Crítica: "Tampoco tan grandes", el ingenio importa más que el tamaño
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Por Edurne Sarriegui
"Tampoco tan grandes" (2019) es el segundo largometraje de Federico Sosa ("Yo sé lo que envenena") con guion de los hermanos Maxi y Paula Reca que estrenan también su recién formada productora. Paula, además, se hace cargo de la interpretación de la protagonista en esta comedia que trata, con un humor muy particular, la crisis existencial cuando el paso a la edad adulta se hace inminente.
Lola tiene la vida aparentemente resuelta. Se acerca a la treintena, trabaja como publicista en una agencia en la que se desenvuelve con soltura y está por casarse. Pero una llamada inesperada le hará saber que el padre que nunca conoció y que creía muerto hace muchos años acaba de fallecer, que su fecha de cumpleaños no es la que siempre supo y que en caso de angustia necesita recurrir a su ex, Teo (Andrés Ciavaglia), al que hace tres años no ve.
Teo lidia como puede con un trabajo que no le satisface y con el cuidado de su hermana Rita (María Canale), una adicta en recuperación.
Convocada por un abogado, Lola debe viajar a Mar del Plata para hacerse cargo de una herencia. Y hacia allí parte, acompañada por Teo y Rita, en la vieja camioneta de transporte escolar de su exnovio. Pero no se acaban ahí las sorpresas. Al llegar a la ciudad conocerá a Natalio (Miguel Ángel Solá), la excéntrica pareja gay de su padre, y continuarán viaje todos juntos hasta Bariloche para tomar posesión de los terrenos heredados y esparcir las cenizas de su padre según su última voluntad.
Como toda road movie, el camino será propicio para que se produzcan cambios en los compañeros de travesía. El humor de características propias que trasunta la cinta, se entrevera con naturalidad con momentos más dramáticos que el personaje de Solá se encarga de aflojar con sus sentencias sobre el amor.
La cinta acierta en su inicio provocando expectativa sobre cuáles son los vínculos que unen a los personajes y cuál es realmente la situación, sorprendiendo al espectador en su planteo. Después el guion camina por lugares más habituales y previsibles.
Seguramente condicionada por un presupuesto acotado, resuelve con eficiencia las limitaciones de la falta de escenarios naturales y el elenco acotado.
Plagada de metáforas, "Tampoco tan grandes" es una propuesta singular que muestra una buena dosis de ingenio. Y, aunque no es sorprendente, resulta entretenido averiguar si finalmente sus personajes crecerán o no.
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"Tampoco tan grandes" (2019) es el segundo largometraje de Federico Sosa ("Yo sé lo que envenena") con guion de los hermanos Maxi y Paula Reca que estrenan también su recién formada productora. Paula, además, se hace cargo de la interpretación de la protagonista en esta comedia que trata, con un humor muy particular, la crisis existencial cuando el paso a la edad adulta se hace inminente.
Lola tiene la vida aparentemente resuelta. Se acerca a la treintena, trabaja como publicista en una agencia en la que se desenvuelve con soltura y está por casarse. Pero una llamada inesperada le hará saber que el padre que nunca conoció y que creía muerto hace muchos años acaba de fallecer, que su fecha de cumpleaños no es la que siempre supo y que en caso de angustia necesita recurrir a su ex, Teo (Andrés Ciavaglia), al que hace tres años no ve.
Teo lidia como puede con un trabajo que no le satisface y con el cuidado de su hermana Rita (María Canale), una adicta en recuperación.
Convocada por un abogado, Lola debe viajar a Mar del Plata para hacerse cargo de una herencia. Y hacia allí parte, acompañada por Teo y Rita, en la vieja camioneta de transporte escolar de su exnovio. Pero no se acaban ahí las sorpresas. Al llegar a la ciudad conocerá a Natalio (Miguel Ángel Solá), la excéntrica pareja gay de su padre, y continuarán viaje todos juntos hasta Bariloche para tomar posesión de los terrenos heredados y esparcir las cenizas de su padre según su última voluntad.
Como toda road movie, el camino será propicio para que se produzcan cambios en los compañeros de travesía. El humor de características propias que trasunta la cinta, se entrevera con naturalidad con momentos más dramáticos que el personaje de Solá se encarga de aflojar con sus sentencias sobre el amor.
La cinta acierta en su inicio provocando expectativa sobre cuáles son los vínculos que unen a los personajes y cuál es realmente la situación, sorprendiendo al espectador en su planteo. Después el guion camina por lugares más habituales y previsibles.
Seguramente condicionada por un presupuesto acotado, resuelve con eficiencia las limitaciones de la falta de escenarios naturales y el elenco acotado.
Plagada de metáforas, "Tampoco tan grandes" es una propuesta singular que muestra una buena dosis de ingenio. Y, aunque no es sorprendente, resulta entretenido averiguar si finalmente sus personajes crecerán o no.
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