Jorge Perugorría y Fernando Pérez se solidarizan con movimiento cubano por la libertad de expresión
- por © Corresponsal (Cuba)-NOTICINE.com
La presencia del cineasta vivo más prestigioso del país, Fernando Pérez, y el actor más internacional, Jorge Perugorría, facilitó la noche de este viernes que un grupo de representantes del gremio artístico cubano fuese recibido en el Ministerio de Cultura, para pedir el derecho a la libre expresión y creación y la puesta en libertad de artistas detenidos en los últimos días en la capital cubana.
A lo largo de varias horas, cientos de personas, en su mayoría jóvenes, se manifestaron ante el edificio ministerial para pedir "diálogo", luego de la represión policial de días precedentes contra miembros del llamado "Movimiento San Isidro", surgido de la calle de La Habana Vieja donde se encerraron varios muchachos en huelga de hambre solidaria con un rapero detenido por la policía.
El director de cine Fernando Pérez ("La vida es silbar") y el actor Jorge Perugorría ("Fresa y chocolate") quisieron unirse a los manifestantes ante la sede de Cultura en el barrio habanero de El Vedado para facilitar que una comisión de los movilizados fuera recibida por el viceministro Fernando Rojas, tras más de nueve horas de protesta, en las que no fueron acosados por la policía, que no obstante acordonó la zona.
El popular y premiado actor Jorge Perugorría, "Pichi", quien es director del Festival de Gibara, en la provincia oriental de Holguín, dijo a los periodistas que llegó "la hora de dialogar y creo que ustedes los jóvenes deben ser escuchados". Por su parte, el veterano cineasta Fernando Pérez explicó su presencia en el Ministerio "para decirles que los reciban, y que ese va a ser el inicio de un nuevo lenguaje".
La reunión acabó con un principio de acuerdo, y el compromiso del ministro de Cultura, Alpidio Alonso Grau, de dialogar con portavoces del Movimiento San Isidro en los próximos días. El representante gubernamental que les recibió garantizó que los manifestantes pudieran abandonar la protesta hacia sus casas sin ser identificados o detenidos por la Policía Nacional Revolucionaria, así como se comprometió a interesarse por la suerte de los artistas detenidos.
Las demandas del movimiento giran en torno a la libertad de creación y expresión, el derecho al disenso, la posibilidad de desarrollar su trabajo de manera independiente y sin un registro en organismos oficiales y el fin de la represión contra la disidencia.
Corresponsales extranjeros y periodistas independientes cubanos pudieron acceder a los manifestantes durante su protesta, y los videos que éstos grabaron y subieron a redes sociales no han sido eliminados por el régimen cubano. Observadores consideran los hechos del viernes como un hito histórico en la isla, donde las manifestaciones de protesta suelen ser reprimidas y jamás miembros de las instituciones gubernamentales han querido negociar con disidentes de manera oficial y pública.
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A lo largo de varias horas, cientos de personas, en su mayoría jóvenes, se manifestaron ante el edificio ministerial para pedir "diálogo", luego de la represión policial de días precedentes contra miembros del llamado "Movimiento San Isidro", surgido de la calle de La Habana Vieja donde se encerraron varios muchachos en huelga de hambre solidaria con un rapero detenido por la policía.
El director de cine Fernando Pérez ("La vida es silbar") y el actor Jorge Perugorría ("Fresa y chocolate") quisieron unirse a los manifestantes ante la sede de Cultura en el barrio habanero de El Vedado para facilitar que una comisión de los movilizados fuera recibida por el viceministro Fernando Rojas, tras más de nueve horas de protesta, en las que no fueron acosados por la policía, que no obstante acordonó la zona.
El popular y premiado actor Jorge Perugorría, "Pichi", quien es director del Festival de Gibara, en la provincia oriental de Holguín, dijo a los periodistas que llegó "la hora de dialogar y creo que ustedes los jóvenes deben ser escuchados". Por su parte, el veterano cineasta Fernando Pérez explicó su presencia en el Ministerio "para decirles que los reciban, y que ese va a ser el inicio de un nuevo lenguaje".
La reunión acabó con un principio de acuerdo, y el compromiso del ministro de Cultura, Alpidio Alonso Grau, de dialogar con portavoces del Movimiento San Isidro en los próximos días. El representante gubernamental que les recibió garantizó que los manifestantes pudieran abandonar la protesta hacia sus casas sin ser identificados o detenidos por la Policía Nacional Revolucionaria, así como se comprometió a interesarse por la suerte de los artistas detenidos.
Las demandas del movimiento giran en torno a la libertad de creación y expresión, el derecho al disenso, la posibilidad de desarrollar su trabajo de manera independiente y sin un registro en organismos oficiales y el fin de la represión contra la disidencia.
Corresponsales extranjeros y periodistas independientes cubanos pudieron acceder a los manifestantes durante su protesta, y los videos que éstos grabaron y subieron a redes sociales no han sido eliminados por el régimen cubano. Observadores consideran los hechos del viernes como un hito histórico en la isla, donde las manifestaciones de protesta suelen ser reprimidas y jamás miembros de las instituciones gubernamentales han querido negociar con disidentes de manera oficial y pública.
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