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Por Agustín Díaz Yanes *

Solo quiero caminar surgió mientras estábamos rodando "Alatriste". Quería hacer una película de atracadoras con cuatro mujeres, así que nada más terminar "Alatriste" me puse a escribirlo. Por eso hemos rodado enseguida. Y tuve el guión bastante rápido. En realidad era una historia que tenía pensada desde hacía diez años, de las que dejas olvidadas y luego recuperas.

Desde el pasado día 24 en las salas de cine de Venezuela, la opera prima "La Virgen Negra", de Ignacio Castillo Cottin, permite ver a tres importantes figuras del cine iberoamericano, la española Carmen Maura, la mexicana Angélica Aragón y el brasileño Matheus Nachtergaele, al lado de varios conocidos actores nacionales, como Caridad Canelón, Francisco Díaz, Héctor Manrique... Y junto a ellos está la linda modelo, presentadora, comunicadora social y ahora actríz Jeska Lee Ruiz, quien está más que dispuesta a seguir en el cine después de lo aprendido en esta experiencia.

- ¿Tenía experiencias anteriores en cine?
Actuando no. Había tenido la oportunidad de trabajar como presentadora de Noticolor en Bolívar Films, y aunque son trabajos y experiencias  totalmente distintas la sensación de verte en pantalla grande nunca deja de ser intimidante. Ahora la expectativa de ver mi primer trabajo como actríz en cine me tiene muy ansiosa, sobre todo por la autocrítica.

- ¿Cómo llegó al casting de la película?
Me llamó el Sr. Manuel Maiting, con el cual ya había hecho varios castings para películas venezolanas, fue un llamado grande en la Sala de conciertos del Ateneo de Caracas, cuando llegué había muchísima gente audicionando para varios de los personajes de la película  por lo que  estuve a punto de regresarme a la casa... Afortunadamente Ana Gabriela Sánchez (Jefa de Casting de LVN) me insistió para que me quedara para hacer la prueba. Luego me llamaron a un callback con Ignacio Castillo director del film y con William Cuao quien fue nuestro guía actoral durante un mes de ensayos. Luego de dos semanas de ensayos y de intenso trabajo  me dieron la noticia de que había obtenido mi personaje dentro de la película...Fue muy emocionante.

- Háblenos de su personaje...
Soy Silvia, una mujer bastante sencilla, amorosa e inocente, la cual es víctima de uno de los tantos deseos concedidos por la nueva virgen del pueblo. Es una mujer incrédula y apacible, y su gran fortaleza es el amor. Silvia representa la esperanza a pesar del sufrimiento, ella confía en el poder del amor por sobre todas las cosas, en su corazón no existen odios ni rencores a pesar de la traición, Silvia es la confianza, la fidelidad, la paciencia y el perdón...

- ¿Cómo fue la experiencia de trabajar con Carmen Maura, Angélica Aragón y Caridad Canelón?
Lo máximo, con Carmen Maura aprendí muchísimas lecciones, más de vida que de actuación, afortunadamente  compartimos bastante tras cámara y  tuvimos la oportunidad de conversar acerca de las particularidades de ser actríz. Me hizo sentir dichosa y afortunada del apoyo que tengo de mi familia para llevar esta carrera. Es una persona sumamente observadora y cuidadosa de su trabajo. Angélica Aragón me impactó solamente con su presencia, es difícil describirla, pero es un ser mágico, su mirada y sus ojos son poderosos, tiene una sabiduría de su profesión totalmente abrumadora, es dulce y apacible... es hermosa. Caridad Canelón me dejó muchísimo, en la película estamos bastante cercanas y por lo que trabajamos mucho tiempo juntas, aprendí disciplina, verdad y autenticidad; honestamente me contagié de su inmensa sabiduría y aplomo para construir un personaje con sinceridad, fue maravilloso trabajar junto a ella, tiene una mezcla de dulzura y severidad que la hacen perfecta.

- ¿Tiene pensado seguir haciendo cine?
Es lo que más deseo ahora, "La Virgen Negra" me dejó literalmente "picada". Este es un trabajo hermoso que te da novedades y aprendizaje con cada nuevo día.

- ¿Cuál es su papel soñado?
Es difícil responder esta pregunta... porque cada vez que veo una película que me gusta pienso que me encantaría tener la oportunidad de ser ese personaje que vi. Me gustaría ser alguien que nunca he sido, como una asesina, una mujer sumamente racional y calculadora, una víctima total o un personaje característico dentro de una comedia. También sueño frecuentemente con ser una superheroína de acción, de esas que vence a sus enemigos con puños, patadas y superpoderes.

Este jueves aterriza en las carteleras argentinas, tras haber participado en Biarritz, el primer largo que dirige Esteban Menis, "Incómodos", una historia entre la comedia y el drama, con tres personajes en la frontera entre la juventud y la madurez, que buscan su sitio mientras añoran la tranquilidad de la infancia. Sus responsables la describen como una comedia ácida, oscura; una historia de amor desparejo, o, acaso, una aventura infantil demasiado grande.

La semana de cine húngaro contemporáneo (2000-07) que desde hace varios días transcurre en la Habana, concretamente en el cine Riviera, está dejando en los espectadores sensaciones divididas. Por una parte, el cine más "serio"  está decepcionando; la cinta que sirvió de premiére, "Glamour" (2000), de Frigyes Gödrös, que abarca cinco décadas del devenir histórico de Hungría en el siglo XX,  deteniéndose en los sucesos más relevantes desde 1918 hasta 1954, con una historia de amor (la del judío Imre y la alemana Gerda) como hilo conductor, resulta ser una obra pesada y amorfa.

- Los charolastras han mostrado este último fin de semana sus sentimientos, cada uno por su lado. Gael García Bernal contó en Wikén que aunque últimamente haya pasado bastante tiempo en Madrid -a la espera de su próxima paternidad- o en otras ciudades, se sigue considerando chilango y no piensa en mudarse: "No quiero vivir en otro país. Siento la responsabilidad de vivir en México, pero también siento que quiero hacerlo. Amo y odio a la Ciudad de México, a mí nadie me mueve de mi ciudad”.