Preparan nueva película sobre el atentado de la AMIA en Buenos Aires
- por © Redacción (Argentina)-NOTICINE.com
Mientras está muy reciente la participación en varios festivales de la coproducción latinoamericana "Esclavo de Dios", y años atrás el tema fue indirecta inspiración para la cinta de Marcos Carnevale "Anita", el terrible atentado en Buenos Aires contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), que en 1994 provocó 85 víctimas mortales, regresará al cine de la mano de Pablo Bustos, en un proyecto de ficción -"El azote del diablo"- que se espera filmar en junio del año que viene, con un elenco que incluirá a Patricio Contreras, Juan Gil Navarro, Dalma Maradona, Hernan Piquin, Luciano Caseres y Leonor Manzo.
El film, coescrito por Bustos y Fabio Fernando Varela y de producción totalmente argentina (Cruz del Sur Cine), narra la historia de Abel, un taxista sobreviviente en el atentado a la AMIA, quien relata la vida de las víctimas. Comparte con sus colegas las horas antes y después del atentado, dejando de lado las estadísticas y convirtiendo su narración en una épica sobre el horror y la solidaridad.
"En el año 1994, el día 18 de julio -explica Pablo Bustos, quien ha sido colaborador de Damián Szifrón y ha codirigido la aún inédita "Cuatro de copas"- me encontraba viviendo en un edificio ubicado en la calle Ayacucho, a tres cuadras y media del lugar que sufrió el atentado, y pude sentir en carne propia todo el poder de la explosión, ya que todo mi edificio tembló completamente durante unos segundos y mis oídos también experimentaron el estruendo de la bomba. Desde ese momento comencé a reflexionar sobre los motivos que podían llevar a alguien a cometer un acto de ese tipo, sobre todo, el tratamiento que le dio parte de la sociedad al tema, ya que durante años se habló del “atentado a los judíos”, algo que siempre me ubicó en la vereda de enfrente, en cuanto a la opinión de esa parte de la sociedad antes citada".
El productor, director y guionista afirma que con "El azote del diablo" no pretende "agregar más leña al fuego, en cuanto al odio y las ganas de revancha, ni remover viejas heridas, sino todo lo contrario, tratar de rescatar lo bueno detrás de tanto horror, y la forma que elegí para hacerlo es homenajear a las víctimas, contando cómo eran sus vidas horas antes, durante y horas después del atentado".
Entre los desafíos de la producción está el reproducir el atentado en sí. "Será la explosión más importante filmada en Latinoamérica por su dimensión y detallismo", aseguran los productores.
El film, coescrito por Bustos y Fabio Fernando Varela y de producción totalmente argentina (Cruz del Sur Cine), narra la historia de Abel, un taxista sobreviviente en el atentado a la AMIA, quien relata la vida de las víctimas. Comparte con sus colegas las horas antes y después del atentado, dejando de lado las estadísticas y convirtiendo su narración en una épica sobre el horror y la solidaridad.
"En el año 1994, el día 18 de julio -explica Pablo Bustos, quien ha sido colaborador de Damián Szifrón y ha codirigido la aún inédita "Cuatro de copas"- me encontraba viviendo en un edificio ubicado en la calle Ayacucho, a tres cuadras y media del lugar que sufrió el atentado, y pude sentir en carne propia todo el poder de la explosión, ya que todo mi edificio tembló completamente durante unos segundos y mis oídos también experimentaron el estruendo de la bomba. Desde ese momento comencé a reflexionar sobre los motivos que podían llevar a alguien a cometer un acto de ese tipo, sobre todo, el tratamiento que le dio parte de la sociedad al tema, ya que durante años se habló del “atentado a los judíos”, algo que siempre me ubicó en la vereda de enfrente, en cuanto a la opinión de esa parte de la sociedad antes citada".
El productor, director y guionista afirma que con "El azote del diablo" no pretende "agregar más leña al fuego, en cuanto al odio y las ganas de revancha, ni remover viejas heridas, sino todo lo contrario, tratar de rescatar lo bueno detrás de tanto horror, y la forma que elegí para hacerlo es homenajear a las víctimas, contando cómo eran sus vidas horas antes, durante y horas después del atentado".
Entre los desafíos de la producción está el reproducir el atentado en sí. "Será la explosión más importante filmada en Latinoamérica por su dimensión y detallismo", aseguran los productores.