Vittorio Storaro se despide de México
- por © Víctor Uribe (México)-NOTICINE.com
30-IX-03
Luego de terminar su trabajo en "Zapata", el camarógrafo italiano Vittorio Storaro ofreció una conferencia magistral en la Cineteca Nacional (un día antes de dejar México este lunes), ante un público conformado principalmente por jóvenes. Fue una charla que se centró en dos de sus libros, y este año se completará la trilogía, que enseñará a las nuevas generaciones a "escribir con luz". El director de fotografía (aunque a él no le gusta ese título) declaró que dichos libros no son trabajos biográficos, sino parte de su investigación, una búsqueda que lo ha llevado a descubrir su propia vida y el significado de la misma.
El asiduo colaborador de Bernando Bertolucci demostró su sencillez en todo momento, y señaló la importancia de equilibrar la parte tecnológica con la filosofía, apoyado en los conocimientos básicos sobre literatura, música y arquitectura. También dio una cátedra sobre la simbología y utilización de los colores, luces y sombras en sus trabajos.
Storaro mencionó que entre todos los guiones que recibió últimamente el que más lo convenció fue el de "Zapata", en especial por la conexión con los antepasados. Él se acercó a la cultura mexicana a través de los muralistas, que le permitieron comprender la historia del país.
Nacido en Roma en 1940, desde niño Storaro se vio inmerso en el ambiente cinematográfico pues su padre le permitió entrar a su lugar de trabajo: una cabina de proyección. A los 16 años, tras estudiar técnica fotográfica en el instituto Duca D’ Aosta, quiso concursar para entrar al Centro Experimental de Cinematografía; no obstante, para hacerlo debía tener 18 años. Cuando cumplió la mayoría de edad se encontró con que el reglamento había cambiado, y que sólo podían participar mayores de 20 años. Tras exigir sus derechos, Storaro presentó su examen y resultó uno de los tres estudiantes escogidos, de entre 500, para el curso.
Tras varios años de crisis en la industria cinematográfica italiana, y durante los cuales se dedicó a estudiar diversas disciplinas artísticas, Storaro se desempeñó como asistente de director de cámaras en "Prima della rivoluzione" (1964), primer largometraje de Bernardo Bertolucci, realizador con el cual ha mantenido una larga y productiva colaboración profesional, cuyos hitos han sido "El conformista", "La estrategia de la araña", "El último tango en París", "Novecento" y "El último emperador".
Sin embargo, su compatriota Bertolucci no ha sido el único gran director en contar con sus servicios tras la cámara, ya que también Francis F. Coppola ("Apocalypse now", "Corazonada"), Warren Beatty ("Rojos", "Dick Tracy"), Carlos Saura ("Tango", "Goya en Burdeos") o Alfonso Arau ("Cachitos picantes", "Zapata") han disfrutado de su visión rica en colores y texturas.
Luego de terminar su trabajo en "Zapata", el camarógrafo italiano Vittorio Storaro ofreció una conferencia magistral en la Cineteca Nacional (un día antes de dejar México este lunes), ante un público conformado principalmente por jóvenes. Fue una charla que se centró en dos de sus libros, y este año se completará la trilogía, que enseñará a las nuevas generaciones a "escribir con luz". El director de fotografía (aunque a él no le gusta ese título) declaró que dichos libros no son trabajos biográficos, sino parte de su investigación, una búsqueda que lo ha llevado a descubrir su propia vida y el significado de la misma.
El asiduo colaborador de Bernando Bertolucci demostró su sencillez en todo momento, y señaló la importancia de equilibrar la parte tecnológica con la filosofía, apoyado en los conocimientos básicos sobre literatura, música y arquitectura. También dio una cátedra sobre la simbología y utilización de los colores, luces y sombras en sus trabajos.
Storaro mencionó que entre todos los guiones que recibió últimamente el que más lo convenció fue el de "Zapata", en especial por la conexión con los antepasados. Él se acercó a la cultura mexicana a través de los muralistas, que le permitieron comprender la historia del país.
Nacido en Roma en 1940, desde niño Storaro se vio inmerso en el ambiente cinematográfico pues su padre le permitió entrar a su lugar de trabajo: una cabina de proyección. A los 16 años, tras estudiar técnica fotográfica en el instituto Duca D’ Aosta, quiso concursar para entrar al Centro Experimental de Cinematografía; no obstante, para hacerlo debía tener 18 años. Cuando cumplió la mayoría de edad se encontró con que el reglamento había cambiado, y que sólo podían participar mayores de 20 años. Tras exigir sus derechos, Storaro presentó su examen y resultó uno de los tres estudiantes escogidos, de entre 500, para el curso.
Tras varios años de crisis en la industria cinematográfica italiana, y durante los cuales se dedicó a estudiar diversas disciplinas artísticas, Storaro se desempeñó como asistente de director de cámaras en "Prima della rivoluzione" (1964), primer largometraje de Bernardo Bertolucci, realizador con el cual ha mantenido una larga y productiva colaboración profesional, cuyos hitos han sido "El conformista", "La estrategia de la araña", "El último tango en París", "Novecento" y "El último emperador".
Sin embargo, su compatriota Bertolucci no ha sido el único gran director en contar con sus servicios tras la cámara, ya que también Francis F. Coppola ("Apocalypse now", "Corazonada"), Warren Beatty ("Rojos", "Dick Tracy"), Carlos Saura ("Tango", "Goya en Burdeos") o Alfonso Arau ("Cachitos picantes", "Zapata") han disfrutado de su visión rica en colores y texturas.