Steven Soderbergh se convierte en importador del singani boliviano en EEUU

por © Redacción-NOTICINE.com
El anuncio del singani de Soderbergh
Cuenta el ganador del Oscar Steven Soderbergh, que descubrió el singani, un tipo de brandy doblemente destilado a partir de uvas moscatel de Alejandría en el sur de Bolivia, gracias al cineasta local Rodrigo Bellot, quien se ocupó del casting de su díptico sobre Che Guevara. Rodando ambos en Bolivia, le dio a probar la bebida alcohólica, que sorprendió gratamente al cineasta, retirado oficialmente en este momento, por su suavidad. Cinco años después, el autor de "Traffic" se ha convertido en importador para Estados Unidos de una marca que las bodegas Casa Real han etiquetado especialmente para él como "Singani 63".

"Flipé completamente con el singani, al igual que otros miembros del equipo. El operador de cámara Gary Jay me dijo: 'Steeeevn, tendrías que conseguir esta mierda en los EU'. Casa Real, la empresa matriz, accedió a darme una concesión especial y una marca que sólo yo puedo vender ("Singani 63")", ha escrito Soderbergh.

El cineasta detalla que a él le gusta sólo con hielo, "porque no arde en la garganta y tiene un aroma muy sutil y placentero" pero que cree que se puede mezclar con otros bebidas, aunque alerta que precisamente por ser tan suave "se bebe como agua" y si te pasas "te vuelves invisibles". Eso sí, asegura que "nunca me ha dado resaca".

En realidad, en Bolivia el singani se suele combinar con Ginger Ale o gaseosa de limón, limón y hielo (lo llaman "Chuflay"). El que fabrica la firma Casa Real es el más vendido en el país andino, con origen en la región sureña de Tarija.

"Es posible -comenta Soderbergh- que sus cualidades únicas son el resultado de ser destilado a unos 15 000 pies de altura, pero eso es sólo una teoría. Hay una zona de 20 000 hectáreas en Bolivia, donde se hace el singani, y si no se destila allí, no se puede llamar singani, como ocurre con el champagne o el coñac en Francia".

En el anuncio para promocionar su brandy, el realizador y guionista aparece elegantemente trajeado, sentado en un salón, al lado de una oveja. El texto dice: "Beba todo el que quiera. Simplemente no conduzca luego. O pilote un avión".

Steven Soderbergh, que acaba de estrenar su última película antes de retirarse indefinidamente del cine, ha adquirido cerca de 15 000 botellas de su "Singani 63", y se propone venderlas inicialmente en Nueva York y California.