantasía, este género ha dado películas importantes como "Dos monjes" (1934) de Juan Bustillo Oro, que retoma la estética expresionista importada de Alemania; "El vampiro" de Fernando Mendez (1957), mejor conocida como la versión mexicana de "Drácula".
Las famosas cintas de luchadores protagonizadas por El Santo (En la primera edición de Macabro, se exhibió por primera vez en México la película "Jesucristo cazador de vampiros" (1999), del canadiense Lee Demarbre, en la cual se retoma el fenómeno del Santo como héroe y nos hace reflexionar de la trascendencia de este personaje fuera de nuestro país); así como las películas de Carlos Enrique Taboada, quien trabajó bastante cerca de este género en películas como "Más negro que la noche" (1975) y "Veneno para las hadas" (1984) - incluida en la programación de esta edición de Macabro-, entre muchas otras.
En nuestros días encontramos el trabajo de Guillermo del Toro ("Cronos", 1993) y Leopoldo Laborde ("Ángeluz", 1998); así como diversos experimentos en cortometraje que por su técnicas y/o formatos no han llegado a la pantallas. De esto, tendremos una muestra dentro de Macabro en los programas de cortometraje: Historias de terror I y II; así como en Relatos de locura y enfermedad y Leyendas sobrenaturales. Hay mucho más material del cual se puede hablar y que por falta de espacio es imposible mencionar, sin embargo, la invitación a esta charla es para abundar en el tema, revisar su historia, su aportación y sobre todo la trascendencia en la historia de nuestro cine. Adorado por sus seguidores y despreciado por un buen numero de críticos, no podemos negar que el horror es un género que provoca pasión en sus fanáticos y gran curiosidad en el resto de la gente. Después de todo, todos tenemos un lado oscuro.
El cine de horror en México será el tema que trate la Charla de Café de la Cineteca Nacional mexicana el martes 19 a las 17:00 hrs en el lobby de la Sala 4, Arcady Boytler. En ella participarán los especialistas Mauricio Matamoros, Leopoldo Laborde, Carlos González y Edna Campos. Esta última, directora del II Festival de Horror en Cine y Video: Macabro 2003 ha escrito este texto introductorio que por su interés reproducimos:
El horror en el cine ha existido desde sus inicios como industria, espectáculo y arte: Obras de arte que subliman el miedo y la angustia mas oscura del alma, así como churros abominables que mas bien nos hacen no querer volvernos a parar en un cine por lo menos en un año. Dentro de las primeras, ubicamos películas que conformaron corrientes como el expresionismo alemán que aportó entre otras cosas la atmósfera y la estética del horror con joyas como "El Gabinete del Dr. Caligari" (Robert Wiene, 1919), "El Golem" (Paul Wegener y Karl Boese, 1920), "Nosferatu", (F.W. Maurnau, 1922) etc.
Más adelante ya con el sonido y el color integrados al celuloide nos llegaron diversas películas de los estudios de Hollywood en los 30 y los 40 y de la productora inglesa Hammer Films en los 50 y 60 que produjeron películas inspiradas en historias salidas de la literatura como "Frankenstein" (1931) de James Whale, considerada hasta el momento la versión definitiva de este personaje; "Drácula" (Tod Browning, 1931) protagonizada por Bela Lugosi y por supuesto la consagración del más grande director de suspenso: Alfred Hitchcock.
A partir de los últimos años de la decada de los 60 y hasta los 80, en Italia surge un movimiento a partir de una colección de libros policíacos llamados Giallo. Varios cineastas (Mario Bava, Dario Argento, Pupi Avati, entre otros) le dan forma a un género con grandes salpicadas de sangre en la pantalla, miembros despedazados e historias cargadas de morbo y sexualidad. Este movimiento influyó a cinematografías como la española y la de Hollywood en donde empezaron a aparecer cintas de psicópatas, en las cuales los protagonistas generalmente eran asesinos deschavetados que no dejaban en paz a nadie, ni siquiera después de su muerte (ver el caso de Jason en "Viernes 13" - Sean S. Cunningham, 1980 ).
Actualmente, el género de horror, se ha retomado con gran entusiasmo a partir del lanzamiento de la película "The Blair witch project" (Eduardo Sánchez y Daniel Myrick, 1999), cuyo éxito ha hecho que los nuevos cineastas vuelvan a trabajar con el miedo, la oscuridad y la sangre, influidos por la historia del cine, destacándose entre estos, la actual producción japonesa de cine de horror.
En México, el horror aparentemente ha pasado sin pena ni gloria, generalmente despreciado por los especialistas y ante un publico acostumbrado más al melodrama que a la fantasía, este género ha dado películas importantes como "Dos monjes" (1934) de Juan Bustillo Oro, que retoma la estética expresionista importada de Alemania; "El vampiro" de Fernando Mendez (1957), mejor conocida como la versión mexicana de "Drácula".
Las famosas cintas de luchadores protagonizadas por El Santo (En la primera edición de Macabro, se exhibió por primera vez en México la película "Jesucristo cazador de vampiros" (1999), del canadiense Lee Demarbre, en la cual se retoma el fenómeno del Santo como héroe y nos hace reflexionar de la trascendencia de este personaje fuera de nuestro país); así como las películas de Carlos Enrique Taboada, quien trabajó bastante cerca de este género en películas como "Más negro que la noche" (1975) y "Veneno para las hadas" (1984) - incluida en la programación de esta edición de Macabro-, entre muchas otras.
En nuestros días encontramos el trabajo de Guillermo del Toro ("Cronos", 1993) y Leopoldo Laborde ("Ángeluz", 1998); así como diversos experimentos en cortometraje que por su técnicas y/o formatos no han llegado a la pantallas. De esto, tendremos una muestra dentro de Macabro en los programas de cortometraje: Historias de terror I y II; así como en Relatos de locura y enfermedad y Leyendas sobrenaturales. Hay mucho más material del cual se puede hablar y que por falta de espacio es imposible mencionar, sin embargo, la invitación a esta charla es para abundar en el tema, revisar su historia, su aportación y sobre todo la trascendencia en la historia de nuestro cine. Adorado por sus seguidores y despreciado por un buen numero de críticos, no podemos negar que el horror es un género que provoca pasión en sus fanáticos y gran curiosidad en el resto de la gente. Después de todo, todos tenemos un lado oscuro.