Llega a los cines cubanos la cinta independiente "Venecia", de Enrique "Kiki" Alvarez

por © Rosa Inés Soto-NOTICINE.com
''Venecia''
Pese a su origen como producción independiente, "Venecia", estrenada mundialmente en Toronto el año pasado y luego participante en otros festivales como Maryland, Nueva York y Guadalajara  (donde sus tres protagonistas fueron premiadas), llega esta semana a las salas cubanas, dirigida por el cineasta local nrique "Kiki) Alvarez", quien se muestra muy satisfecho por la trayectoria de la película, cuyos personajes, Mayelín, Violeta y Mónica, trabajan en una peluquería estatal. El día del cobro deciden acompañar a una de ellas a comprarse un vestido, iniciando un itinerario de imprevistos que las llevará a pasar la noche y amanecer juntas, con el sueño común de abrir un negocio que les permita ser responsables de sus vidas: un salón privado llamado "Venecia".

El elenco de “Venecia” está conformado por las actrices: Claudia Muñiz, Marianela Pupo, Maribel García, Jazz Vilá y  Jorge Molina.

Kiki Alvarez expresó que “Venecia” es una película donde lo que se cuenta es mínimo, y lo que verdaderamente importa son los personajes, de esas tres mujeres que afrontan sus vicisitudes con la terrible inocencia del devenir. Reveló que al rodar el largometraje nunca pensó que se presentaría en festivales importantes y declaró que no importa con cuánto dinero se hace una película sino como lo cuentas: “Cuando filmamos “Venecia”, nadie de nuestro equipo soñaba con estrenarla en Toronto, y estar ahí demuestra que no importa con cuánto dinero se hace una película, sino lo que cuentas y cómo lo cuentas”, adelantó que la proyección del film estará acompañada de dos cortos: “El pastor de nubes”, de Ingrid Castellanos y “Últimos días de una casa”, basada en la vida de la poetisa nacional Dulce María Loynaz.

Para  el realizador, " 'Venecia' es una película de mujeres y yo, como Ulises en la Odisea, tuve que atarme a un palo para poder escuchar sin volverme loco el hermoso y temible canto de las sirenas".

"Amo a las mujeres, amo a las mujeres de mi película y a ese parloteo incesante con que pueblan la experiencia de viajar juntas hacia la construcción de una amistad", agregó.

De acuerdo a la productora de la película la también cubana Ivette Liang, el proceso de rodaje duró dos semanas, más dos años aproximadamente de postproducción, agregó que tanto la etapa de filmación como la postproducción fueron retos que aceptaron porque así lo asumieron; un riesgo que quisieron afrontar.

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