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Después de 10 días de sangre, terror y gritos, el jurado de la sección oficial en competición del Festival Internacional de Cinema Fantástico de Cataluña, integrado por Nacho Cerdá, Lamberto Bava, Judith Colell, Denise Crosby y William Lustig, entregó el premio a la mejor película a "Holy Motors", del francés Léos Carax, ya estrenada en Cannes, que además se llevó tres premios adicionales a mejor dirección, premio de la crítica y el Mélies de plata al mejor largometraje europeo, una cosecha a todas luces exagerada para un film pretencioso con más detractores que defensores entre el público y la prensa desplazada a Sitges.

El XXVII Festival de Cine Latino Americano de Trieste, en Italia, que se desarrollará del 20 al 28 de octubre, proyectará 180 cintas, de las que 15 competirán en el apartado oficial, representando a 12 países del centro y sur de América. El certamen, que se autocalifica como "la más amplia reseña de Europa sobre la producción cinematográfica, video y televisiva del continente latino" llevará a cabo homenajes a los directores Luis Estrada (México), Aldo Francia (Chile), Camila Loboguerrero (Colombia) y al escritor brasileño Jorge Amado, con películas inspiradas en sus obras.

Luego de "Platillos Volantes" y "El gran Vázquez", el guionista de cómic devenido cineasta Óscar Aibar, volvió a sentarse en la silla del director para contarnos en "El bosque", presentada en el Festival de Stiges, una nueva historia de giro fantástico que se ubica en los comienzos de la Guerra Civil. Aunque para el director, el contexto histórico no es precisamente lo fundamental.

Marco Müller cumplirá su promesa, en la primera edición que dirige del Festival de Roma tras su abrupta salida de la Mostra de Venecia, de ofrecer 60 estrenos mundiales en el certamen de la capital italiana, que se desarrollará entre el 9 al 17 de noviembre, y entre ellos habrá varios iberomaericanos. En el apartado principal, entre los 13 candidatos a los Marco Aurelio de Oro y de Plata (faltan dos que serán "sorpresa") está "Morir nunca" ("Mai morire"), del mexicano-español Enrique Rivero ("Parque Vía"), con Margarita Saldaña, Amalia Salas y Juan Chirinos, en competencia, y la española "Una pistola en cada mano", del catalán Cesc Gay, interpretada por Ricardo Darín, Luis Tosar y Javier Cámara, que cerrará oficialmente el festival romano fuera de concurso.

Una primera película siempre supone un reto para todo cineasta, desafío que se duplica cuando el novel director debe lidiar no sólo con la crítica a su trabajo sino con las comparaciones, más aún cuando el debutante es hijo de David Cronenberg, se llama Brandon y estrenó en Cannes antes de llegar a Sitges con su "Antiviral".