El éxito del teatro y cine boricua "Por amor en el caserío" llega a Estados Unidos
- por © Cristina F. Fimia-NOTICINE.com
Tras el éxito cosechado en Puerto Rico (más de 60 000 espectadores), la película "Por amor en el caserío" llega a Norteamérica. El proyecto, que nació en el escenario teatral y luego se adaptó a la pantalla, fue realizado por Luis Enrique Rodríguez, y se presentará esta semana en el John Jay College en Manhattan, el Lehman College en el Bronx, el Museo de Ciencia en Philadelphia y en el Hostos Community College en el Bronx. Antonio Morales, autor de la obra, guionista y productor ejecutivo del film, se ha declarado "súper emocionado y orgulloso por esta nueva etapa".
"Por amor en el caserío" cuenta la historia de Cristal y Ángelo, dos jóvenes que luchan por sus sentimientos pese a que sus familiares lideran los dos puntos de drogas enemigos dentro de la comunidad donde viven. Esta versión de "Romeo y Julieta" del siglo XXI nació en el teatro en 2001 como una obra musical con la intención de lograr un cambio en una comunidad y sus jóvenes. Quién le iba a decir al autor que tiempo después su obra llegaría a los cines.
Morales, todavía sin creerse el éxito, comentó: "Estamos orgullosos de comunicarles que nuestra película ya está lista para estrenar y que con ella el movimiento social de "Por Amor en el Caserío" tiene más fuerza que nunca. Confiamos, que el mensaje transformador continuará impactando vidas dentro y fuera de Puerto Rico. Sobre la película, queremos que tenga una buena acogida y que esas salas no se vacíen apoyando a nuestros jóvenes y al cine puertorriqueño".
Los actores son en su mayoría son los mismos que actuaban en la versión teatral, jóvenes procedentes de "caseríos" que a través de la interpretación, han logrado escoger un camino positivo. El guionista habló sobre la idea de llevar a cabo la cinta: "En el caserío nunca se vio el arte como una opción, pero la obra empezó a crecer y recibimos invitaciones en otros sitios para presentarla. Fue entonces cuando nos pusimos la meta de querer hacer la película. Empezamos haciendo una cinta tipo guerrilla con la que nos descocotamos, pero de allí saqué un demo y los estudios empezaron a llamar".
Al ser preguntado sobre la relación entre el film y su propia vida, el creador respondió: "Tiene mucho de mi vida, es adaptada a la realidad de lo que vivimos en los residenciales públicos. Llorens (el caserío) era un sitio muy infame por todas las noticias de crimen, droga y violencia. Allí es donde me crié y ayudé a criar a mis hermanitos. Mientras leía "Romeo y Julieta" la asociaba mucho con las vivencias de mi comunidad, por eso escribí la obra".
A ello, añadió algo crucial: "Mi padre fue el traficante mayor de uno de los dos bandos de drogas de mi caserío, y como soy hijo de un narcotraficante tengo mucho que contar, pero no quería hacer una historia más de violencia, quería que abundara el amor".
El puertorriqueño cree haber contribuido en parte a erradicar ciertos aspectos de esa cruel realidad: "Hemos creado vulnerabilidad en los corazones de los muchachos. Esta guerra entre puntos que comenzó en la época de mi padre, quien ahora está encarcelado en una prisión federal, hoy día luego de 20 años no existe. No puedo decir que se debe exclusivamente a nuestra obra de teatro, pero si hubo muchos elementos que cayeron en el lugar preciso, así que hizo su parte".
"El personaje principal, el Romeo, llega al caserío de un pueblo bien distante en Puerto Rico tras la muerte de su madre. Tiene que ir a vivir con su tía que es la madre de uno de los traficantes. En la vida real, mi madre era adicta a las drogas y murió, así que mi hermanito tuvo que vivir con mi tía, y da la casualidad que mi hermanito es el Romeo de la película, así que realmente pasó por eso. Inclusive, en una parte de la película él mira la foto de su mamá que es una imagen real de nuestra madre", relató Molina.
"Por amor en el caserío" cuenta la historia de Cristal y Ángelo, dos jóvenes que luchan por sus sentimientos pese a que sus familiares lideran los dos puntos de drogas enemigos dentro de la comunidad donde viven. Esta versión de "Romeo y Julieta" del siglo XXI nació en el teatro en 2001 como una obra musical con la intención de lograr un cambio en una comunidad y sus jóvenes. Quién le iba a decir al autor que tiempo después su obra llegaría a los cines.
Morales, todavía sin creerse el éxito, comentó: "Estamos orgullosos de comunicarles que nuestra película ya está lista para estrenar y que con ella el movimiento social de "Por Amor en el Caserío" tiene más fuerza que nunca. Confiamos, que el mensaje transformador continuará impactando vidas dentro y fuera de Puerto Rico. Sobre la película, queremos que tenga una buena acogida y que esas salas no se vacíen apoyando a nuestros jóvenes y al cine puertorriqueño".
Los actores son en su mayoría son los mismos que actuaban en la versión teatral, jóvenes procedentes de "caseríos" que a través de la interpretación, han logrado escoger un camino positivo. El guionista habló sobre la idea de llevar a cabo la cinta: "En el caserío nunca se vio el arte como una opción, pero la obra empezó a crecer y recibimos invitaciones en otros sitios para presentarla. Fue entonces cuando nos pusimos la meta de querer hacer la película. Empezamos haciendo una cinta tipo guerrilla con la que nos descocotamos, pero de allí saqué un demo y los estudios empezaron a llamar".
Al ser preguntado sobre la relación entre el film y su propia vida, el creador respondió: "Tiene mucho de mi vida, es adaptada a la realidad de lo que vivimos en los residenciales públicos. Llorens (el caserío) era un sitio muy infame por todas las noticias de crimen, droga y violencia. Allí es donde me crié y ayudé a criar a mis hermanitos. Mientras leía "Romeo y Julieta" la asociaba mucho con las vivencias de mi comunidad, por eso escribí la obra".
A ello, añadió algo crucial: "Mi padre fue el traficante mayor de uno de los dos bandos de drogas de mi caserío, y como soy hijo de un narcotraficante tengo mucho que contar, pero no quería hacer una historia más de violencia, quería que abundara el amor".
El puertorriqueño cree haber contribuido en parte a erradicar ciertos aspectos de esa cruel realidad: "Hemos creado vulnerabilidad en los corazones de los muchachos. Esta guerra entre puntos que comenzó en la época de mi padre, quien ahora está encarcelado en una prisión federal, hoy día luego de 20 años no existe. No puedo decir que se debe exclusivamente a nuestra obra de teatro, pero si hubo muchos elementos que cayeron en el lugar preciso, así que hizo su parte".
"El personaje principal, el Romeo, llega al caserío de un pueblo bien distante en Puerto Rico tras la muerte de su madre. Tiene que ir a vivir con su tía que es la madre de uno de los traficantes. En la vida real, mi madre era adicta a las drogas y murió, así que mi hermanito tuvo que vivir con mi tía, y da la casualidad que mi hermanito es el Romeo de la película, así que realmente pasó por eso. Inclusive, en una parte de la película él mira la foto de su mamá que es una imagen real de nuestra madre", relató Molina.