Alejandro Jodorowsky, perdido en el espacio

por © Redacción-NOTICINE.com
Jodorowsky tiene su asteroide
El cineasta chileno afincado en Francia Alejandro Jodorowsky, quien recientemente y tras años de silencio fílmico estrenó un film autobiográfico, "La danza de la realidad", ha logrado llevar su fama más lejos que la de cualquier estrella de cine, al espacio infinito... y más allá. El responsable de films como "El Topo", "Santa sangre" o "La Montaña sagrada", guionista de comics de Moebius y frustrado adaptador del clásico de la ciencia-ficción "Dune," pondrá nombre (apellido más bien) a un asteroide de unas tres millas de ancho que flota en un cinturón de asteroides entre Marte y Jupiter, el cual se llamará 261690 Jodorowsky.

El responsable del bautizo no es en realidad el propio cineasta, psicomago y tarotista, sino un astrónomo francés, Jean-Claude Merlin, quien en las navidades de 2005, y a través de internet, estaba explorando el espacio por medio de un telescopio situado en Arizona (EEUU), y descubrió el cuerpo celeste en cuestión, el cual no tenía nombre ni dueño. A partir de ahí se puso en contacto con el Minor Planets Center, de la Unión Astronómica Internacional, para registrar su hallazgo, y como admirador de la obra del chileno afincado en su país, pensó apellidarlo como él.

La propuesta fue aceptada por el comité de denominaciones al final del pasado julio, y ahora la editora francesa de la obra de Jodorowsky, Les Humanoides Associés, lo ha dado a conocer. No obstante, aún faltan pasos en el proceso de estudio y observación del asteroide y en el reconocimiento oficial del nombre, hasta que sea definitivamente catalogado como 261690 Jodorowsky.

No son muchos los profesionales del espectáculo y la cultura que tienen sus nombres adornando pedruscos sueltos por el espacio. Los más conocidos son los Beatles, el padre de la Tierra Media J.R.R. Tolkein y el "crooner" por excelencia, Frank Sinatra.

En una reciente entrevista sobre su regreso al cine tras más de dos décadas, Jodorowsky, de 84 años, decía: "Durante todos estos años he desarrollado muchas actividades: escribí cómics y libros, di conferencias... No me sentía un fracasado, pero cada vez que veía en casa una película, algo que hago a diario, lo echaba de menos. Y es que el cine es otra cosa... Yo siempre he pensado que es la más completa de todas las artes, en la cual yo podía realizarme más plenamente. También es, sin embargo, la más cara de las artes. Hoy en día, lo que domina son las películas que tratan de ganar dinero. ¿Por qué no? Como se suele decir: "Si Dios te manda un pastel, ¡abre la boca!". Así que si mi nueva película ("La danza de la realidad") funciona, será maravilloso ... Pero esa no puede ser la única motivación".