Otaola vuelve a Madrid de la mano del director Raúl Busteros
- por © Ursula Albrecht-NOTICINE.com
17-IV-02
El olvidado escritor vasco y republicano Simón Otaola reaparece a través del cine con la película del director méxicano Raúl Busteros "Otaola o la república del exilio", que este martes se ha proyectado en la Casa de América madrileña. "Es un retrato que parte de la idea de hacer un homenaje al mundo de Otaola", explica su autor. Simón Otaola nació en San Sebastián y se formó en la capital española, donde era asiduo de las peñas literarias. Estuvo exiliado en México tras la Guerra Civil, y allí falleció en el año 1980. Otaola fue un escritor capaz de novelar el exilio español, incluso mientras lo vivía, siendo su especialidad el retrato.
La poética película de Busteros comienza con una noticia : ha muerto en México un exiliado republicano español muy importante. De la noticia se van enterando, de formas diversas, un grupo de exiliados (cada uno en el lugar donde se encuentra y pensando lo que cada uno piensa, solos o acompañados, y reaccionando cada uno a su manera). Cada uno de ellos hará su viaje, directo o en varias etapas, hacia el velorio. Algunos harán estación en el café donde se desarrollan, junto con el velorio, la mayor parte de las escenas.
Busteros se ve reflejado en uno de sus personajes creados en su película, creando así su "propia historia" identificándose con un niño que va acompañado de su padre al velorio. Pero lo principal para el cineasta es "retratar a Otaola, tanto la leyenda cómo la literatura y hacer hablar a sus amigos y de tal manera ir construyendo su imagen". En esta obra de Busteros las historias reales y las imaginarias se combinan. "Nunca fué mi intención hacer un documental sobre el exilio. Esta cinta es una ficción tipo documental", asegura.
El olvidado escritor vasco y republicano Simón Otaola reaparece a través del cine con la película del director méxicano Raúl Busteros "Otaola o la república del exilio", que este martes se ha proyectado en la Casa de América madrileña. "Es un retrato que parte de la idea de hacer un homenaje al mundo de Otaola", explica su autor. Simón Otaola nació en San Sebastián y se formó en la capital española, donde era asiduo de las peñas literarias. Estuvo exiliado en México tras la Guerra Civil, y allí falleció en el año 1980. Otaola fue un escritor capaz de novelar el exilio español, incluso mientras lo vivía, siendo su especialidad el retrato.
La poética película de Busteros comienza con una noticia : ha muerto en México un exiliado republicano español muy importante. De la noticia se van enterando, de formas diversas, un grupo de exiliados (cada uno en el lugar donde se encuentra y pensando lo que cada uno piensa, solos o acompañados, y reaccionando cada uno a su manera). Cada uno de ellos hará su viaje, directo o en varias etapas, hacia el velorio. Algunos harán estación en el café donde se desarrollan, junto con el velorio, la mayor parte de las escenas.
Busteros se ve reflejado en uno de sus personajes creados en su película, creando así su "propia historia" identificándose con un niño que va acompañado de su padre al velorio. Pero lo principal para el cineasta es "retratar a Otaola, tanto la leyenda cómo la literatura y hacer hablar a sus amigos y de tal manera ir construyendo su imagen". En esta obra de Busteros las historias reales y las imaginarias se combinan. "Nunca fué mi intención hacer un documental sobre el exilio. Esta cinta es una ficción tipo documental", asegura.