Cine argentino en la Feria del libro de Cuba

por © Frank Padrón (Cuba)-NOTICINE.com
Borges, los libros y la noche
Borges, los libros y la noche
Pérez, el ratoncito de tus sueñosBorges, los libros y la noche7-II-07

La XVI Feria Internacional del Libro que desde el día 7 hasta el 18 se desarrolla en la capital, y tras ese día y durante todo marzo en el resto del país, cuenta este año a Argentina como país invitado. Con ese motivo, se ha organizado una programación cinematográfica paralela que también homenajea al país austral en su imaginario fílmico.

La céntrica sala Riviera acogerá una muestra contemporánea donde se incluyen títulos recientes, algunos ya vistos en la pasada edición del Festival Latinoamericano de La Habana, a saber: “Nacido y criado”, de Pablo Trapero; “Tiempo de valientes”, de Damián Szifrón; “Crónica de una fuga”, de Israel Adrián Caetano; “Un buda”, de Diego Rafecas; “El regreso de Peter Cascada”, de Nelson Montalbano; “El abrazo partido”, de Daniel Burman; y los documentales “Amando a Maradona” y “Carponi”, así como una matiné infantil los domingos, donde se proyectarán films muy bien recibidos dentro y fuera de Argentina, tales como “Pérez, el ratoncito de tus sueños” y “Patoruzito, la gran aventura”.

Por su parte, la sala Chaplin de la Cinemateca de Cuba estará presentando un ciclo dedicado al destacado cineasta y cantautor Leonardo Favio, que en esa última faceta fuera muy popular en las décadas del 60 y el 70 en nuestro país. Nombre clave en la recta final de lo que fuera conocido como “nuevo cine argentino” en la sexta década del pasado siglo, de Favio podremos revisar (muchos ver por primera ocasión) títulos emblemáticos de su obra como “Nazareno Cruz y el lobo”, “Soñar soñar” o “Gatica, el mono”.

El programa “De Nuestra América” de TV cubana se suma a la reverencia presentando, en su emisión del miércoles 28 de febrero, el film “Borges, los libros y la noche” (1999), docudrama de Tristán Bauer (“Iluminados por el fuego”) sobre Jorge Luis Borges. Aquí alternan cuidadosamente fragmentos de archivo con una representación ficcionada del mundo del narrador y poeta, para lo cual se utiliza a dos competentes actores: el veterano Walter Santa Ana (el escritor ya maduro) y el joven Leonardo Sbaraglia (para el Borges de esa etapa), ambos, dicho sea desde ya, muy ajustados y certeros en sus representaciones. De este modo se arma una esmerada y atractiva biopic que devuelve el complejo mundo del más universal de los escritores argentinos, incursionando en los grandes motivos que trazaron su vida y obra: la biblioteca, la enciclopedia, el tigre, el laberinto, los espejos, la refutación del tiempo, los ciclos y por supuesto, el entrañable Buenos Aires donde vivió siempre y que conoció como pocos.

Imitando el carácter lúdico de su escritura, el sentido del humor y las peculiaridades de una personalidad enigmática como la del biografiado, Bauer erige un film también acronológico, juguetón, que divide y mezcla el tiempo, la realidad y los sueños, el documental y la ficción, en una obra que incorpora el espíritu y la estructura borgianos. Para ello se ha apoyado en un eficaz y sutil montaje y en una fotografía (de Javier Julia) que se regodea en detalles, en penumbras evocadoras del hombre que perdiera la visión en la última etapa de su vida. Por otra parte, el músico Federico Bonasso creó una partitura muy sensible que acompaña las imágenes con un apreciable nivel de sugerencia. Será, sin dudas, una grata propuesta para los telespectadores, sobre todo para los muchos admiradores con que cuenta el autor de “El aleph” entre nosotros.

De modo que, mientras los miles de lectores potenciales que visitan las instalaciones del Morro-Cabaña donde se ubica la feria capitalina (y los otros tantos que la desbordan en sus filiales provinciales) adquieren los muchos libros que nos llegan de Argentina (entre ellos, reediciones del propio Borges y de Julio Cortázar), los cinéfilos encontrarán en las pantallas del cine y la TV una muestra sobresaliente de su cine.