Kenya Márquez estrena finalmente en México "Fecha de caducidad"

por © Correcamara.com-NOTICINE.com
Murguía, Alcázar y Márquez
Casi dos años después de su primera proyección en el Festival de Morelia, llega por fin a las salas comerciales mexicanas la opera prima de la que fuera directora del Festival de Guadalajara y cortometrajista Kenya Márquez, "Fecha de caducidad", una comedia negra con estelar reparto de grandes nombres de la actuación nacional, que compensó su muy larga gestación con un importante número de premios internacionales, incluido uno de los máximos galardones en el Festival de Moscú, el año pasado.

La vida de Ramona (Ana Ofelia Murguía) cambia radicalmente cuando su único hijo (Eduardo España) desaparece. La búsqueda que comienza Ramona la llevará a sospechar de un hombre obsesionado con la nota roja (crónica de sucesos), Genaro (Damián Alcázar), y a encontrar nuevas pistas gracias a una extraña mujer (Marisol Centeno). Esta es la premisa de la película de humor negro, "Fecha de caducidad”, que se estrena este viernes.

La película mexicana ha sido ganadora del Premio del público en el Festival Internacional de Cine de Morelia, del Premio Especial del Jurado, San Jorge de Plata, en el Festival de Moscú,  Lexus Iberoamerican Opera Prima del Miami International Film Festival, entre otros.

Su directora, Kenya Márquez, explicó a CorreCamara.com que "Tenía la sensación de que no tendría suerte en su estreno con el público, porque sentía que no se iba a entender. Pero después del Festival de Morelia y ganar el Premio del Público confirmé que había sido un acierto hacer la estructura de rompecabezas que tiene la película y que podría tener buena suerte en México. Mi productora, junto con el distribuidor, insistió para inscribirla en festivales. La película ha viajado a alrededor de cincuenta festivales en los cuales ha obtenido 17 premios entre nacionales e internacionales".

Sin embargo, la cineasta mexicana matiza que independientemente de los reconocimientos, "lo que más me gratifica es que pude contar la historia que buscaba. Además, que no sólo llegue al espectador mexicano, sino que traspase fronteras y puede ser entendida tanto por un ruso como por un brasileño. Porque la historia de una madre que pierde a su hijo es universal, un chino puede sentir lo mismo que un mexicano ante esta pérdida".

Sobre la creación de la historia, Márquez detalla: "Yo quería contar una historia de amor aunque parezca raro.  De diferentes tipos de amor, del de una madre a su hijo, el de una mujer hacia su esposo y el de un hombre que está en su búsqueda. Todo llevándolo hasta el límite, plantear hasta dónde te puede llevar la pérdida de un hijo y cuál es el límite de permitir ciertas circunstancias cuando amas a alguien. Ese era un trabajo que quería desarrollar y paralelamente era una premisa que me movía: cómo a partir de tu apariencia el ser humano se crea un juicio, a veces perverso y fatal".

"Por ejemplo -agrega-, puedes encontrarte con un vagabundo y pensar que es un asesino y después encontrarte con una persona de traje quien en realidad es el asesino. Yo personalmente lo viví y me dejó marcada por eso lo quise desarrollar en mi ópera prima, con otros temas que me preocupan como la violencia contra mujeres, la corrupción, qué México sea el país donde no pasa nada, el matriarcado de la mujer mexicana; sin que hubiera tanta violencia, porque ya es tan fuerte lo que nos pasa en México que sólo lo haría de una manera sutil".

La directora por años de la Muestra (luego Festival) de su ciudad natal, Guadalajara, se siente especialmente del elenco que pudo reunir. "Trabajé con Damián y Ana Ofelia en 1998 en mi primer cortometraje, que se llama "Cruz”; fue tan grato trabajar con ellos y como son grandes actores sabía que mi primer largometraje lo haría con ellos dos. Como mi protagonista era una madre también estaba segura que tenía que ser Ana Ofelia. Tenemos un trabajo de cómplices y amigos, ambos pese a su gran trayectoria son actores muy nobles que se inmiscuyen totalmente en la historia y se dejan llevar por el director, aunque se trate de su ópera prima y no sea un director reconocido. Ellos son actores que confían en la película y el guion. Eso fue lo importante para mí, porque es una historia rara con humor negro. En el caso de Marisol fue un encuentro muy grato porque es una actriz que tiene mucha sensibilidad y un trabajo riguroso, hace una construcción de su personaje minuciosamente".