Guillermo del Toro celebra con carnitas, en Guadalajara, su 50 cumpleaños
- por © Fernando S. Recio-NOTICINE.com
El cineasta mexicano aprovechó la visita promocional al país natal por su nuevo trabajo como productor, "El libro de la vida / The Book of Life", para acercarse a su ciudad, Guadalajara, y celebrar en la capital de Jalisco, comiendo carnitas en un restaurante junto a su familia y allegados, el cincuenta aniversario de su nacimiento el día 9 de octubre de 1964. Las "Mañanitas" esta vez no le sonaron con acento gringo, aunque pase en Estados Unidos buena parte del año.
En declaraciones a la agencia Reforma, el siempre ocupado "Memo", contó que este cumpleaños le hizo "voltear para atrás y para adelante y asustarme. Sí me pongo a reflexionar, pero ahorita me es difícil, porque en la vida uno se la pasa mucho divirtiendo un rato y esperando mucho rato", indicó el productor, realizador y guionista tapatío, cuyos proyectos se acumulan.
Ya de joven Del Toro se comenzó a interesar por las películas de miedo y terror. A mediados de los años 80 empezó a rodar cortos de esta temática como pueden ser "Doña Lupe", de 1985, y "Geometría", de 1987. Estudió efectos especiales con el reconocido Dick Smith, ganador del premio Oscar por "Amadeus", y que ha participado en cintas como Poltergeist o "El exorcista / The Exorcist". También estudió cine en el Centro de Investigación y Estudios Cinematográficos en Guadalajara.
Su primera producción llegó a la edad de 20 años con "Doña Herlinda y su hijo". Su obra más importante por aquel entonces fue una serie de televisión que se llamaba "La hora marcada" que se prolongó desde 1986 hasta 1990 y donde trabajó como escritor, director y encargado de los efectos especiales.
En 1993 llevó a cabo su ópera prima "Cronos". La película giraba en torno a la historia de un aparato que fue creado por un alquimista medieval y en cuyo interior yacía un insecto, el cual se alimenta de sangre y tiene el poder de ofrecer la eterna juventud. La película la interpretaron Federico Luppi y Ron Perlman, entre otros, y fue un éxito rotundo de crítica.
En 1997, llevó a cabo su segunda obra, y la primera en EEUU, "Mimic", escrita y dirigida por él completamente en inglés, la que le brindó fama internacional a pesar de no ser un éxito. Aquí se cuenta la historia de una epidemia provocada por cucarachas en Nueva York. Esta epidemia trae consigo una enfermedad que afecta a los niños. Su siguiente incursión como director fue "El espinazo del diablo", en 2001. Este film está ambientado en el final de la Guerra Civil Española y contó con las actuaciones de Federico Luppi, quien ya fue dirigido por el mexicano en su debut, y por el español Eduardo Noriega.
Tras ellas, llevó a cabo "Blade II", en 2002, y "Hellboy", en 2004. Dos años más tarde, Del Toro realizó lo que para muchos es su obra maestra, "El laberinto del fauno", en el año 2006. Esta cinta ambientada en 1944, en plena posguerra española, se hizo con 6 nominaciones a los premios Oscar del año 2007, de los cuales logró alzarse con 3: Mejor fotografía, Mejor dirección artística y Mejor maquillaje.
Además de dirigir, Guillermo Del Toro es reconocido por su faceta de productor cinematográfico. De este modo ha llevado a cabo bastantes películas de otros directores entre las que destacan "Crónicas", de Sebastián Cordero; "El Orfanato", de Juan Antonio Bayona; "Splice", de Vincenzo Natali; "Biutiful", de Alejandro González Iñarritu; "Mamá", de Andrés Muschietti y "Los ojos de Julia", de Guillem Morales. El mexicano habitualmente busca otro tipo de películas en su faceta de productor que en la de director. Cintas que más allá de su tirón comercial, tengan un mensaje detrás.
El cineasta volvió a dirigir tras un largo periodo en 2013, con el film de ciencia-ficción "Pacific Rim", donde encontramos que desde el mar aparecen unas monstruosas criaturas llamadas Kaiju que inician una guerra. Para combatirlos la humanidad creará unos robots especiales llamados Jaegers.
Ahora está próximo a lanzar en salas de América del Norte y Sur la película animada que le trajo a México, "The Book of Life", dirigida y coescrita por el también mexicano Jorge R. Gutiérrez, y el año que viene estrenará la gótica "Crimson Peak". Además, asumirá las secuelas de su serie "The Strain" y del film "Titanes del Pacífico / Pacific Rim".
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En declaraciones a la agencia Reforma, el siempre ocupado "Memo", contó que este cumpleaños le hizo "voltear para atrás y para adelante y asustarme. Sí me pongo a reflexionar, pero ahorita me es difícil, porque en la vida uno se la pasa mucho divirtiendo un rato y esperando mucho rato", indicó el productor, realizador y guionista tapatío, cuyos proyectos se acumulan.
Ya de joven Del Toro se comenzó a interesar por las películas de miedo y terror. A mediados de los años 80 empezó a rodar cortos de esta temática como pueden ser "Doña Lupe", de 1985, y "Geometría", de 1987. Estudió efectos especiales con el reconocido Dick Smith, ganador del premio Oscar por "Amadeus", y que ha participado en cintas como Poltergeist o "El exorcista / The Exorcist". También estudió cine en el Centro de Investigación y Estudios Cinematográficos en Guadalajara.
Su primera producción llegó a la edad de 20 años con "Doña Herlinda y su hijo". Su obra más importante por aquel entonces fue una serie de televisión que se llamaba "La hora marcada" que se prolongó desde 1986 hasta 1990 y donde trabajó como escritor, director y encargado de los efectos especiales.
En 1993 llevó a cabo su ópera prima "Cronos". La película giraba en torno a la historia de un aparato que fue creado por un alquimista medieval y en cuyo interior yacía un insecto, el cual se alimenta de sangre y tiene el poder de ofrecer la eterna juventud. La película la interpretaron Federico Luppi y Ron Perlman, entre otros, y fue un éxito rotundo de crítica.
En 1997, llevó a cabo su segunda obra, y la primera en EEUU, "Mimic", escrita y dirigida por él completamente en inglés, la que le brindó fama internacional a pesar de no ser un éxito. Aquí se cuenta la historia de una epidemia provocada por cucarachas en Nueva York. Esta epidemia trae consigo una enfermedad que afecta a los niños. Su siguiente incursión como director fue "El espinazo del diablo", en 2001. Este film está ambientado en el final de la Guerra Civil Española y contó con las actuaciones de Federico Luppi, quien ya fue dirigido por el mexicano en su debut, y por el español Eduardo Noriega.
Tras ellas, llevó a cabo "Blade II", en 2002, y "Hellboy", en 2004. Dos años más tarde, Del Toro realizó lo que para muchos es su obra maestra, "El laberinto del fauno", en el año 2006. Esta cinta ambientada en 1944, en plena posguerra española, se hizo con 6 nominaciones a los premios Oscar del año 2007, de los cuales logró alzarse con 3: Mejor fotografía, Mejor dirección artística y Mejor maquillaje.
Además de dirigir, Guillermo Del Toro es reconocido por su faceta de productor cinematográfico. De este modo ha llevado a cabo bastantes películas de otros directores entre las que destacan "Crónicas", de Sebastián Cordero; "El Orfanato", de Juan Antonio Bayona; "Splice", de Vincenzo Natali; "Biutiful", de Alejandro González Iñarritu; "Mamá", de Andrés Muschietti y "Los ojos de Julia", de Guillem Morales. El mexicano habitualmente busca otro tipo de películas en su faceta de productor que en la de director. Cintas que más allá de su tirón comercial, tengan un mensaje detrás.
El cineasta volvió a dirigir tras un largo periodo en 2013, con el film de ciencia-ficción "Pacific Rim", donde encontramos que desde el mar aparecen unas monstruosas criaturas llamadas Kaiju que inician una guerra. Para combatirlos la humanidad creará unos robots especiales llamados Jaegers.
Ahora está próximo a lanzar en salas de América del Norte y Sur la película animada que le trajo a México, "The Book of Life", dirigida y coescrita por el también mexicano Jorge R. Gutiérrez, y el año que viene estrenará la gótica "Crimson Peak". Además, asumirá las secuelas de su serie "The Strain" y del film "Titanes del Pacífico / Pacific Rim".
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